DOMINGO 10 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Custodia a jerarcas católicos en sede guadalupana


Pide la Arquidiócesis vigilancia permanente de la PFP en templos

Alma E. Muñoz Ť La Arquidiócesis de México solicitó a los gobiernos federal y capitalino la presencia indefinida de la Policía Federal Preventiva y del Agrupamiento de Granaderos, en los atrios de diversos templos católicos, especialmente la Basílica de Guadalupe, para combatir el ambulantaje, la drogadicción, la delincuencia y la prostitución que prevalecen en sus perímetros.

Antonio Macedo Tenllado, rector interino del santuario guadalupano, confió en que las medidas de seguridad se establezcan incluso en la Catedral Metropolitana y en conventos del Distrito Federal que carecen de puertas, porque "en todo lo que tenga la Iglesia habrá especial cuidado por parte del gobierno".

Desde ayer, los elementos de la Policía Federal Preventiva, destacamentados desde el viernes en la Basílica, caminan libremente por el interior de las capillas, incluso durante las celebraciones eucarísticas. También custodian a jerarcas católicos --como el cardenal Norberto Rivera, quien ofició en ocasión a los festejos por la aparición de la Virgen de Guadalupe a Juan Diego-- y algunos más se mantienen vigilantes en el atrio o revisan a algunos visitantes.

Las autoridades capitalinas anunciaron que la presencia de los 400 policías federales preventivos, mil de Seguridad Pública, 30 judiciales e igual número de Protección Civil son parte del operativo Basílica, programado del 8 al 13 de diciembre por las celebraciones de la Guadalupana.

Pero el rector del santuario planteó este sábado que la petición hecha por la Arquidiócesis de México --encabezada por el cardenal Norberto Rivera-- fue para mantener a los elementos del orden de "manera indefinida", para evitar ilícitos y terminar con el comercio informal que prevalece en el lugar desde hace años, prácticamente desde la gestión del ex abad Guillermo Schulemburg.

Macedo Tenllado aclaró que hay una colaboración "estrechísima" entre autoridades e Iglesia para terminar con los delitos en los recintos religiosos. Y anunció que el secretario de Seguridad Pública federal, Alejandro Gertz Manero, mañana sostendrá una reunión con las diversas dependencias para tratar el asunto de la seguridad en los templos.

Para ejemplificar sobre los ilícitos, el sacerdote citó: "Hay en la Gustavo A. Madero 2 mil y pico de sexoservidoras. Ninguna de ellas ha trabajado en la Basílica, pero atrás de la Iglesia del Pocito hay una puerta, donde se concentraban esas mujeres y los lenones que trabajan con ellas".

Acusaciones similares hizo el canónigo de la Catedral Metropolitana, Luis Avila Blancas, antes de la etapa de restauración del templo. El exhortó a los católicos que visitan el recinto a cuidar sus pertenencias y denunció incluso que atrás de las columnas de concreto la gente hacía sus necesidades.

Los ambulantes que por la presencia de la PFP no pudieron colocarse en el atrio de la Basílica fueron reubicados en la zona sur poniente de la avenida Fray Juan de Zumárraga.