VIERNES 22 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Fomentaría la equidad en el otorgamiento de subsidios: González Romero


"Bolsa de compensación", plantea el rector de la UdeG

José Galán Ť Elevar las cuotas de acceso a la educación superior pública en el país no resolverá los problemas de calidad y cobertura educativa que demandan los jóvenes mexicanos, afirmó Víctor Manuel González Romero, rector de la Universidad de Guadalajara -la segunda universidad pública más importante del país después de la UNAM, con 178 mil alumnos-, quien exigió "equidad" en el otorgamiento de los subsidios.

En conversación telefónica con este diario, expresó su esperanza en que la Cámara de Diputados realice una "reasignación de recursos para que, cuando menos, no vayamos a tener paros de trabajadores en todas las universidades del país el año entrante", y eleve los subsidios a las universidades e institutos de educación superior pública.

"No entendemos cómo sacan programas para rescatar bancos, seguros, carreteras o ingenios, pero no hay ningún programa para rescatar a los jóvenes del país y para generar planes de desarrollo", dijo. En el caso de la UdeG, como en otras universidades públicas estatales, la propuesta de incremento es de 8 por ciento, es decir, una media nacional fuera del Distrito Federal, "pero nosotros necesitamos un incremento de 50 por ciento más", es decir, mil 500 millones de pesos.

Los 5 mil trabajadores administrativos de la UdeG piden un incremento salarial de 50 por ciento, mientras que los 11 mil académicos exigen un aumento de 23 por ciento, "y nosotros no tenemos recursos. Imposible cumplir con sus exigencias. Lo que podemos sólo ofrecer es 8 por ciento", que es el aumento considerado para su presupuesto por el proyecto de egresos en manos de los diputados. El rector de la UdeG sostuvo que la institución que encabeza es la que tiene las cuotas más altas del país.

"Estas cuotas son de carácter voluntario. Los alumnos en este ciclo escolar van a aportar en promedio mil 200 pesos. Es decir, una cuota de 240 pesos y como mil pesos más de manera voluntaria, pero si no tienen recursos, no tienen que aportar nada", explicó.

Agregó: "Nos costó mucho trabajo elevar las cuotas. Y de nada nos ha servido, porque a la mera hora los subsidios disminuyen para las universidades públicas estatales en mayor medida que a las instituciones públicas federales".

"A nosotros el gobierno federal nos da como 10 mil pesos por alumno, cuando a la UNAM le da cerca de 50 mil pesos por alumno. Nos tienen muy castigados".

Consideró por ello que en el país "hay una gran desigualdad", y que incluso para las grandes universidades públicas federales los recursos son insuficientes, "y para nosotros menos que insuficientes".

González Romero propuso que haya una estrategia de apoyo a la educación pública "en todos los niveles" y, en segundo lugar, que exista una "bolsa de compensación" para las universidades públicas, "cuya asignación se encuentra por debajo de la media nacional".

"Lo que yo exigiría es que hubiera criterios para la asignación de recursos y acabar con la desigualdad. Debo reconocer que, dentro de la ANUIES, hemos ido ya tres veces a la Cámara de Diputados a pelear nuestro presupuesto. Las cosas siguen igual, excepto que ahora han cambiado porque, por lo menos, nos escu- chan", añadió.

El año pasado, la UdeG rechazó a dos de cada tres aspirantes por insuficiencia de fondos, infraestructura y equipamiento, además del pago de salarios, "y esos alumnos se quedaron sin estudiar, porque no les alcanza para ingresar en una universidad privada". Para combatir este problema de cobertura, "las cuotas en realidad ayudan muy poquito, porque la cantidad que razonablemente pueden aportar no representa una elevación significativa de los recursos". Así que elevar las cuotas "es injusto", finalizó el rector de la Ude G.