VIERNES 15 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Confía en lograr acuerdo para conciliar inflación y recuperación del poder adquisitivo


Injuria para los mexicanos, el minisalario: STPS

Ť Rechaza críticas al fallo de inexistencia de la huelga azucarera Ť Se salvó la zafra para 450 mil familias

David Zúñiga Ť El salario mínimo debería llamarse "salario ínfimo", porque es "una injuria para los mexicanos", reconoció el secretario del Trabajo y Previsión Social, Carlos María Abascal Carranza, quien confió en que patrones y sindicatos lleguen antes del 29 de diciembre a un acuerdo que concilie el control de la inflación con la recuperación del poder adquisitivo.

El funcionario rechazó las críticas a la declaración de inexistencia de la huelga de los azucareros y sostuvo que responden a una visión "miope y contraria a la legalidad".

Entrevistado la noche del miércoles, luego de reunirse con la Comisión Ejecutiva del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), el ex presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) dio a conocer que solicitará que se incremente el presupuesto para que la Secretaría del Trabajo modernice su equipo. Mencionó que algunas áreas aún laboran con computadoras 286, con 10 años de antigüedad y que ya son obsoletas.

Interrogado sobre el inicio de la consulta nacional para la reforma laboral, reiteró que primero se buscará un acuerdo entre el Ejecutivo y el Congreso para convocar a un diálogo en enero o febrero del próximo año. La consulta se realizaría a lo largo de 2001 y a finales de ese año o principios del siguiente podría estar listo el anteproyecto de reforma laboral.

Sobre los salarios contractuales, informó que se han efectuado revisiones en "muy buenos términos", pero la mayoría se resolverán en los primeros tres o cuatro meses del próximo año. Declinó dar a conocer cuál es el incremento promedio que se ha logrado en las revisiones contractuales realizadas hasta ahora, y sólo comentó que los aumentos han sido mayores a la inflación prevista para 2001 (6.5 por ciento).

Interrogado acerca de los estudios para la medición de la productividad, a fin de que ésta genere ingresos que complementen los ingresos de los trabajadores, Abascal informó que la subsecretaría de Capacitación, Empleo y Productividad está avanzando en la búsqueda de instrumentos de medición para aplicarlos en las empresas, "pero apenas llevamos seis días en el sillón".

Entre los asuntos más urgentes para el secretario está la modernización de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA), que "está semiabandonada. Confío en que el Congreso comprenda que este es un asunto prioritario, pues el edificio se está inclinando, nuestros equipos de cómputo son 286, no hay red interna de correo electrónico y no hay bases de datos confiables. Necesitamos dinero para invertir en capacitación, procesos, tecnología e infraestructura". El diagnóstico sobre la situación de la dependencia, agregó, deberá estar concluido en el primer semestre de 2001, para empezar la restructuración inmediatamente después.

Finalmente, se le preguntó al secretario si ya ha logrado convencer a los sindicatos de que, a pesar de su extracción empresarial, no tomará partido por el sector privado. Abascal respondió: "hubo quienes pensaron que el laudo de la JFCA que declaró inexistente la huelga de los azucareros fue un golpe a los trabajadores, evidentemente es una visión miope, totalmente injusta y contraria a la legalidad.

"Hemos explicado en ambos sectores que se trató de una decisión legal, y que esa decisión legal tuvo el efecto de salvar la zafra para 450 mil familias mexicanas, que se sigue dialogando y que pronto, con el favor de Dios, llegaremos a una conclusión sobre revisión de salarios, prestaciones y revisión del contrato de ley. En ningún caso se ha tratado de golpear a nadie, sino sólo de aplicar la ley".