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Ť Lourdes Galaz Ť

Surrealismo estadunidense

En Washington nadie espera cómputos confiables Ť No es el primer fraude en elecciones presidenciales Ť Ahora les toca perder a los demócratas Ť Bush ya tiene armado su gabinete

En el país de la democracia y el libre mercado, la política se hace como en cualquier parte del mundo... también las elecciones. En Estados Unidos tienen más valor los acuerdos de la cúspide del poder político, financiero y comercial, que los votos ciudadanos. Entre veras y bromas, los políticos estadunidenses y de otras latitudes aciertan que si lo ocurrido en Florida hubiera acontencido en algún país bananero, la televisión ya estaría pasando escenas de un golpe de Estado, o cuando menos de manifestaciones callejeras de los inconformes con los cómputos de los comicios. O bien, los observadores electorales que nunca faltan, estarían demandando la intervención de la OEA y hasta de la ONU, para exigir un nuevo proceso... y nada de eso ocurre en el país de los guardianes de la democracia mundial. ƑAlguien ha visto a Jimmy Carter y sus observadores?

En Nueva York, luego de besar a Hillary por su escaño en el Senado, el presidente Clinton alertó, al cierre de las urnas, a sus compatriotas y al mundo entero: "El pueblo ya se manifestó, pero tomará un poco de tiempo saber qué decidieron". Cuatro días después, hay certidumbre de que la cúspide política y financiera ya convino con demócratas y republicanos la entrega de la Casa Blanca a George W. Bush. "Más vale una negociación que poner en riesgo el prestigio y la estabilidad política de EU", opinaron los líderes de la política yanqui... Y, tranquilo, confiado en la experiencia y los buenos oficios de su representante en la mesa de negociaciones, el ex canciller James Baker, el virtual presidente por los republicanos se fue de weekend a su rancho, cerca de Wacco, Texas. Ya comenzó a palomear la lista de su gabinete presidencial.Y al concluir la larga semana electoral y ya con virtual presidente, sólo hay que esperar unos días para la entrevista Bush-Gore. ƑDónde están Jimmy Carter y sus cruzados de la democracia que salvan honras de pueblos en fraudes electorales, como en el México de antes (aquí, democracia habemus), en Perú, Cuba, Panamá, El Salvador... y exigen sanciones políticas y económicas de Washington contra estados antidemocráticos?

šIn God we trust!... šNadie se roba la presidencia de Estados Unidos!, afirmó Richard Nixon cuando John Kennedy le ganó la Casa Blanca en una elección, muy cerrada. En aquellos comicios de 1960, se advirtió que el vicepresidente Nixon habría perdido la mayoría en el Colegio Electoral por acciones fraudulentas de los demócratas, confirmadas por lo menos en Illinois y Texas. El Partido Republicano y su candidato presidencial decidieron no impugnar los resultados. Una semana después de la elección Nixon y Kennedy se reunieron. Acordaron que ninguno de los dos llevaría el asunto a los tribunales. Años después, en 1978, Nixon declaró que un recuento de votos se hubiera llevado más de año y medio, tiempo en el que se habría dudado de la legitimidad de la elección del presidente Kennedy, no sólo en su país sino en el resto del mundo. Y estos comentarios de Nixon serían luego de otro fraude electoral en el país de la democracia. En 1976, el presidente Gerald Ford perdió la relección en el Colegio Electoral. Ford habría ganado la Casa Blanca por cuatro años más al demócrata James Carter (el hoy defensor de la democracia "voto por voto") y se lo impidió otro fraude electoral. Un acuerdo en la cúspide política y financiera dio el triunfo al demócrata... Jamás el sistema electoral estadunidense ha determinado un resultado preciso en las elecciones presidenciales. Son bien conocidas las anécdotas de fraudes en Lousiana y Florida. También en las Carolinas y en Texas. Quizás por ello, James Baker -el negociador de Bush- ahora trae a cuento, allá en Florida, las otras elecciones fraudulentas que han costado la presidencia a los republicanos y advierte que ahora les toca perder a los demócratas "por el bien del país y su prestigio mundial". ƑDónde se esconde el demócrata Jimmy Carter?

Bill Clinton, desde Washington, declaró, mientras se iniciaba un recuento en Florida, que "ningún americano podrá decir jamás: mi voto no vale nada". Y nadie podrá saber jamás cuántos sufragios se emitieron el 7 de noviembre. Los asesores del virtual presidente Bush acudieron a tribunales federales para bloquear la petición del candidato perdedor, Al Gore, de que sean escrutados manualmente los votos de los floridanos en varios condados. Y Baker, como negociador principal, explicó que la estrategia de los republicanos pretende "preservar la integridad, la consistencia, la igualdad y la finalidad" de la votación del martes, que no sólo mostró irregularidades en Florida. Hay evidencias de fraude en otros estados y el teem de Bush advierte que si los demócratas insisten en el conteo manual, solicitarían recuentos en Oregon, donde todavía no hay nada para nadie. También en Nuevo México, donde ya se le quitó el triunfo a Gore. En Wisconsin y Iowa, donde hasta hay urnas quemadas o desaparecidas. "No vemos razón alguna para que no se cuenten los votos de los electores", señala Doung Hattaway, vocero de la campaña de Gore. "Esto contribuye a asegurar un cómputo completo, justo y preciso de los sufragios", dicen los que se dicen robados. Práctico y experto en la negociación, el ex canciller Baker reviró que un recuento a mano tenía más posibilidades de error que uno a máquina. "Las máquinas no son ni republicanas ni demócratas, y por lo tanto no pueden ser parciales"... y no aparecen Jimmy Carter y su red de observadores.

