MARTES 14 DE NOVIEMBRE DE 2000

Recomienda el cobro de mayores cuotas en la UNAM


Censura el BM la gratuidad educativa

paristas-unam María Esther Ibarra Ť Jamil Salmi, jefe del Grupo de Educación para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, aseguró que México "no ha superado el mito de la gratuidad" educativa, y consideró injustificado que en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) no se cobren cuotas, cuando en el resto de las universidades públicas del país los alumnos pagan el costo de sus estudios.

De hecho, "con todo y su drama (la huelga estudiantil), la UNAM no es gratuita porque la ciudadanía, a través de sus impuestos, financia la educación en todos sus niveles", puntualizó, al término de una conferencia en el aula magna Santa Teresa de la Universidad Iberoamericana (Uia), donde habló del libro La educación superior en los países en desarrollo: peligros y promesas, coeditado por la UNESCO y el Banco Mundial.

Ante académicos y estudiantes de esa institución, el funcionario del Banco Mundial se refirió a los cambios en las instituciones de educación superior, y mencionó que la UNAM está en condiciones para enfrentar el reto de emprender reformas, pero aseguró que sus estudiantes son los más dispuestos a ello que los académicos.

"Tengo entendido que la mayoría de los alumnos no quería el lío ni perder un año de su vida", mencionó en entrevista posterior acerca del conflicto estudiantil. Y, tras señalar que "a lo mejor hubo fuerzas políticas" que intervinieron en el problema de la UNAM -"no podría explicar cuáles, porque desconozco la situación del país"-, resaltó que los profesores de la máxima casa de estudios "no están dispuestos a cambiar su manera de hacer las cosas".

Aun cuando en el libro comentado el financiamiento se considera entre los principales problemas de las naciones subdesarrolladas, Salmi esimó necesario que se establezcan mecanismos para que los estudiantes universitarios paguen cuotas; aunque "se debe apoyar con becas a quienes no puedan hacerlo por razones económicas", declaró en entrevista.

Sin embargo, desestimó la viabilidad y eficacia del llamado voucher o bono educativo para los estudiantes de nivel superior, mecanismo mediante el cual un alumno puede elegir ingresar a una institución pública o privada. "Hasta ahora no ha funcionado y lo más cercano a eso sería el sistema de crédito educativo que en México funciona en algunos estados", y citó el caso de Sonora, donde existe un instituto de esa naturaleza para estudiar en la universidad o en el campus del Tecnológico de Monterrey de la entidad.

Sobre la propuesta del presidente electo, Vicente Fox, de establecer el bono educativo, se limitó a señalar que era importante tener mecanismos para proteger a los alumnos de escasos recursos y con buen nivel académico a fin de ofrecerles opciones educativas.

En ese sentido, estableció que uno de los retos de México es incrementar la atención de la demanda de estudios universitarios, pues dijo que el actual 15 por ciento de cobertura es bajo comparado con naciones como Argentina y otros países latinoamericanos, particularmente con la de sus diversos socios comerciales.

Respecto de las críticas que se han hecho sobre el carácter impositivo que, en materia educativa y en otros rubros, hace el organismo bancario internacional a las naciones subdesarrolladas, argumentó: "Hay mal conocimiento del papel del Banco Mundial, pues nosotros lo único que hacemos es presentar un menú de opciones a elegir y los países son los que deciden qué cosas adoptan".

Aseveró que el Banco Mundial continuará destinando recursos para la educación en los países en desarrollo, pero dijo que desconoce tanto el monto actual como el futuro, o si el financiamiento representaría 8 por ciento del producto interno bruto (PIB), como ha propuesto la UNESCO. Lo que sí aclaró fue que para otorgar los apoyos económicos se pondrá énfasis en la evaluación, porque "en el pasado hemos tenido errores o proyectos con resultados no esperados al no haber sido evaluados".