LUNES Ť 8 Ť ENERO Ť 2001

DINERO


 


Enrique Galvan Ochoa

Ť El árbitro en Tabasco

Ť Fox y Andrés Manuel

por el Pichichi

Ť Superlimpia de burócratas

SEMANA, LA QUE TERMINO, de mucho juego y rejuego pero pocos goles. La atención de los aficionados sigue puesta en Tabasco, que ya se fue a tiempo extra. Fox juega desde la cómoda posición de árbitro. El encuentro disputado por priístas y perredistas podría tener un final ridículo si finalmente la gubernatura es ocupada por alguien afín al panismo. Según la Constitución, artículo 76, ''cuando hayan desaparecido todos los poderes constitucionales de un estado'', corresponderá al Senado, o a la Comisión Permanente, declarar que ha llegado el caso de nombrar a un gobernador provisional. Este sería seleccionado de una terna que propusiera el jefe del Ejecutivo. Con esa facultad, Fox puede esperar todo el tiempo que considere conveniente para resolver el singular sainete en que participan cinco gobernadores: por el bando de los malos, Manuel Andrade, presunto ganador de las elecciones fraudulentas, a quien el Tribunal Electoral anuló el triunfo, y Enrique Priego, su reemplazo, nombrado por un Congreso obediente a Madrazo. Por el lado de los buenos, el candidato aliancista que resultó perdedor y víctima del fraude, Raúl Ojeda, y el sustituto que designó el nuevo Congreso, Adán López. El quinto sería el propio Madrazo quien, desde cualquier sitio donde se encuentre, intenta continuar moviendo los hilos del poder.

Empate a gol


CADA DIA QUE PASA se ve con mayor claridad que el Pichichi será disputado por Fox y López Obrador. Esta semana le tocó a Vicente Fox tomar la ventaja en el goleo individual. Anotó con una chilena dibujadita al referirse al tema de la deuda del gobierno del Distrito Federal. Su administración no se hará cargo de ella; López Obrador deberá pagar las trácalas que heredó de doña Rosario, Cuauhtémoc, Espinosa Villarreal y así hasta llegar al profesor Hank González, a quien, si mal no recuerdo, López Portillo le hizo el servicio de limpiarle los números, pero en ese mismo momento comenzó otra vez a endeudarse. Fox le sugiere que suba el precio del Metro para equilibrar sus finanzas. Se calienta el Pichichi .

Autogol de burócratas


MILLARES SE ilusionaron con la promesa del cambio. Las cosas, sin embargo, podrían no resultar exactamente como lo imaginaron. El foxismo prepara la tijera para un recorte de nómina mayúsculo. De ese modo pretende conseguir el ahorro necesario para cubrir otros renglones del gasto.

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