Autoriza Gobernación el retorno de familias a comunidades evacuadas

Ť Empero, la medida puede revertirse si el volcán vuelve a una etapa crítica, advierten autoridades

Alonso Urrutia

Miles de personas evacuadas de las comunidades aledañas al Popocatépetl comenzaron a regresar a sus hogares ayer por la tarde, una vez que la Secretaría de Gobernación flexibilizó las medidas de seguridad aplicadas desde hace 12 días. La decisión se adoptó luego de que los especialistas del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) informaron que el volcán había entrado en una nueva fase de ''exhalaciones moderadas'' que, por el momento, no pone en riesgo a la población.

Sin embargo, el coordinador nacional de Protección Civil, Oscar Navarro Gárate, aseveró que esta situación puede modificarse si el comportamiento del coloso retorna a una etapa crítica, lo cual no es previsible en los próximos días. Precisó que el radio de seguridad en torno al cráter se ajustó de 13 a 12 kilómetros, por lo que dentro de este margen sólo quedarán 17 casas a las que sus moradores no podrán regresar.

Revisión a techos

Asimismo, Navarro explicó que en los casos de las comunidades de San Pedro Benito Juárez y Santiago Xalitzintla, el retorno se realizará una vez que autoridades municipales revisen las condiciones de las viviendas que pudieran haberse visto afectadas por la acumulación de ceniza en sus techos.

Los reportes del monitoreo volcánico indican que el Popocatépetl entró en una fase de ''exhalaciones moderadas'' y, a diferencia de días recientes ?según explicó Servando de la Cruz?, ha dejado de acumularse lava en su interior, lo que supone que las exhalaciones registradas no representan un riesgo importante, toda vez que sólo corresponden a una fase destructiva del domo.

El anuncio del retorno formal de las personas evacuadas a sus comunidades se dio a partir de las nuevas condiciones del volcán, aunque se reconoció que hasta el momento de comunicar esta decisión sólo quedaban en los albergues unas 16 mil personas, esto es, poco más de la mitad de las que había en la fase más crítica.

Alrededor de las 17 horas, Navarro Gárate oficializaba el anuncio que ya se venía anticipando en días pasados: ''Podrán regresar inmediatamente los habitantes de las comunidades cuya ubicación se encuentre fuera del rango de 12 kilómetros de seguridad'', lo que involucra la totalidad de los 22 sitios que fueron desalojados cuando el volcán entró en fase crítica.

La autorización para retornar incluyó a los poblados de San Pedro Benito Juárez y Santiago Xalitzintla, pese a que se encuentran a 11.6 kilómetros de distancia del cráter. En ambos sitios se mantendrán transportes para volver a desalojar si la situación así lo amerita.

En el primer caso (San Pedro Benito Juárez), los habitantes deberán verificar la situación que guardan sus viviendas, y particularmente la resistencia de los techos por la acumulación de ceniza, para lo cual se integrarán brigadas comunitarias y de peritos. De requerirse un reforzamiento, se proporcionarán los materiales y el pago de jornales.

Por lo que hace a Santiago Xalitzintla y la comunidad de San Nicolás de los Ranchos, Navarro mencionó que aquellas familias que habiten en el lecho de ríos y barrancas deberán solicitar la aprobación de las autoridades federales para regresar, dado el riesgo que corren. Técnicos de la Comisión Nacional del Agua realizarán estudios de quiénes deberán ser reubicados.

El funcionario señaló que no se permitirá que dentro del radio de 10 kilómetros se realice alguna actividad, incluso las productivas, hasta nuevo aviso. Comentó que se realizará un censo de las personas que tienen que laborar ahí, para proponer alternativas.

Comentó además que dentro del rango de los 10 kilómetros se tienen identificadas ''alrededor de 17 llamémosle granjas, porque no son poblados, las que fueron evacuadas desde un principio y que se encuentran del lado del estado de México. Estas familias no podrán regresar''.

Tensa calma

Los reportes que el Cenapred entregó al Centro de Mando y Toma de Decisiones, indicaban que después de cinco días de calma relativa ''el volcán Popocatépetl entró, desde el día 24 de diciembre, en una nueva fase de actividad consistente en eventos de exhalaciones explosivas de nivel moderado que se repiten, y que posiblemente continuarán a lo largo de varios días o semanas, hasta que el domo de lava emplazado en el interior del cráter sea removido''.

El director del Cenapred, Roberto Quass, dijo que dichas exhalaciones podrían lanzar fragmentos incandescentes a distancias de hasta 5 kilómetros, y ''pueden provocar también lluvias moderadas de fragmentos menores, ya enfriados, hasta 10 kilómetros''.

Asimismo, en un radio de entre 10 y 15 kilómetros, lo que podría registrarse ?precisó Quass? son lluvias o caída moderada de arena, gravilla o ceniza. Fuera de éste, sólo se espera la presencia de ceniza muy fina, pero dependiendo de la orientación del viento. Estas columnas de ceniza podrían alcanzar una altura de hasta 5 kilómetros.

A partir de esta información, el comité científico del Cenapred recomendó ''ajustar el radio de seguridad de 13 a 12 kilómetros, en el entendido que del desarrollo futuro de la actividad del volcán podría derivar un nuevo ajuste'', por lo cual se anunciaron evaluaciones semanales de las que surgirían las medidas de seguridad pertinentes.

?¿Se corre el riesgo de que el Popocatépetl vuelva a presentar fuertes erupciones en unas horas o días?

?La actividad del volcán consistió en el emplazamiento del domo al interior del cráter. En esta etapa era difícil precisar el límite de su actividad eruptiva, puesto que la lava estaba acumulándose a niveles sin precedente.

''Afortunadamente, el proceso de crecimiento del domo y de acumulación de lava se detuvieron, tomando una actitud de relativa quietud hasta que se inició la destrucción del domo. Va a haber una serie de exhalaciones explosivas que eventualmente destruirán el domo; sin embargo, la dimensión de estos eventos está acotada, porque ya no hay una nueva acumulación de lava, es simplemente un proceso de destrucción, donde claramente se pueden delimitar sus alcances'', dijo Servando de la Cruz, del Centro Nacional de Prevención de Desastres.