MIERCOLES 1o. DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť Humala, dispuesto a asumir los costos de su acción


Cercó el ejército al militar sublevado contra Fujimori

Ť Desisten del levantamiento unos 40 soldados peruanos

Ť Se respetará la vida del teniente coronel: mandos castrenses

Afp, Reuters, Ap y Dpa, Lima, 31 de octubre Ť Al frente de apenas siete hombres, el sublevado teniente coronel Ollanta Humala dijo hoy que asumirá el costo de su insurrección, aunque admitió estar dispuesto a dialogar con el gobierno de Alberto Fujimori, mientras el ejército tiende un cerco al militar rebelde en las zonas altas de la región surandina de Perú.

Al menos 40 de los hombres que acompañaban a Humala desistieron de seguir bajo su mando y llegaron a bordo de helicópteros este mediodía hasta al aeropuerto de Moquegua, a unos mil kilómetros de Lima. La captura del grupo de sublevados sería inminente, según fuentes castrenses que requirieron el anonimato.

En comunicación telefónica con un canal de televisión limeño, el militar rebelde dijo que "hay comandantes que me ofrecieron su apoyo, eso lo espero", pero reconoció que "del dicho al hecho hay mucho trecho".

Humala, que culpa a Fujimori de sumir a Perú en "una convulsión" por su relación con el ex asesor de inteligencia Vladimiro Montesinos durante los diez años que tiene en el poder, aseguró que "hay esperanzas de diálogo. Me gustaría comunicarme con la máxima autoridad, que puede ser el comandante general del ejército o el presidente Fujimori".

"El costo lo voy a asumir, espero que no haya derramamiento de sangre", agregó el militar de 38 años. Por lo pronto, el defensor del Pueblo, Jorge Santistevan, se ofreció como mediador entre el líder militar rebelde y el gobierno.

A su vez, el comandante de la región sur de Perú, general Abraham Cano, garantizó que las fuerzas armadas respetarán la vida de Humala, en momentos en que comandos del ejército estrechan el cerco sobre el grupo de rebeldes en zonas aldeañas a Moquegua, cerca de la frontera con Chile. La zona donde se encontraría el oficial, quien está secundado por su hermano Antauro -un ex mayor retirado del ejército- es bastante accidentada, y se ubica a más de 4 mil metros de altitud.

Mientras, el gobierno seguía con las manos vacías tras la fallida búsqueda de Montesinos. Perú vive una crisis política que comenzó en septiembre, luego de la difusión de un video que mostró al entonces asesor de Inteligencia de Fujimori sobornando a un senador, lo que obligó al presidente a convocar a elecciones anticipadas.

Montesinos buscó sin éxito asilo en Panamá, y su súbito retorno a Lima agravó la crisis, en medio de rumores de golpe de Estado y de pugnas en el poder militar.

Entre algunos analistas políticos, la rebelión de Humala sería una "cortina de humo" para distraer la atención del hecho de que el paradero de Montesinos sigue siendo un misterio. Sin embargo, Humala responde que "me he jugado mi profesión militar. He puesto mis 17 años de servicio, que no voy a poner para hacer una cortina de humo para una tercera persona".

En la ciudad de Tacna medio centenar de reservistas manifestaron nuevamente este martes en apoyo al teniente coronel rebelde, quien cosecha simpatías entre la oposición, que en su inmensa mayoría considera su gesto como el de un idealista.

En tanto, un paro indefinido de agricultores cocaleros mantenía en tensión la zona nororiental de la selva peruana, donde la víspera siete campesinso fueron detenidos y otros 20 fueron heridos tras enfrentarse con fuerzas de seguridad.

La Asociación de Agricultores y Productores de Hoja de Coca empezó el lunes su protesta por la "erradicación forzosa y violenta" de las plantaciones, dijo Simeón Juanán, presidente del gremio que abarca la zona del Alto Huallaga.