DOMINGO 17 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Teme la población saqueos y desestima las advertencias de autoridades


Resistencia en la zona de riesgo a eventual desalojo

Hasta la noche de este sábado sólo habían aceptado ser desalojados 4 mil de los 32 mil habitantes que viven en las 17 localidades de Puebla ubicadas en el radio de riesgo de 16 kilómetros en torno al volcán Popocatépetl. Los pobladores desestiman la información oficial acerca del riesgo de una erupción de gran magnitud y temen que sus hogares sean saqueados o sus animales perezcan al no recibir alimento. Además, no quieren padecer las inclemencias sufridas hace seis años, cuando también fueron evacuados.

En Morelos, la Policía de Tránsito y la Secretaría de Seguridad Pública, sin previo aviso a permisionarios y concesionarios, comenzaron a detener unidades de transporte público para concentrarlas en los municipios Tetela, Ocuituco, Yecapixtla, Zacualpan y Temoac, luego de que el gobierno estatal determinó enviar cien unidades a la zona de riesgo para una eventual evacuación.

Al mediodía, el subsecretario de Gobernación de Puebla, Héctor Romero Vargas, aceptó que sólo ha respondido al llamado de evacuación 12 por ciento de los pobladores. Las autoridades anunciaron que este domingo, a las 11 horas, se determinará qué medidas adoptarán para persuadir a los vecinos a que abandonen sus comunidades.

La única población evacuada totalmente es Santa Catalina Cuilotepec, de 376 habitantes. En San Pedro Atlixco y San Pedro Benito Juárez, según la Secretaría de Gobernación estatal, hubo una respuesta al desalojo de 50 por ciento. En un recorrido por algunos de los 68 refugios que dispuso el gobierno poblano, se constató buena dotación de alimentos y atención médica, pero la gente está inquieta por regresar a sus casas, pues aseguran que "no pasa nada en el volcán", ya que cada año, desde 1994, en diciembre se ha registrado un incremento en la actividad del coloso sin que haya consecuencias mayores.

Durante el día, el gobernador Melquiades Morales Flores recorrió los poblados Santiago Xalitzintla, San Pedro Atlixco, San Pedro Benito Juárez y Tochimilco, para conminar a los habitantes a que acataran la orden de evacuación.

Los choferes del transporte público denunciaron que los obligaron a ir a las comunidades bajo la amenaza de retirarles los permisos y que no les habían dado alimentos, ropa para protegerse del frío ni dinero para gasolina. Un operador pidió a los reporteros que le prestaran 35 pesos para hablar por teléfono a su familia y decirle dónde estaba.

La misma situación se repitió en Morelos, en donde el gobierno envió cien unidades de transporte público a los cinco municipios de la zona de riesgo, pues la policía y la Secretaría de Seguridad Pública detuvieron las unidades para concentrarlas en Tetela, Ocuituco, Yecapixtla, Zacualpan y Temoac.

Elementos del Ejército mantienen patrullajes en esos municipios y se sumaron a los trabajos de bacheo de las rutas de evacuación. El obispo Luis Reynoso Cervantes lamentó que las autoridades se interesen en maquillar las rutas de evacuación cuando se presenta una actividad intensa en el volcán, por lo que exigió una reparación a fondo y no sólo el bacheo.

Según las unidades municipales de Protección Civil, las comunidades de Hueyapan, Ocoxaltepec, Jumiltepec y Tlalminilulpan han resentido nuevamente caída de ceniza volcánica.

En el estado de México, en los poblados cercanos al municipio de Atlautla, algunos habitantes señalaron que no tienen equipo para informar sobre el peligro. El párroco de la iglesia de Ecatzingo se negó a tocar las campanas para avisar de la emergencia, pues aseguró que necesitaba un permiso especial de la diócesis, que se ubica en Nezahualcóyotl, comentó el secretario del ayuntamiento, Filiberto Montaño Valdés. Estableció que ante ello y la falta de equipo, los 80 empleados del ayuntamiento casa por casa alertaron a los cerca de 8 mil habitantes; sin embargo, nadie quiso salir. Además se desalojó a mil de los 16 mil habitantes al decretarse la alerta roja en 11 comunidades, que fue levantada cuatro horas después.

El secretario de Gobierno mexiquense, Manuel Cadena Morales, señaló que se mantendrá el operativo en la zona durante otras 72 horas. Comentó que de los 260 refugios temporales se habilitaron 16 en Chalco, 13 en Valle de Chalco y 13 en Ixtapaluca.

La madrugada de este sábado, los habitantes de San Juan Tehuixtitlán, municipio de Atlautla, así como Tecomaxusco y Tlacotompa, en Ecatzinto, escucharon fuertes estruendos que cimbraran los vidrios. Salvador Valencia explicó que alrededor de las 2:30 horas despertaron al escuchar las explosiones y temblores que provocaba el coloso, por lo que empezaron a recolectar sus pertenencias y por su propia cuenta prepararon sus vehículos para abandonar la población.

Medardo Rodríguez Pérez, primer delegado de Texcomaxusco, mencionó que solicitaron información al Grupo de Apoyo y Reacción Inmediata Popocatépetl, "pero nos dijeron que no tenían conocimiento del cambio de alerta". Hasta las seis de la mañana cuando llegó alcalde local, nos enteramos que teníamos que ser evacuados.

En tanto, el secretario de Gobierno de Tlaxcala, Fabián Pérez Flores, informó que "tanto las rutas de evacuación como los 69 albergues están listos para recibir a 50 mil personas".

Por otro lado, Protección Civil de Maltrata, Orizaba, Acultzingo, La Perla y Mariano Escobedo reportaron la caída de ceniza ligera del Popocatépetl en territorio veracruzano desde hace tres días. (La Jornada de Oriente y La Jornada Morelos; Angeles Velasco, Oved Contreras y Andrés T. Morales, corresponsales)