DOMINGO 3 DE DICIEMBRE DE 2000
PAGINA 9
* Lourdes Galaz *
Cuando la cruda nos alcance
* Seis meses de jolgorio democrático, luego la resaca: el gobierno debe 330 mil mdd * Lo más grave, las deudas internas no reconocidas, como el sistema de pensiones, IPAB y un gran fraude de la banca de desarrollo
Las fiestas de la asunción comenzaron con un buen discurso político... y muchos, muchos buenos propósitos para todo un sexenio, Ƒo 25 años? Y luego de tres días de festejos, de borrachera por el cambio, comienza a llegar la cruda. Con la resaca se siente la realidad. El presidente Fox protestó ante el Congreso "velar por los pobres y los marginados", y en tres días de celebraciones aventuró en todos los tonos posibles y ante tan distintos auditorios ųtan diferentes como la diversidad nacionalų que en el 2006 "veo un México con menos pobreza". Sí, el foxismo pretende bajar la cifra oficial de 40 millones de pobres, a 28 millones de miserables en extrema pobreza. Más aún, la oferta del nuevo gobierno es elevar de siete a diez años el nivel de enseñanza promedio de los mexicanos y hacer que todos los jóvenes (unos 50 millones) tengan oportunidades de estudios superiores y empleo... šuna juventud moderna y con visión de futuro!... Y familias que duerman tranquilas, con seguridad, "porque la autoridad está trabajando honestamente". Pero, decía el gran René Arteaga: "No hay crudo que no sea humilde..."
Luego de los tiempos de campaña ųšdos años!ų y de seis meses de jolgorio al son de fundamentalismos democráticos, ya en el poder con todo y la resaca, la cruda realidad cotidiana obliga a trabajar para "reducir la pobreza, erradicar la corrupción y consolidar la democracia"; en ese orden esperan los que votaron por el cambio, muestran las encuestas. Qué bueno que Vicente Fox tiene "las botas bien puestas sobre la tierra" y que a la realidad la ve de frente, así aguantará la cruda. Hay que creerle ųo conceder el beneficio de la dudaų, porque el día del cambio de banda, el nuevo jefe del gobierno reconoció que no heredó un país con una economía tan saludable, como publicitó su antecesor, hasta la víspera de abandonar el puesto. Vicente Fox acepta ya que, si bien es cierto que la economía está en relativa calma y las cuentas macroeconómicas cuadran, el reto que le deja Ernesto Zedillo no está fácil: los adeudos pendientes son equivalentes a 60.1 por ciento del producto interno bruto. Es decir, unos 330 mil millones de dólares de compromisos por pagar del gobierno, reconocidos y no reconocidos como deuda pública... Ya veremos, "no hay crudo que no sea humilde".
Con la realidad encima, el gran problema que afrontará Vicente Fox a partir de mañana son las deudas, muchas y muy altas. Si bien es cierto que el año próximo el mayor conflicto por vencimientos de pagos lo tendrá el sector privado, la situación del gobierno no está en bonanza que digamos. El Presupuesto de Egresos para el 2001, que este martes enviará el nuevo secretario de Hacienda a la Cámara de Diputados, prevé un gasto total estimado en 1.3 billones de pesos (en términos reales similar al del 2000 zedillista). Un 25 por ciento, es decir la cuarta parte del gasto público (260 mil millones de pesos), será para cumplir con los pagos obligados. Para los analistas económicos estas deudas en conjunto representan el más grave problema que sostiene Fox sobre sus botas. Vale para el Presidente: los pagos al exterior, unos mil 600 millones de dólares, están considerados como "poca cosa" por el alto nivel de reservas en billetes verdes (34 mil millones) que guarda el Banco de México... y se siente la resaca.
Lo más grave hoy son las monumentales deudas internas. Sus intereses tendrán que ser solventados de inmediato, en el 2001, por el gobierno de Fox. El pago mayor corresponderá a los pasivos de Fobaproa-IPAB, cuyos intereses sumarán, por lo menos, los 60 mil millones de pesos. También los vencimientos, de 38 mil millones, por lo que se ha dado en llamar Proyecto de Impacto Diferido en el Registro del Gasto, que no es otra cosa que los famosos Pidiregas, aquel invento zedillista para darle la vuelta al Congreso y financiar en el corto plazo más de la mitad de las inversiones en el sector energético. Fueron 385 mil 530 millones de pesos en proyectos que serían autofinanciables, pero ocurre que lo más probable es que no lo sean (aunque diga lo contrario el ratificado Alfredo Elías Ayub), y el gobierno tendrá que salir muy pronto al rescate de los inversionistas privados... También habrá que cubrir otra "deuda oculta" (tampoco se reconoce como tal), que es el financiamiento al sistema de pensiones del IMSS y del ISSSTE. Vamos, sólo para el primer año del gobierno de Fox, hay cuentas por pagar ųcasi inesperadasų que rebasan los 18 mil millones de dólares, sin considerar el tradicional servicio de la deuda externa y muchos otros capítulos. Entre ellos, el más reciente fraude descubierto, el de la banca de desarrollo. Sume por favor: 40 mil millones de Nafin, 12 mil millones de Financiera Azucarera, 20 mil millones de Banrural y Bancomext, más lo que se acumule hasta que Francisco Gil Díaz logre cuadrar las cuentas del primer año del foxismo.