Baker no recuerda, al menos públicamente, que la máquina electoral estadunidense funciona desde 1787, aunque fue renovada en 1892. Hace más de un siglo se sabe que opera mal y es que es fácil manipularla para hacer fraudes desde Palm Beach en Florida hasta Portland en Oregon. Ya Hillary Clinton anuncia que al entrar al Senado se sumará a quienes pretenden una enmienda constitucional que desaparezca el Colegio Electoral y que anule a esos 538 grandes electores que nadie conoce, aunque definan la elección presidencial. Argumenta la virtual senadora: "En una democracia se debe respetar el voto popular, y en Estados Unidos llegó el momento de que el pueblo elija a su presidente". Claro, aceptar la enmienda constitucional se llevaría varios años...

Por lo pronto los demócratas ya perdieron la Casa Blanca y los republicanos tienen presidente electo. Para salvar al sistema está la gran prensa estadunidense, como The New York Times o The Washington Post. En sus editoriales, la gran prensa advierte contra un proceso de impugnación de los comicios que se prolongue demasiado, pues -opinó el Times este viernes- "minaría la legitimidad de las elecciones, paralizaría la sucesión y pondría nervioso a un mundo que mira a EU como un modelo de estabilidad política". Como la política, el control que se ejerce sobre los medios desde el poder es igual en EU que en todo el mundo. Y la política, tan veleidosa, cobra los yerros al vicepresidente Gore, quien ya sufre el escarnio de sus correligionarios. Justifican la derrota (igual que en el PRI y entre los amigos de Labastida) con un "perdimos porque tuvimos un candidato que no le gustaba a la gente... no logró la victoria ni en su estado". De haber ganado en Tennessee, perdiendo Florida habría conquistado la Casa Blanca y se habría evitado la crisis electoral que hizo evidente una democracia tan imperfecta en Estados Unidos como en el trópico surrealista de Tabasco... o en los Altos de Jalisco, donde hoy tienen elecciones.

En 3 tiempos

Ť La oposición priísta impugna a priori la elección en Jalisco

ŤDe todo en el debate por el control de los medios

Ť Rematan bienes de Juan Gabriel

Como toda oposición que se respete (eso parece), priístas de Jalisco intentaron socavar la autoridad del Consejo Estatal Electoral, la víspera de los comicios para elegir al gobernador, a 124 ayuntamientos y al Congreso local. A 48 horas de las elecciones, cuando los sondeos dan entre 5 y 10 puntos de ventaja al candidato del PAN, Francisco Ramírez Acuña, la oposición priísta logró poner en entredicho la imparcialidad y equidad del CEE y obligó al panista gobernador, Alberto Cárdenas, a retirar los anuncios donde invitaba a votar este domingo. En la contienda hay 11 partidos en campaña, aunque la batalla será PAN-PRI. Desde la víspera, los del PRI amenazaron con desconocer los resultados de los comicios si la autoridad electoral no corrige las anomalías y estas afectan el sentido del cómputo. El priísmo perdió Jalisco hace seis años, en lo que sería la primera derrota tricolor en el sexenio de Zedillo... después vendría la debacle.

Si le cuento que de septiembre a la fecha se han realizado 22 foros, congresos, seminarios y demás, para debatir sobre el derecho a la información que el Estado está obligado a garantizar, usted podría pensar que hay interés en mejorar la legislación, en hacer transparente la relación de los medios con el Estado, también por dar validez a los derechos de los periodistas... en fin, ya en los debates se advierte que hay de todo: desde afanes de ciertos grupos de derecha por regular los contenidos en los medios, hasta interés del nuevo gobierno por establecer mecanismos legales de control a las empresas del ramo, conservando ciertos privilegios a los medios electrónicos. Y ayer, Martha Sahagún, la vocera del presidente electo, clausuró uno de estos actos en Morelia. Con todo y los enojos de su jefe Fox con la prensa, la vocera habló de los buenos propósitos...y de un periodismo responsable.

Ni Temo, ni Chente, Francisco será presidente, cantaba Juan Gabriel hace apenas unos meses. Y entonces, el candidato Vicente Fox le reviró que lo mandaría, con todo y su cancioncita, a cantar al Metro. Como si fuera maldición foxista, el cantante podría quedarse sin un centavo ahora que los obsequiosos funcionarios de Hacienda le cancelan cualquier posibilidad de arreglo. Ayer la SHCP públicó la primera almoneda en la que pone a remate 13 propiedades de Alberto Aguilera Valadez (Juan Gabriel). Este año 2000, el del Noa Noa trae al santo de espaldas: se equivoca de candidato presidencial y el fisco le cobra un adeudo acumulado en nueve años por 22 millones 353 mil pesos, con todo y recargos. Como el remate de sus bienes es el 13 de diciembre, a Juan Gabriel no le queda más que rezarle a la Guadalupana, porque pedirle frías a Chente, ni se le ocurre.

Ť Ilustraciones: Mauricio Gómez Morín /serie Llover sobre Mojado

Ť Fax: (5)262 4332 Ť [email protected]