MIERCOLES 22 DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť Nada se informó de lo tratado en el rancho ubicado a 10 kilómetros de Toluca

La cumbre de Santín, sede del primer cónclave del gabinetazo

Ť Los convocados viajaron en camiones cubiertos que salieron muy temprano del Campo Marte

Ť Frenética cacería reporteril para alcanzar la primicia Ť Rumores, datos falsos y filtraciones

Juan Manuel Venegas y Roberto Garduño, enviados, Xonacatlán, Méx., 21 de noviembre Ť La cumbre secreta de Santín.

En el rancho que lleva este nombre, a unos 10 kilómetros de Toluca, entre milpas y crianza de borregos, Vicente Fox Quesada reunió a los hombres y mujeres que formarán su gabinete.

Ante el anuncio del propio presidente electo de que este martes se reuniría con quienes serán sus colaboradores, los reporteros peinaron prácticamente el valle de Toluca en una búsqueda frenética por conocer la composición del futuro gabinetazo... y dieron con él.

Desde muy temprano, los informadores se concentraron en el hotel Fiesta Americana, en pleno desafío a la advertencia que un día antes hiciera la vocera del foxismo, Martha Sahagún: ''Será un encuentro superprivado, muchachos''.

No quería que ni siquiera se vieran los rostros de los integrantes del primer círculo de colaboradores del futuro mandatario. Tanta fue la preocupación de Sahagún y del Estado Mayor Presidencial (EMP), que Fox Quesada y su gente fueron sacados de la ciudad de México en helicóptero y camiones totalmente cubiertos que salieron del Campo Marte con dirección al valle de Toluca.

Todos los convocados fueron citados en las instalaciones militares aledañas al Auditorio Nacional a las siete de la mañana. Para esa misma hora, el vestíbulo y el restaurante del Fiesta Americana eran centro de reunión de los reporteros que, al darse cuenta de que Fox ya había abandonado el inmueble, barajaban los posibles sitios del encuentro.

Por supuesto, no faltaron los intercambios con los nombres del gabinete. Fueron los mismos que hasta ahora han sido publicados: Santiago Creel (Gobernación), Rodolfo Elizondo (Coordinación Política), Eduardo Sojo (Coordinación Económica), Pedro Cerisola (Comunicaciones y Transportes), Francisco Gil Díaz (Hacienda), Carlos Abascal (Trabajo), Francisco Barrio (Contraloría), Reyes Tamez (Educación), Teresa García (Desarrollo Social), Leticia Navarro (Turismo), Jorge Castañeda (Relaciones Exteriores), Alejandro Gertz (Seguridad Pública) y Adolfo Aguilar Zinser (Seguridad Nacional). Estaban en las libretas de todo mundo.

Pero en esos momentos lo único que importaba era saber dónde estaban...

Caravana a Toluca

Los teléfonos celulares de todos los funcionarios que rodean al presidente electo estaban desconectados. Los colaboradores de Sahagún en el área de comunicación ni se aparecieron. Sin contactos, los reporteros empezaron a operar.

Unos se fueron a la casa de Reforma 607; otros, a Prado Sur; un grupo más se dirigió al hotel Camino Real. Se trataba de montar guardias en los sitios donde Fox Quesada trabaja con regularidad. Al mediodía, una llamada (la clásica filtración) informó que el encuentro se llevaba a cabo en Toluca.

Todos los hoteles de cinco estrellas de la capital mexiquense eran posibles sedes. Y hacia ese punto enfiló la caravana de 16 vehículos particulares escoltados por la unidad móvil de Televisa.

Durante el trayecto, los celulares no dejaban de sonar: el Fiesta Inn, se corrió la voz, era el objetivo. Pero ya casi para llegar a Toluca, una nueva filtración cambió el rumbo: el lugar era el Holiday Inn. Y una más: ''Dense vuelta, están en el club de golf Los Encinos''.

Esa fue la primera parada.

