LUNES 27 DE NOVIEMBRE DE 2000
Ť Temor y baja participación en los comicios
Sondeos dan ganador a Aristide en elección presidencial haitiana
Ť Por las irregularidades, Washington no reconocería al vencedor
Ť El país se encamina a una dictadura, acusa la oposición política
Afp, Ap, Reuters y Dpa, Puerto Príncipe, 26 de noviembre Ť En medio del temor y de una baja participación transcurrieron este domingo las elecciones presidenciales en Haití, en las que el candidato del oficialista Partido Familia Lavalas, el ex presidente Jean Bertrand Aristide, es el favorito para suceder a René Preval a partir de febrero próximo.
Los principales partidos de oposición convocaron a un boicot tras alegar que el Consejo Electoral Provisorio está controlado por simpatizantes del gobierno, no garantiza la "transparencia" de los comicios y que Haití se encamina a una dictadura.
Los primeros resultados oficiales se darán a conocer a partir de este lunes, pero sondeos de opinión de los medios de comunicación realizados a la salida de las casillas dan el triunfo a Aristide, de 47 años, frente a otros seis candidatos que son desconocidos para la población.
En general la jornada transcurrió en calma en todo el país antillano, pero en la capital un hombre resultó herido por la explosión de un artefacto explosivo casero en el suburbio de Carrefour.
Desde el miércoles pasado unas 10 bombas estallaron en distintas partes de Puerto Príncipe, con saldo de dos niños muertos y 17 personas heridas.
El viernes pasado la policía anunció el arresto de 19 presuntos involucrados en los atentados y el sábado fueron desactivados otros cuatro artefactos.
Estos comicios, a los que fueron convocados 4.7 millones de haitianos, no fueron financiados por Estados Unidos, la Unión Europea o Canadá debido al desacuerdo que surgió en las elecciones legislativas de mayo pasado.
En ese entonces la Organización de Estados Americanos denunció irregularidades en el conteo de sufragios que beneficiaron a los candidatos a senadores de Lavalas, y exigió en vano una corrección.
Según analistas políticos, existe la posibilidad de que Estados Unidos no reconozca al nuevo gobierno, además de que la negativa del gobierno haitiano a corregir los resultados de las elecciones de mayo arriesgaron la entrega de más de 500 millones de dólares de ayuda internacional.
En Haití, el país más pobre de América Latina y con 8 millones de habitantes, sólo se encuentran cuatro observadores de la Comunidad del Caribe y 30 más de la organización no gubernamental estadunidense Global Exchance.
En un mensaje radial, Aristide pidió a los haitianos acudir a las urnas "tras 200 años de violencia económica y política decidimos votar por la paz... Demasiada violencia, demasiada inseguridad, demasiado derramamiento de sangre. šBasta!"
Aristide fue el primer presidente electo después de una agobiante y larga dictadura, pero un golpe de Estado ocurrido en 1991, apenas siete meses después de asumir el poder, lo obligó a salir del país. En 1994 regresó a la presidencia de la república tras una intervención militar estadunidense.
El presidente René Preval afirmó que la realización de las elecciones de hoy, en las que también se definirán nueve senadores, demuestra que Haití rompió "con la tradición de los golpes de Estado".