MIERCOLES 13 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Se pueden hacer aumentos o reducciones a las partidas, dice el titular de SHCP


Sería suicida modificar el techo presupuestal, advierte Gil Díaz

Ť Anuncia adelgazamiento en Hacienda; hay gran cantidad de personas que no se sabe qué hacen

Ť Cuidar las finanzas de los estados, preocupación común de gobierno y diputados, asegura

Antonio Castellanos Ť El secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, afirmó ayer que el Presupuesto de Egresos puede ser adaptado. Las autoridades están abiertas a que los diputados dispongan reducciones o aumentos a las partidas, pero sin modificar el techo presupuestal, para no incurrir en mayor endeudamiento, porque elevaría las tasas de interés y provocaría más inflación. Ello nulificaría cualquier medida para fortalecer a los estados y significaría un "suicidio presupuestal".

Dijo que a principio de año se anunciará el adelgazamiento de la dependencia, con datos precisos para no cometer los errores recientes. Se hace un "peinado cuidadoso", porque hemos encontrado gran cantidad de personas que no sabemos qué estaban haciendo, con sueldos muy importantes. Se trata de una compactación de mayor alcance que la de los 300 puestos mencionados con anterioridad.

Hizo notar que una de las preocupaciones de todos los diputados y el gobierno federal es el cuidado de las finanzas de los estados, ya que hay varios con un nivel de endeudamiento muy alto, y si la discusión del tope de éste se prolonga hasta finales de mes se perturbarán los mercados financieros y se provocará aumento en las tasas de interés.

Los gobiernos locales más endeudados serán los primeros perjudicados, porque ni con mayores participaciones les alcanzaría para cubrir los intereses más importantes. Por esa razón, espero que los diputados preocupados por las finanzas de los gobiernos de las entidades actúen rápidamente y con responsabilidad para aprobar sin dificultad el programa económico para 2001.

Manifestó que funcionarios de Hacienda y legisladores hablan el mismo lenguaje. Tenemos, hizo notar, muchas coincidencias en los objetivos para enfrentar problemas como la pobreza; mejorar los niveles de educación y las participaciones a las entidades federativas. Hay también diferencias en el estilo y la forma de decir las cosas.

Gil Díaz expresó que con la reforma fiscal que se pretende discutir en abril, en caso aprobatorio, se tendrían mayores recursos. Ello permitiría modificar el presupuesto para aumentar los recursos destinados a combatir la pobreza, fortalecer los programas de educación y contribuir a un saneamiento de las finanzas públicas, que en adelante requieren de cuantiosos recursos.

Admitió que el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, Oscar Levín, puede tener razón en que son conservadores los Criterios Generales de Política Económica. Puede ser mayor el crecimiento económico y más alto el precio del petróleo, pero se tiene que ser prudente, porque no sabemos qué otras contingencias se puedan presentar, como los desastres naturales.

Al respecto, el secretario de Hacienda advirtió que si no tomamos las medidas para enfrentar contingencias, se tendrían que hacer ajustes presupuestales que son sumamente costosos, porque es interrumpir obra pública que luego cuesta mucho tiempo y recursos volver a echar a andar.

Por último, se refirió al adelgazamiento de la dependencia a su cargo y expresó: "Estamos haciendo un peinado cuidadoso de toda nuestra estructura. Yo prefiero no llamarlos aviadores, después de todos los efectos que produjo el comentario anterior, pero estamos, a partir de esa revisión, encontrando una cantidad enorme de mandos medios y superiores que no sé que estaban haciendo, no sé para qué se necesitaban y no sé por qué se estaban pagando esas cantidades. Será una compactación de estructura de mucho mayor alcance que las de los 300 puestos que mencione hace algunos días".