Bloqueado el acceso al exclusivo lugar, los informadores convencieron a algunos de los socios que llegaban para acompañarlos e incursionar en aquel sitio. Tras varios recorridos no se logró ubicar reunión alguna en Los Encinos.

El desánimo no cundió. Todos estaban confiados en que llegaría la llamada telefónica correcta...

Y llegó. En Los Encinos, el reportero de Televisa recibió la esperada comunicación: es en Santín, el rancho que está a un lado del aeropuerto. Y la caravana de 16 vehículos tomó nuevo rumbo.

Preguntando se pudo llegar al lugar: ''Rancho Santín... se venden borregos'', anuncia un gran letrero en la desviación a la calle Isidro Fabela, sobre la carretera Toluca-Naucalpan.

Una ambulancia y la presencia, a lo lejos, de los elementos del Estado Mayor Presidencial, fueron la señal: se había encontrado el lugar correcto. Coordinados, los informadores se dividieron para vigilar las tres puertas de acceso y salida del rancho que, algunos aseguran, pertenece al notario René Santín Villavicencio, ex priísta asesor de la administración de Ignacio Pichardo Pagaza.

Otras versiones de los lugareños apuntan a que es propiedad de Gaspar Rivera Torres, empresario inmobiliario, quien desarrolló el exclusivo condado de Sayaveedra.

De lo que ocurría adentro de la propiedad, nada se sabía.

Las bondades de doña Petra

A más de 300 metros de la casona del rancho, la prensa tuvo que esperar a merced del viento helado. Y a menos de 10 grados centígrados, apareció la señora Petra García, encargada de cuidar la única casa en construcción que se encuentra en la calle Isidro Fabela, que realmente es un pedregoso camino rural que cruza entre milpas.

La señora se dirigió a los reporteros: ''ƑEn qué los ayudo?''.

Los comunicadores no tardaron en cooperarse. De a treinta pesos por cabeza se pudo comprar huevo, chorizo, nescafé, azúcar, tortillas y refrescos. Doña Petra cocinó con ahínco y abrió las puertas de la casa bajo su custodia: ''pa' que no sientan tanto el frío''. La comida apenas alcanzó y la mujer, maternal, explicó: ''Si he sabido que vienen, me aprevengo con una ollota de frijoles''.

Empezó a oscurecer. Los reporteros pelotearon con un balón que doña Petra les prestó. Y en eso, pasadas las 19 horas, un autobús de la línea Enlaces Terrestres Nacionales (ETN) se apareció por el camino. Fue la señal de que la espera estaba por concluir. Al frente del vehículo se colocaron los reporteros y apenas avanzaron veinte metros, fueron advertidos por los guardias: ''Mejor regrésense, si no les soltamos a los perros''.

šHoy, hoy, hoy!

Empezaron los gritos y reclamos: ''šGabinete ya, gabinete ya!'', ''šhoy, hoy, hoy!'', ''ya, ya, ya!'', ''šsí se puede, sí se puede!'', recurrieron los informadores a todo el repertorio foxista.

Por fin retrocedieron nuevamente a la casa de doña Petra. Una hora más tuvieron que esperar para que, ya cerca de las 21 horas, se enteraran que Fox Quesada se reunió con 40 hombres y mujeres que conformarán el gabinete legal y ampliado.

Los únicos que se dejaron ver, a bordo de sus vehículos, fueron Elizondo, Gertz, Gil Díaz, Sojo y Derbez. También el ex senador panista Juan de Dios Castro, de quien no se pudo saber qué cargo desempeñará en el futuro gobierno.

En el camión salieron el presidente electo y el resto del gabinetazo. A su paso, los reporteros seguían con la exigencia ''gabinete... šhoy, hoy, hoy!'' y pedían la presencia de Martha Sahagún: ''šVocera, vocera, vocera..!''

Pero nadie, nadie bajó a informar lo que había ocurrido en la cumbre secreta de Santín...