JUEVES Ť 18 Ť ENERO Ť 2001
Ť Los legisladores le asignaron sólo 595.6 millones de pesos; solicitaba 940
El TEPJF enfrenta una situación "crítica" debido al recorte en su presupuesto
Ť Se asegura que es la "factura" que pagó ese órgano por la controvertida labor del titular
JESUS ARANDA
Además de las críticas y falta de cumplimiento de las sentencias del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que han puesto incluso en entredicho su permanencia como instancia definitiva en la materia, el máximo órgano electoral enfrenta una "crítica" situación debido al recorte presupuestal que determinó el Congreso de la Unión para este año. Los legisladores ignoraron la petición del tribunal, de 940 millones de pesos, y le asignaron únicamente 595 millones 650 mil pesos.
Paradójicamente, de los tres órganos que integran el Poder Judicial de la Federación -Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Consejo de la Judicatura Federal y el TEPJF-, al único que le redujeron la partida presupuestal para el 2001 fue al tribunal electoral.
Funcionarios judiciales consultados comentaron al respecto que un factor que influyó negativamente en contra del TEPJF fue que -a diferencia del ministro Genaro Góngora Pimentel (presidente de la Corte y del Consejo), quien realizó una intensa labor de cabildeo con los partidos políticos para que le incrementaran el presupuesto- su presidente, Fernando Ojesto Martínez Porcayo, "estaba atado de manos" y no se encontraba en condiciones de hablar siquiera con los partidos políticos, porque debido a sus declaraciones previas sobre el caso Tabasco, el PAN y el PRD demandaron no sólo que se excusara de calificar los comicios tabasqueños, sino que incluso promovieron juicio político en su contra.
Esta situación generó divisiones al interior del propio TEPJF -hubo magistrados que le propusieron incluso que renunciara a su cargo por sus "imprudentes" declaraciones sobre las elecciones en Tabasco-, y hay quienes consideran que el recorte presupuestal fue la "factura" que pagó el máximo órgano en materia electoral por la controvertida labor de su presidente.
Ante esta situación de falta de recursos, que representa en términos reales una reducción de alrededor del 40 por ciento del presupuesto solicitado, trascendió que hay preocupación al interior del tribunal por la falta de recursos, ya que si bien es cierto que este año no habrá comicios federales, están previstos 13 procesos electorales locales (Yucatán, Durango, Chihuahua, Baja California, Zacatecas, Aguascalientes, Oaxaca, Chiapas, Sinaloa, Tamaulipas, Tlaxcala, Michoacán y Puebla), en los cuales, como en el resto de las elecciones, la inmensa mayoría de los asuntos son resueltos en última instancia por el TEPJF.
Funcionarios judiciales reconocieron que tanto la Sala Superior como las cinco salas regionales del TEPJF (Guadalajara, Monterrey, Toluca, Jalapa y Distrito Federal) iniciarán en breve un proceso de "redimensionamiento" del personal para hacer frente a la escasez de recursos.
Tan sólo en la Sala Superior, los siete magistrados electorales analizan el despido de al menos 40 funcionarios.
Cabe señalar que si bien el Poder Judicial de la Federación no recibió para este año el presupuesto solicitado inicialmente, que ascendía a 15 mil 303 millones de pesos -quedó finalmente en 15 mil 800 millones-, los legisladores al aprobar el presupuesto de egresos de este año le asignaron a la Suprema Corte un total de un mil 667 millones de pesos, al Consejo de la Judicatura Federal 11 mil 540 millones y al TEPJF sólo 595 millones de pesos.
La Suprema Corte recibió prácticamente la misma cantidad que el año pasado; el Consejo no podrá construir los 30 órganos jurisdiccionales propuestos inicialmente, pero tendrá recursos suficientes para instalar al menos seis o siete jugados y tribunales; sin embargo, el tribunal electoral reducirá su plantilla y afectará sus programas de capacitación e infraestructura.