VIERNES 22 DE DICIEMBRE DE 2000
Ť Pláticas fuera de San Lázaro, pero con nuevos actores
Un presunto pacto SHCP-PRD disloca negociación presupuestal
Ť Hubo molestia y desconcierto en las bancadas panista y priísta
Ť Aprobar gasto público, facultad de diputados: Calderón Hinojosa
Ciro Pérez Silva y David Aponte Ť La costumbre priísta de negociar el Presupuesto de Egresos fuera de la Cámara de Diputados se repitió ahora con protagonistas distintos, en esta ocasión entre el gobierno foxista y la dirigencia del PRD --según los perredistas--, situación que provocó molestia y desconcierto entre las bancadas de PAN y PRI.
El coordinador de la bancada panista en San Lázaro, Felipe Calderón Hinojosa, dijo que "celebraba" las reuniones del titular de Hacienda y Crédito Público, Francisco Gil Díaz, con los líderes y legis- ladores del PRD, pero que la aprobación del gasto público es "facultad" de la Cámara de Diputados.
Beatriz Paredes Rangel, dirigente del grupo parlamentario del PRI, intentó restar importancia al acuerdo gobierno-PRD. Sin embargo, lamentó que el Ejecutivo "quiera ignorar" instancias establecidas constitucionalmente, como la Cámara de Diputados y sus atribuciones exclusivas para sacar adelante el Presupuesto de Egresos de la Federación.
En San Lázaro se daban los primeros pasos en la aprobación del paquete económico. La plenaria aprobó sin complicaciones tres dictámenes: la Ley Federal de Derechos, la Miscelánea Fiscal y la Ley Aduanera.
La primera propone el establecimiento de nuevos derechos por servicios prestados por el Estado, en sus funciones de derecho público, para evitar el otorgamiento de subsidios injustificados. La legislación tiene como objeto la actualización de cuotas de algunos servicios que ofrecen las instituciones. La segunda considera la amnistía fiscal para los contribuyentes, personas físicas y morales, a partir de una correcta declaración del ejercicio del año 2000 y en adelante. La última adecua el tratamiento del impuesto general de importación para insumos, maquinaria y equipo, que quedan exentos de pago de conformidad con el contenido del Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Además, permite la creación de tiendas libres de impuestos en los cruces fronterizos, en adición a las terminales aéreas y marítimas.
Sorpresiva versión que paralizó a diputados
Las iniciativas pasaron sin mayor problema. En esas estaban los diputados cuando llegó la noticia de que el PRD ya había alcanzado un supuesto acuerdo con Gil Díaz para reasignar y aumentar el gasto social en 30 mil millones de pesos y elevar el déficit de 0.50 a 0.65 por ciento del PIB, según declaraciones del senador Jesús Ortega.
El presunto pacto entre el secretario de Hacienda y los dirigentes perredistas dislocó las negociaciones en San Lázaro, que ya avanzaban hacia la posibilidad de sacar adelante la Ley de Ingresos en la Comisión de Hacienda para después entrar al Presupuesto de Egresos.
Aquéllos que mantenían en sus manos la negociación se vieron obligados a reaccionar otra vez ante las noticias que se daban fuera de San Lázaro, en este caso una conferencia del senador perredista Jesús Ortega. Como en las gestiones del pasado, las del PRI, los acuerdos del paquete económico tenían lugar en las instalaciones del Poder Ejecutivo.
Ni el coordinador de los perredistas, Martí Batres, ni el de los panistas, Felipe Calderón, tenían idea de lo que sucedía en la Secretaría de Hacienda.
El del PRD sólo comentó que tenía que acudir a Palacio Nacional por la noche para dialogar con Gil Díaz, cuando el anuncio del acuerdo ya estaba dado por Jesús Ortega. Los diputados se volvieron socráticos.
Calderón Hinojosa preguntó a los periodistas el contenido del pacto: "ƑQué están diciendo exactamente?". Los reporteros mostraron sus libretas con los números, los datos.
