VIERNES Ť 19 Ť ENERO Ť 2001
Ť Sería dentro del programa Sábados por la unidad
Apoyo del Ejército en Azcapotzalco, con nuestras condiciones: Saldaña
BERTHA TERESA RAMIREZ
La unidad El Rosario, en Azcapotzalco, sería uno de los sitios donde el Ejército Mexicano realice actividades sociales, en apoyo al programa Sábados por la unidad, que en breve iniciará la jefa delegacional, Margarita Saldaña. Luego de que la delegada en Milpa Alta, Guadalupe Chavira, declinó aceptar el apoyo de la Sedena en trabajos de carácter social, Azcapotzalco podría convertirse en la segunda demarcación política adonde el Ejército realice dichas labores, después de Iztapalapa.
En entrevista con La Jornada, la delegada en Azcapotzalco dijo que el apoyo castrense estará condicionado a que la Sedena acepte proporcionar su ayuda en las zonas donde la delegación lo requiera, "y por el momento necesitamos este tipo de ayuda en las unidades habitacionales, donde tenemos grandes demandas de pintura, impermeabilización, poda de árboles, desazolve, etcétera".
La funcionaria dijo que en la circunscripción existen 58 unidades habitacionales, 27 de ellas muy grandes, como El Rosario, en donde particularmente "nos gustaría que nos echaran la mano".
Agregó que en esa unidad hay un problema muy fuerte de inseguridad, pero el Ejército no iría para combatir a la delincuencia, sino para atender demandas de servicios, insistió.
Margarita Saldaña indicó que aún está en pláticas con representantes de la Sedena "para acordar de qué manera podría darse esta presencia; si logramos ponernos de acuerdo ellos vendrán. Entre las condiciones que la delegación estableció es que el apoyo se circunscriba a los servicios sociales, que no vendrían armados y que la ayuda se proporcione en las unidades habitacionales, a través del programa Sábados por la unidad".
Agregó que además de esto, consultaría a la comunidad de los conjuntos habitacionales si estarían de acuerdo en que elementos del Ejército entren en esas zonas para realizar dichos trabajos; si la gente no está de acuerdo, los soldados no participará, insistió.
Consideró que la presencia militar en labores sociales en el DF es un ensayo que debe realizarse, si no le gusta la gente, "los regresamos a los cuarteles; con la misma tranquilidad con la que los aceptamos, se les puede decir que no funciona porque la gente no lo ve normal".
Para concluir, Saldaña dijo que por el momento los seis jefes delegacionales de extracción panista no han considerado la posibilidad de solicitar en bloque la presencia castrense en las delegaciones que gobiernan: Miguel Hidalgo, Alvaro Obregón, Cuajimalpa, Benito Júarez, Venustiano Carranza y Azcapotzalco. Hasta el momento sólo los delegados en Benito Júarez y Miguel Hidalgo no se han pronunciado al respecto, el resto de los jefes delegacionales se han manifestado a favor.
Por su parte, la subdelegada jurídica y de gobierno en Iztapalapa, Diana Bernal Ladrón de Guevara, explicó que la presencia del Ejército en la demarcación tiene sustento legal en el artículo 743 de la Constitución y en la Ley del Ejército y Fuerza Area mexicanos, cuyo artículo primero establece, en su fracción IV, sus misiones de realizar acciones cívicas y obras sociales que tiendan al progreso del país.
Esto se corrobora en el Reglamento General de Deberes Militares, expedido el 16 de marzo de 1937, por el presidente de la República, general Lazaro Cárdenas. "Por lo tanto, la presencia del Ejército en Iztapalapa, realizando obras de carácter social, es estrictamente constitucional y legal", dijo en un comunicado.