LUNES 27 DE NOVIEMBRE DE 2000

Ť Critica comisión de reforma el desempeño de maestros


Nueva política de docencia en la UAM, para resolver deficiencias

Ť Entrega la CPD el Informe de Avance en torno a sus trabajos

Ť Señala la necesidad de flexibilizar planes y programas de estudio

María Esther Ibarra Ť La iniciativa de establecer nuevas políticas de docencia en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) "no pretende alterar su naturaleza jurídica como organismo autónomo, ni su objeto, modelo y estructura orgánica, ni tampoco las condiciones laborales establecidas", sino "resolver deficiencias", asevera la comisión responsable de modificar las reglas de esa actividad de la institución.

Al señalar lo anterior en el Informe de Avance de sus trabajos, la Comisión de Políticas para la Docencia argumenta, entre otros cosas, que si bien la UAM cuenta con una planta académica mayoritariamente de tiempo completo, "actualizada" y con una "sólida" formación, ello "no ha tenido plena incidencia en la calidad" de la docencia.

Reconoce que las funciones de docencia se desarrollan a partir de la responsabilidad y el convencimiento de los profesores, pero recalca que el personal académico "no siempre cumple con sus obligaciones básicas, en particular las relacionadas con la asistencia, puntualidad y desarrollo adecuado de los programas de estudio".

También aduce que frecuentemente la docencia se realiza de manera aislada e individual, "sin nutrirse de las experiencias compartidas en los procesos de enseñanza-aprendizaje. Por tanto, agrega, se requiere centrar los esfuerzos en el aprendizaje de los alumnos y en "mejorar la habilidades pedagógicas de los profesores".

Respecto a los estudiantes, sostiene que los indicadores acerca del desempeño de los alumnos "revelan serios problemas, como niveles elevados de abandono en los estudios; largos plazos para la culminación de los mismos y discontinuidad en su permanencia (en la universidad)".

Agrega que algunas "determinantes" de esta problemática rebasan el ámbito universitario, pero asume que la institución "debe admitir que no ha diseñado estrategias adecuadas para resolver aquellas que están a su alcance".

También menciona en su informe que la Universidad Autónoma Metropolitana no ha reconocido de manera suficiente las condiciones heterogéneas que privan entre sus alumnos, quienes ingresan con "marcadas diferencias académicas, socioeconómicas y culturales".

Necesario, flexibilizar planes y programas

En cuanto a los planes y programas de estudios, aduce la necesidad de "flexibilizarlos", pues su "rigidez genera diversos problemas" como la dificultad de aprovechar al máximo la riqueza cultural y formativa que existe en la universidad, y la limitada incursión en otras disciplinas, y obstaculiza la continuidad de los estudios en ciertas etapas de los planes, entre otros".

En la sesión del Colegio Académico (CA), efectuada el jueves en la Unidad Azcapotzalco y que se prolongó hasta la madrugada del viernes, algunos integrantes de la comisión afirmaron que en el Informe de Avances se incorporaron las diversas propuestas de la comunidad en torno a la auscultación del primer proyecto, el cual fue puesto a la consideración de los integrantes de la institución del 23 de octubre al pasado 10 de noviembre.

Aprueban ampliación de la consulta entre la comunidad

Sin embargo, por la inconformidad que se suscitó entre la comunidad, particularmente por el escaso tiempo para la consulta y sus mecanismos (fax o correo electrónico) sobre el primer proyecto, la comisión solicitó una prórroga para el 26 de marzo del 2001, para continuar auscultando a la comunidad.

La ampliación fue aprobada, por lo que la comisión continuará consultando a los integrantes de la UAM, a fin de emitir su dictamen ante el Consejo Académico, máximo órgano de representación de dicha casa de estudios.

De alguna manera, la Comisión de Políticas de Docencia de la UAM da respuesta en su informe a algunas de las críticas, dudas, inconformidades para crear nuevas reglas para el personal académico de la institución y a la labor que éste realiza en la formación educativa de los alumnos de la institución metropolitana.

El propósito, argumenta, es "facilitar la coordinación y optimizar el cumplimiento de las actividades académicas y administrativas relacionadas con la función de docencia", en el actual contexto nacional e internacional caracterizado por profundos cambios políticos, económicos, tecnológicos y culturales.

Se recalca que las enmiendas, al igual que en procesos anteriores, se "circunscriben al marco jurídico que rige a la UAM" y en "estricta observancia" de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como en la ley orgánica de esa casa de estudios y del sistema reglamentario que de ésta deriva.

En cuanto a la libertad de cátedra, que concitó descontento entre los académicos, explica que en el contexto del artículo tercero constitucional --en el que se establece ese precepto como parte de la autonomía universitaria--, la comisión "consideró importante destacar que la libertad de cátedra se entiende como un privilegio que supone independencia metodológica, de enfoques disciplinarios o ideológicos", pero, remarca, está "invariablemente sujeta a objetivos y perfiles establecidos en planes y programas de estudio para que la UAM pueda cumplir con eficacia el compromiso que asume ante la sociedad de formar profesionales".