VIERNES 22 DE DICIEMBRE DE 2000

Ť Diego Monroy Ponce, nuevo rector del santuario


En la basílica de Guadalupe, mano dura contra ambulantes

Ť Antes buscará dialogar con lo comerciantes, dice el presbítero

José Antonio Román Ť El arzobispo primado de México, cardenal Norberto Rivera Carrera, designó ayer al presbítero Diego Monroy Ponce como nuevo rector de la basílica de Guadalupe para el periodo 2001-2006.

Ponce Monroy sustituye a Antonio Macedo Tenllado, quien desde el primero de noviembre de 196 fungía como rector interino del santuario nacional, luego de una larga y polémica abadía de 33 años de monseñor Guillermo Schulenburg.

La designación hecha por el cardenal Rivera se dio después de que fueron modificados, con aprobación del Papa Juan Pablo II, los ordenamientos jurídicos de la basílica, y de conocer la terna presentada por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM).

En conferencia de prensa, el nuevo rector y vicario episcopal de Guadalupe se comprometió a fortalecer la tarea evangelizadora del santuario mariano más importante de América y mejorar la atención a los millones de peregrinos que anualmente visitan el templo del Tepeyac.

Acompañado de Macedo Tenllado, quien no dejó su rostro adusto e incluso hasta molesto, Monroy Ponce se refirió también al problema del comercio ambulante que existe en el atrio de la basílica. Dijo que se buscará un diálogo con los comerciantes, pero que tampoco se dudará en recurrir a la "mano dura" para lograr que este espacio del templo permanezca libre de ese tipo de comercios.

El nuevo rector nació el 26 de noviembre de 1947, en Quiroga, Michoacán. El 29 de junio de 1973 fue ordenado diácono y al concluir su cuarto de Teología ejerció su ministerio. Exactamente dos años después es ordenado presbítero por el cardenal Miguel Darío Miranda, arzobispo primado de México.

En 1980, Monroy Ponce funda la comunidad de evangelización de Santa María Tecuatlasupe en el perímetro de la basílica y en ese mismo periodo es llamado a colaborar en el equipo arquidiocesano de la renovación cristiana en el espíritu santo.

Designado por el arzobispo Norberto Rivera como coordinador de eventos especiales en la arquidiócesis de México, Diego Monroy coordinó la Jornada Mundial del Rosario, la festividad de Corpus Christi, la procesión del Santísimo en 1996 y 1997 y el III Encuentro Mundial de Sacerdotes, este último convocado por el Papa Juan Pablo II y realizado en México en junio de 1998.