Vicente Fox, formado en las lides empresariales, aprenderá muy pronto que en economía los trazos en los pizarrones son absolutamente insuficientes para manejar la complejidad de una nación, también los discursos demagógicos y las estrategias publicitarias con el mejor marketing elevado a ministerio. Seguro que luego de los festejos por la asunción, una vez que despidió a los invitados de 18 países del mundo, el nuevo Presidente, "con las botas bien puestas sobre la tierra", entenderá que en política la visión empresarial vale, pero no tanto como para enfrentar la complejidad de un país que requiere mucho más que ideas realizables si hay dinero, en un entorno donde lo que hace falta es, precisamente, el dinero. Y es que luego de revisar párrafo a párrafo el discurso político que Fox leyó ante el Congreso (Ƒlo estructuraron al alimón Castañeda y Muñoz Ledo?) y que luego desmenuzó durante los festejos, se comprende que el Presidente sigue en campaña: ofrece cambios que, ciertamente, exigen voluntad política, como el referéndum y el plebiscito, también el acotamiento de los límites al presidencialismo. Al mismo tiempo crea expectativas realizables sólo con dinero. Esperanzas que en un sexenio serían inalcanzables: "Ninguna persona o familia quedará excluida de los beneficios del desarrollo"... "Aplicaré programas dirigidos al mejoramiento de las comunidades indígenas"... "Se pasará del subsidio a los apoyos productivos al campo"... se "elevará el presupuesto en educación para invertir a futuro"... "Promoveré una política de desarrollo empresarial para la pequeña y mediana empresas y una economía con sentido social para la microempresa"... También ofrece "democratizar el acceso a los servicios de salud pública (y) brindar protección financiera en materia de salud a toda la población"... Y, claro, "los jubilados tendrán pensiones justas; los jóvenes, universidades de calidad y con diversidad de opciones; los hombres y las mujeres, más y mejores empleos" šComenzamos hoy!... ƑCon qué $$$ ojos?, dice el mexicano y sigue la borrachera, hasta que la cruda nos alcance.
En 3 tiempos
* Lo mejor del cambio de banda en el Congreso: la claridad de Jesús Ortega * Boda de una prima hermana del senador Demetrio Sodi... šen Nueva York!
Lo juro bajo protesta, total está de moda: lo mejor de aquel viernes 1Ɔ de fervor religioso y fundamentalismo democrático, fue la sesión del Congreso con los líderes parlamentarios en tribuna. Para muestra: el senador Jesús Ortega, claro y puntual en el discurso del cambio de banda, dijo al Presidente: "No se equivoque, señor Fox, los electores no votaron por un programa económico neoliberal... No se confunda: la generosidad del mexicano que le brindó su esperanza, no es vasallaje. El cambio que se reclama no le da a usted, señor Fox, la condición de soberano...", y en ese tono siguió el líder de los senadores del PRD, que inició con un buen análisis de la derrota del partido de Estado el 2 de julio, para irritación de los legisladores del PRI. También el senador Ortega recibió el aplauso de priístas cuando fijó la postura de la nueva izquierda del PRD frente al foxismo, que para nada gustó a los legisladores del PAN... cosas de la tolerancia política.
Una prima hermana del senador perredista Demetrio Sodi de la Tijera se casó ayer sábado. Y el matrimonio fue en la catedral de San Patricio... šen Nueva York! Como en toda boda de neoyorquina elegancia, la señorita Sodi puso una "mesa de regalos" nada menos que en Tiffany's, y pidió a la gerencia de tan conocida y tradicional tienda no proporcionar la lista de obsequios a cualquiera, sólo a las personalidades invitadas a la celebración. La señorita Sodi, mejor conocida como Thalía, por fin se casa con el famoso y riquérrimo productor Tommy Motola; sí, aquel que hace unas semanas habría roto el compromiso, ventanearon algunos en el ambiente del show business. Thalía, niña de buena familia, es una de las cantantes que mejor han sabido administrar su talento y sus ganancias. Es millonaria šen dólares!, cuentan.
Desde la Casa Blanca se acusa a Jeb Bush de manipular al Congreso de Florida para que su hermano gane la presidencia. Y, sin pudor, Bill Clinton se habría pronunciado a favor de Al Gore, su candidato favorito, durante una recepción el jueves por la noche en Washington. Los demócratas endurecieron posiciones, y la presidencia de EU sigue atrapada en una compleja telaraña de acciones judiciales, políticas y propagandísticas. Frente a su televisión los estadunidenses esperan el fallo del Tribunal Supremo sobre los conteos en Florida. Los más optimistas estiman que en diciembre terminaría la teleserie más vista en la Unión Americana, este fin de siglo: el día 18, el Colegio Electoral sumará los votos estatales para declarar presidente ganador. Hay un último recurso político: que la elección se defina en el pleno del Congreso, hasta enero, dos semanas antes de la toma de posesión... Al Gore no se rinde y George W. Bush sigue en su rancho haciendo su gabinete.
* Ilustraciones: Luis Fernando. Serie: Cambio de piel
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