JUEVES 7 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Ofrece dos conciertos en el patio del Claustro de Sor Juana


La de Kronos Quartet, música a la que le borraron las fronteras

Ť En esas sesiones presentará material de sus discos recientes, Dracula y Kronos Karavan

Ť ''Para nosotros lo pluricultural es una declaración de principios'', dice Harrington a La Jornada

Pablo Espinosa Ť Con obras de compositores de todos los confines, entre ellos Enrique Rangel, del grupo Café Tacuba, una rola, Gloomy Sunday, que hizo célebre Diamanda Galas, otra más de Terry Riley, un tango de Aníbal Troilo, otro de Piazzolla y cinco movimientos del filme Drácula, partitura de Philip Glass, el agrupamiento estadunidense Kronos Quartet, que es venerado por su extenso público cual si fuera un grupo de rock, retorna a México.

Luego de 26 años, desde la fundación de Kronos Quartet, en esta ocasión no viajará la violonchelista Jean Jeanrenaud, quien desde el año pasado no forma parte del agrupamiento, sometido a giras de trabajo continuo, por lo que ella decidió recuperar vida personal y elegir presentaciones solistas y colaboraciones con otros grupos de entre los cuales no está descartado el Kronos. Su lugar lo ocupa ahora Jennifer Culp.

kronos3La irrupción oficial de la nueva chelista ocurrió con el nuevo disco de Kronos Quartet, Kronos Caravan (Nonesuch, Warner) y junto a los violinistas David Harrington y John Sherba y el violista Hank Dutt, la nueva integrante completa un sonido colorístico con características similares a las del viejo Kronos.

Impactante repertorio

El disco Kronos Caravan, que lleva un epígrafe de Pandit Pran Nath: ''Las almas viajan en caravanas" es uno de los acontecimientos discográficos más impactantes en el territorio camerístico actual. Recorre sitios insondables, ilumina caminos nocturnos, dirige el vuelo de aves migratorias, exulta, alucina. Esplende.

El repertorio del Kronos Quartet, es sabido, incluye por igual el jazz de Bill Evans y Thelonious Monk que el rock de Jimi Hendrix y Elvis Presley (Elvis Pelvis), que la vanguardia de Henryk Gorecki, Alfred Schnittke. Una música a la que le han sido borradas las fronteras.

En tal talante, la nueva grabación Kronos Caravan incluye una rola de Café Tacuba que su autor, Enrique Rangel, arregló para cuarteto de cuerdas. Pero también maravillas como el track 5, titulado Turceasca, una tonada embriagadora de encanto gitano y recovecos sónicos arabescos, firmada por el compositor Sapo Perapaskero que, deveras, así se llama, Sapo, y es rumano y es un genio.

Entre otras de las maravillas, además de las mencionadas, de esa grabación kronosquartiana, figura Cancao Verdes Anos, del portugués Carlos Paredes; Aaj Ki Raat, del indio Rahul Dev Buirman, Cortejo fúnebre en el Monte Diablo, de maese Terry Riley, Ecstasy, del libanés Ali Jihad Racy, para culminar con Misirlou Twist, del maestrísimo Dick Dale, hecha aún más célebre por uno de los filmes de Quentin Tarantino. Más de un escucha dirá: es una rola tarantinesca.

El disco inicia con Pannonia Boundles, de la compositora yugoslava Aleksandra Vrebalov. Pannonia es el territorio que conecta el noreste de Europa con el Mediterráneo y el Oriente. Cultura milenaria (fue provincia romana, luego otomana y consecutivamente de los Habsburgo, de los soviéticos y sus fronteras actuales hacen colindar a Austria, Croacia, Eslovenia y Hungría. En la provincia de Pannonia es dado escuchar por igual fados que temas folclóricos iraníes, árabes, rituales, elegías.

Los dos conciertos que ofrecerá el Kronos Quartet las noches de este viernes y sábado en el Claustro de Sor Juana (Izazaga 92, Centro Histórico, teléfonos 57 09 55 66 y 57 09 40 66) estarán imbuidos de Kronos Caravan y Dracula, los dos discos más recientes, así como de otras porciones del inmenso y fascinante repertoriode este grupo.

Pannonia, imagen real y metáfora

El fundador y director del Kronos Quartet, David Harrington, concedió la siguiente entrevista a La Jornada:

?El inicio de Kronos Caravan, Pannonia Boundless, ¿fungiría al mismo tiempo como metáfora para referir la vocación pluricultural del Kronos Quartett?

?Para nosotros es una declaración de principios. Inclusive la compositora, Aleksandra Vrebalov, me dijo que al escribir esta partitura ella tuvo siempre en mente la naturaleza del trabajo que realizamos en el Kronos Quartet. Sí, de eso se trata. Y me encanta la idea, porque además Pannonia es un área del mundo bella en extremo, es un valle donde mucha gente de las más diferentes culturas, religiones y orígenes conviven y al mismo tiempo viven el tránsito e intercambio de pasajes y paisajes entre los varios puntos de contacto geográficos que allí convergen entre Asia y Europa. Es una imagen que me gusta sobremanera, como imagen real y como metáfora de nuestro trabajo.

?El término crossroads, también atribuible a Pannonia, adquiere empero en la jerga musical un tono despectivo, la emparenta con cosas a veces deleznables como new age o bien el genérico world music. ¿Te preocupa eso?

?En todo caso, el término world music tendría que ver con nosotros pero en sentidos y maneras muy diferentes a los que suelen definirse en el terreno de la industria musical. Lo es en el sentido de que el movimiento es lo que define a nuestra música, sonidos siempre en movimiento, desde puntos muy diferentes entre sí del mundo.

?Una buena parte, la mejor, del público de Kronos Quartet es joven, de edad mental, no sólo física, pues no es usual que un simple cuarteto de cuerdas haga tanto ruido y tan sabroso como sólo lo hace un grupo de rock, o bien produzca sonidos insólitos, como si fueran magos y por lo tanto ese público los trata a ustedes como rock stars, o bien como pop stars, ¿lo son?

?Lo que hacemos es interpretar la música más emocionante a nuestro alcance y hacerlo lo mejor que podamos. Lo que nos inspira, ciertamente, es el tipo de público que tenemos y lo disfrutamos a nuestra vez enormemente, en especial el de México ha sido tan receptivo a lo que hacemos y eso crea una retroalimentación en nosotros, pues siempre buscamos la manera de regresar lo más pronto que podamos. También, hacemos todo lo posible para nunca describir nuestra música, no sé como le llamen.