SABADO 30 DE DICIEMBRE DE 2000
 
Ť Seguirán programas de infraestructura en Pemex y CFE

Apretado, el gasto público para 2001, advierte SHCP

Ť Aún es prematuro confiar en las metas macroeconómicas, dice Gil Díaz

Antonio Castellanos

El secretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, afirmó ayer que el gasto público para 2001 quedó apretado y exigirá un esfuerzo permanente para impedir que el déficit público sea superior a 0.50 por ciento del producto interno bruto, y aseguró que a pesar de los recortes a que obligó la reasignación del presupuesto, no se afectarán programas de infraestructura en Pemex y la Comisión Federal de Electricidad.

gil-diaz-shcp-conferencia-En conferencia de prensa, el funcionario indicó que se revisará el impuesto al valor agregado, habrá un combate frontal contra los orígenes de la economía informal, como son el contrabando y la venta de mercancía robada. El escenario para México es difícil, sobre todo por la baja en el precio del petróleo y la desaceleración en la economía de Estados Unidos, precisó.

Vamos, dijo, a intensificar los esfuerzos en la administración tributaria, y se esperan buenos resultados del programa Cuenta Nueva y Borrón, como por el ataque a la economía informal en sus orígenes. Se buscará la consolidación de estructuras y en todas las dependencias se llevará a cabo una acción generalizada para lograr une estricto control del gasto corriente.

La próxima semana, agregó, se iniciarán pláticas con líderes de comisiones del Congreso para revisar todo lo relacionado con el IVA, para llegar a abril con un proyecto de reforma a la hacienda pública, hacendaria y financiera, que nos permita fortalecer los ingresos.

En el caso del IVA, explicó, la reforma incluirá una red de protección para no afectar a las personas de menores ingresos, algunas incluso se verán mejoradas aun después de pagar más, como resultado del cobro del gravamen en alimentos y medicinas.

El secretario de Hacienda reconoció que es prematuro tener confianza en alcanzar las metas macroeconómicas, en el escenario que plantea la economía de Estados Unidos, la baja en el precio del petróleo y un gasto público apretado, y en el caso de los recursos para el Instituto para la Protección al Ahorro Bancario y los salarios de los ex presidentes, respondió: "lo que los diputados determinen, se acatará. Afortunadamente yo no soy ex presidente".

Hizo notar que se cumplirá con los programas que el Congreso de la Unión estableció. Se aplicarán las cantidades adicionales que se autorizaron y el destino que se les asignó, pero el gobierno, dentro de sus estructuras, llevará a cabo el esfuerzo que se hace necesario para llegar a la meta del medio por ciento del producto.

Finalmente, dijo que se iniciará una intensa campaña con la ayuda de la Policía Federal Preventiva y las secretarías de Gobernación y de la Controlaría, en contra del comercio y de la producción ilícita de mercancías.