En medio de la sorpresa pasó a la ofensiva: "Pues, como he dicho, los acuerdos sobre ingresos y egresos se hacen aquí en la Cámara, y eso es válido para PAN, PRI y PRD. Yo celebro que haya reuniones entre la Secretaría de Hacienda y todos los partidos políticos, incluido el PRD. Estamos aquí mismo en la Cámara muy cerca de llegar a un acuerdo sobre ingresos y egresos. No está así en los términos en que los plantea Ortega, pero se acercan algunos conceptos y rubros a lo que estamos trabajando con PRI y PRD aquí mismo en la Cámara.
"Agradezco los buenos oficios de Jesús Ortega, y simplemente le recuerdo a él que las decisiones de Ley de Ingresos, en términos de la Constitución, inician aquí en la Cámara de Diputados. Aquí estamos discutiendo con los compañeros de PRI y PRD. Recibimos sus recomendaciones y sugerencias como eso, porque no son otra cosa, independientemente de que los haya platicado con el secretario de Hacienda, con Cuauhtémoc Cárdenas o con quien haya sido".
--ƑDesconocen este acuerdo del que habla Jesús Ortega?
--No; sé que están hablando Hacienda y todos los partidos. Eso coadyuva a incrementar la posibilidad de consenso, pero dificilmente podrá alcanzarse un acuerdo fuera de la Cámara. En todo caso serán propósitos comunes del gobierno y de un partido político en lo particular, pero lo que se procese aquí en la Cámara será lo que verdaderamente se acuerde.
--ƑNo existe una falta de respeto a la Cámara?
--No, no es falta de respeto. Simplemente lo que veo es que hay muchos senadores con una gran nostalgia de su época de diputados, y bueno, con el tiempo todo mundo caerá en la cuenta de que el Senado tiene funciones distintas a las de la Cámara de Diputados. Sólo que la época vivida en la 57 Legislatura fue muy intensa, muy vívida para todos, y provoca una nostalgia importante que hace que el Senado recurrentemente quiera legislar en materia económica, aunque carezca de facultades para ello.
Molesto, el coordinador panista agregó que es probable que su bancada acepte un aumento en el déficit público por encima de la propuesta del presidente Vicente Fox Quesada.
Incluso el presidente de la Comisión de Presupuesto, Luis Pazos, defensor a ultranza de la iniciativa foxista del .05 por ciento del PIB como déficit, reconoció que ya los habían "comprometido" con el contenido del supuesto pacto Gil Díaz-PRD.
Los priístas también eran ajenos a la negociación que se daba fuera de San Lázaro. Confundidos, algunos integrantes del grupo parlamentario preguntaban en la sala de prensa si el pacto con los perredistas ya era oficial.
Por la noche, al concluir la sesión ordinaria, convocaron a una conferencia de prensa con Paredes Rangel, quien trató de no darle importancia al anuncio de los dirigentes perredistas.
"No estamos interesados en protagonismos, sino en las necesidades sociales de la población. No queremos pintar de algún color los recursos, sino que estos lleguen a la gente", dijo.
El PRI empujó para asignar mayores recursos a educación, campo, jubilados; a estados y municipios, al Distrito Federal, sin anuncios de carácter "propagandístico". La Cámara de Diputados tomará la decisión final, dijo.
--ƑEs factible la reasignación de 30 mil millones de pesos, como lo propone el PRD?
--No conozco el planteamiento último del PRD. El PRD ha venido variando su planteamiento, y hasta donde ustedes vieron, Martí Batres estaba aquí y nosotros estamos negociando con Martí Batres. Entonces, vamos a esperar el planteamiento de la bancada perredista, porque nosotros somos respetuosos de la legitimidad de los diputados del PRD. Creo que es algo que vale la pena recordarle a otras instancias.
--ƑEl PRI quedó fuera de la negociación, del show, del papel protagónico?
--Es que a nosotros no nos interesa el show. Nos interesa el pueblo de México, y cuando nosotros responsablemente estábamos aprobando las leyes que necesita el pueblo de México, otros estaban en una táctica que no criticamos, sino que consideramos que en este momento lo más pertinente es que los diputados estuviéramos cumpliendo con nuestra responsabilidad, como lo hicimos.
La confusión del presunto pacto canceló las negociaciones para la aprobación de la Ley de Ingresos. La Comisión de Hacienda había convocado a una reunión con la intención de presentar hoy al pleno el dictamen de esta legislación, que fijará los recursos con los que contará el gobierno federal para el 2001.