MIERCOLES 22 DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť Aún sin acuerdo sobre si asistirán a la asunción de Fox a la Presidencia


Funcionarios y líderes priístas salen en defensa de Zedillo

Un día después de la rechifla a Ernesto Zedillo en el PRI, la directiva del partido y funcionarios del gobierno federal defendieron al mandatario, a pesar que lo han acusado de la derrota del 2 de julio. Habituados a la defensa del presidente en turno, desdeñaron las expresiones de inconformidad en contra del todavía jefe del Ejecutivo.

"Yo no vi a ningún gobernador, a ningún dirigente, a ningún legislador, a ningún líder o miembro del Comité Ejecutivo Nacional del PRI abuchear al Presidente de la República. Fueron expresiones anónimas", dijo el secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco Altamirano, a favor de quien un grupo de gobernadores y funcionarios del CEN priísta hace campaña para que se postule como candidato a la directiva del tricolor.

Fue "normal, simplemente normal", definió el líder de los electricistas y de la CTM, Leonardo Rodríguez Alcaine "El problema es que se cree que la pérdida del 2 de julio se debe al presidente Zedillo, (pero) yo opino que se debe a todos los mexicanos", dijo La Güera Rodríguez. En el tricolor se atribuyó al gobernador de Michoacán, Víctor Manuel Tinoco Rubí, la autoría de la mención al presidente Zedillo en el manifiesto que el lunes leyó el candidato a la gubernatura de Jalisco, Jorge Arana Arana.

Igualmente divididos, los priístas aún no se ponen de acuerdo para definir si asistirán a la sesión de Congreso General en la que Vicente Fox asumirá la Presidencia, si no se atiende su demanda de limpiar la elección en Jalisco. Esta semana los grupos parlamentarios se reunirán con la directiva para tomar una decisión definitiva.

Por lo pronto un sector de los diputados federales calificó de "medida poco inteligente" la intención de no presentarse, aunque otros están de acuerdo en no asistir. Entre ellos, el diputado duranguense Gustavo Lugo, quien dijo: "Además no queremos verle la cara a Zedillo".

Sin embargo, entre los funcionarios del gabinete se confrontó la convocatoria de la presidenta del tricolor, Dulce María Sauri, de boicotear la asunción de Fox. "Tendríamos que estar todos, los miembros del gabinete, diputados y senadores", sostuvo el secretario de Salud, José Antonio González Fernández, quien hizo un llamado a sus compañeros de partido a "no confundir una contienda política con un acto republicano".

La propia Sauri Riancho matizó su iniciativa, y planteó que la participación de los grupos parlamentarios en la sesión del primero de diciembre depende de que en los próximos nueve días haya una respuesta al reclamo sobre las elecciones en Jalisco.

"Seguimos insistiendo: nuestro objetivo fundamental es que la elección quede fuera de toda duda, de todo cuestionamiento; no es dejar de asistir el primero de diciembre, eso que quede muy claro".

--Si en estos días no se limpia esa elección, Ƒno van a la ceremonia?

--Pongámoslo en positivo: queremos que se limpie, que quede fuera de toda duda el resultado electoral, y que estemos todo el Congreso de la Unión en la ceremonia del primero de diciembre.

Refirió que desde la noche del sábado 18 -un día después del encuentro en Gobernación- no ha habido otro contacto con la directiva panista para tratar el asunto de Jalisco. "Definitivamente no, y lamento mucho que sean la cerrazón, la obcecación y la soberbia el sello que se ha mostrado ante esta situación. Y lo lamento porque espero que no sean el signo y la forma de proceder en el nuevo gobierno".

Comentó que el partido no limitará su queja al diálogo político, e informó que se prepara la defensa jurídica del presunto triunfo de Jorge Arana.

En San Lázaro, la diputada Lorena Beauregard planteó que la idea de que los grupos parlamentarios boicoteen la ceremonia del primero de diciembre "es incongruente" con la imagen de un partido de legalidad. "Ni somos el PRD ni el PAN, somos el PRI como oposición, y tenemos que definir un rostro, y una línea de discurso en las cámaras, pero no ser esa 'muralla' de la que habló Dulce María, porque esa no es la esencia de un partido político: vetar y bloquear las iniciativas".

La coordinadora de los diputados priístas, Beatriz Paredes, negó que esas diferencias hayan creado divisiones entre la bancada del tricolor: "Rechazo categóricamente que existan. Estamos valorando (si asistimos), y el CEN está agotando las instancias de carácter jurídico. Vamos a tomar una decisión de manera colegiada en los próximos días".

En el Senado también hubo diferencias de opinión. Humberto Roque, Emilio Gamboa y Fidel Herrera expresaron que la decisión que se tome en la reunión con la directiva deberá ser acatada por todos: legisladores, funcionarios y gobernadores. Empero Oscar Cantón Zetina y José Bonilla afirmaron que el PRI sí debe estar presente, y que las protestas por el caso Jalisco sean de otro tipo.

Eso sí, todos deploraron "la frivolidad" de Vicente Fox, quien declaró que si los priístas no acuden al Palacio Legislativo, habría más lugares para sus invitados. "Eso le puede salir muy caro. Que Fox recuerde que al propio presidente Zedillo no le ha ido bien cuando se refiere con ligereza al Poder Legislativo", advirtió Roque Villanueva.

Sauri Riancho dijo que esta frase del presidente electo constituía "una desafortunada broma o un intento de chiste", y le aclaró que ninguna de las curules de los diputados puede ser ocupada por cualquier ciudadano o funcionario. Explicó: "Esa es una norma parlamentaria".

Las razones de la protesta

El 3 de julio la mayoría de los priístas -en público y en privado- le atribuyeron a Zedillo parte de la derrota y le reprocharon haber reconocido, antes que Francisco Labastida Ochoa, el triunfo de Vicente Fox en las elecciones. Ayer, algunos priístas demostraron que a pesar de todo seguirán siendo institucionales hasta el último día de la era Zedillo.

José Antonio González Fernández, secretario de Salud, dijo que "la mayoría de los priístas estamos convencidos que el mandatario fortaleció la democracia", y que por esta y otras razones "pasará a la historia".

El secretario del Trabajo, Mariano Palacios Alcocer; la diputada Beatriz Paredes, y el secretario general del CEN, Sergio García Ramírez, declararon que el repudio a Zedillo la noche del lunes en el auditorio Plutarco Elías Calles se debió a que los militantes "están tristes por la derrota". Genaro Borrego: "Esas actitudes reflejan un sentimiento profundo, pero es una posición que no comparto".

Manuel Bartlett, quien el 4 de julio exclamó que Zedillo "ya no manda" en el tricolor, acotó: "Yo ni siquiera asistí al evento".

Y al final, Enrique Jackson Ramírez apenas respondió: "Yo no chiflé. No me dí cuenta quiénes lo hicieron". (José Gil Olmos, Enrique Méndez, Andrea Becerril, Georgina Saldierna, Carolina Gómez, Angeles Cruz, Elizabeth Velasco, Ciro Pérez y David Aponte)