JUEVES 14 DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Se exponen en la retrospectiva del artista en el Museo Rufino Tamayo
El Centro Georges Pompidou adquirió ''objetos de trabajo'' de Gabriel Orozco
Ť Modelos, maquetas, dibujos y escritos se incorporarán al acervo permanente de ese espacio
Ť El recinto no se quedará con las piezas originales, sino con copias exactas, señala
Merry Mac Masters Ť El Centro Cultural Georges Pompidou, de París, acaba de adquirir una serie de ''objetos de trabajo" del artista mexicano Gabriel Orozco (Jalapa, Veracruz, 1962), expuestos actualmente en el Museo Rufino Tamayo dentro de una retrospectiva de su obra de los años noventa, como si estuvieran en cuatro grandes mesas de su estudio. Estos modelos, maquetas de proyectos, dibujos y escritos de su libreta, serán integrados a la colección permanente de arte del siglo 20, del recinto francés, misma que será reabierta al público el 4 de abril de 2001.
Por otro lado el Museo de Arte Moderno, de Nueva York, compró del artista la obra Caballos corriendo infinitamente, que es un juego de ajedrez, mientras que el Museo de Arte Contemporáneo (MOCA, por sus siglas en inglés), de Los Angeles, California, organizadora de la retrospectiva, adquirió la mesa de ping pong y los ''ventiladores".
Entrevistado, Orozco dice que el Pompidou no se va a quedar con los objetos ''originales", porque el artista los utiliza para desarrollar su trabajo, sino con ''copias exactas" que ya se elaboran. Sin embargo, el museo parisiense gozará de su exclusividad. Anota que el recinto tiene un equipo de curadores que viaja mucho y que Alison Gingeras había visto la muestra en el MOCA. Con el nuevo director del Pompidou, Alfred Paquement, la curadora propuso al comité correspondiente la compra de esos objetos. El mismo Paquement reinstalará la colección permanente para la reapertura.
Orozco, uno de los jóvenes artistas mexicanos más solicitados en el exterior, considera esos objetos de trabajos como ''el cerebro y el corazón" de su trabajo. Si las piezas en exhibición en el Tamayo equivalen a aquello recolectado en los últimos diez años, piensa que dentro de una década ''tal vez exista otra colección igual". Es como un trabajo muy personal; no tiene un tiempo definido, agrega. De nuevo en México, después de efectuar viajes a Viena, Estambul y Nueva York, le da gusto que la noticia de las adquisiciones se conozca cuando la obra aún se puede ver aquí.
La retrospectiva Gabriel Orozco constituye la primera vez que se muestra el conjunto de su obra en su país de origen. Alrededor de 2 mil personas asistieron a la inauguración de la muestra en el Tamayo el pasado 3 de octubre. Después de su estancia allí, el próximo 4 de febrero, la exposición itinerará al Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (Marco), para el día 22 del mismo mes. Cabe apuntar que en México fueron agregados algunos trabajos anteriores a 1990.