MIERCOLES 22 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť Sumaría a iglesias al sistema de protección civil
Fomentaría Fox una mayor cultura y tolerancia religiosas
Ť El consejo nacional tendría más facultades que la subsecretaría Ť Habría registro puntual de sacerdotes mexicanos y extranjeros
José Antonio Román Ť Con mayores facultades que la subsecretaría de Asuntos Religiosos, el consejo nacional propuesto por las iglesias al presidente electo, Vicente Fox, prevé fomentar la "cultura y tolerancia religiosas", incorporar a aquéllas al Sistema Nacional de Protección Civil y llevar un registro detallado de los miles de sacerdotes y ministros mexicanos y extranjeros que desempeñan su labor en territorio nacional.
En su organigrama, el consejo nacional para la libertad religiosa plantea la creación, por un lado, de una "comisión nacional de consulta religiosa", en la cual estarían líderes de las iglesias "más representa- tivas del país", y, por el otro, una "comisión interna de administración", integrada por todas las dependencias gubernamentales que tengan relación con aquéllas.
En el último caso, por ejemplo, se integraría con funcionarios del Instituto Nacional de Migración, de Desarrollo Social, de Antropología e Historia, de Hacienda, y de Educación Pública, entre otros.
El consejo, que sustituiría a la actual subsecretaría dependiente de Gobernación, tendría dos grupos de asesores: uno interno a la dependencia, el cual devengaría honorarios, y otro más con carácter externo, en el cual estarían peritos y académicos en materia jurídica y religiosa, sin cargo al erario público.
Junto a las dos comisiones y los dos grupos de asesores, el organigrama está conformado por seis direcciones generales, alguna de ellas con dos y hasta tres subdirecciones cada una. Todo bajo la supervisión del presidente del consejo, el cual sería nombrado por el jefe del Ejecutivo.
De acuerdo con el organigrama ya aprobado, del cual La Jornada obtuvo copia, las seis direcciones generales son las siguientes: registro y certificación; autorizaciones, permisos y notificaciones; de ministros de culto; resolución de controversias; cultura religiosa, y normatividad. Entre las subdirecciones destacan la de libertad religiosa y promoción social; vinculación social y protección civil; cultura religiosa; patrimonio histórico y cultural; arbitraje, y nombramientos y remociones de ministros de culto.
Aun cuando la propuesta surgida por consenso de entre un numeroso grupo de líderes religiosos tiene ya definidas las funciones de cada área, todavía falta tomar acuerdos importantes para su funcionamiento, tales como el número de representantes religiosos que integrarán la llamada comisión nacional de consulta religiosa, así como de qué iglesias provendrán y si sus recomendaciones al presidente del consejo tendrían alguna obligatoriedad o si se quedarían simplemente en el rango de "sugerencias".
En documentos adjuntos al organigrama se explica que la creación de la comisión interna de administración, integrada por funcionarios de varias dependencias, tiene el propósito de simplificar y centralizar, en el consejo, decenas de trámites que deben realizar por separado las asociaciones religiosas, como la internación al país de ministros de culto extranjeros, revalidación de estudios y expedición de documentos educativos, así como solicitudes de reparación o restauración en inmuebles religiosos o de arte sacro.