MIERCOLES Ť 24 Ť ENERO Ť 2001

Asistirán 11 parlamentarios europeos a la anticumbre en Porto Alegre

bruselas, 23 de enero. Un grupo de 11 miembros del Parlamento Europeo se desplazarán a la localidad brasileña de Porto Alegre para participar en el Foro Social Mundial (FSM), que se celebrará como alternativa al Foro Económico Mundial de Davos (Suiza).

El grupo responde a la invitación hecha el pasado noviembre en el Parlamento Europeo, en Bruselas, por Miguel Rossetto, vicegobernador del estado brasileño de Río Grande del Sur, en cuya capital se realizará el foro y la cual es gobernada desde hace 12 años por la oposición de izquierda del Partido del Trabajo (PT).

Por el grupo Izquierda Unitaria Europea viajan su presidente, el francés Francis Wurtz, el también galo Alain Krivine, el portugués Ilda Siguereida, el sueco Herman Schmid, y el español Pedro Marset. También estará presente el secretario general de este grupo, el italiano Stephano Squarcina. Por parte del grupo de los Verdes participarán los franceses Danielle Auroi y Alain Lipietz, el luxemburgués Claude Turmes y el español Camilo Nogueira. El Grupo Socialista Europeo enviará a un solo eurodiputado, el francés Harlem Desir.

Al FSM, que se realizará del 25 al 30 de enero, le seguirá un Foro Parlamentario Mundial en el que participarán los eurodiputados y en el que discutirán temas como la deuda externa, el gravamen de las transacciones financieras internacionales y cómo las instituciones pueden controlar la mundialización.

En este foro se pretende "construir alternativas para hacer frente a los modelos de exclusión y miseria que representa el neoliberalismo ", explicó el vicegobernador Rossetto a los parlamentarios europeos en su carta de invitación.

El Foro de Porto Alegre "no es sólo una manifestación de protesta pura y simple, como Seattle, Niza o Praga, sino que se trata de empezar a construir respuestas alternativas a la globalización", declaró a Afp el parlamentario europeo Francis Wurtz.

Asimismo, el parlamentario agregó que en este foro "no hay pretensión de elaborar una línea común", ya que "las realidades entre países son muy distintas", sino de "confrontar experiencias".

De acuerdo con Wurtz, también se espera que desde el Foro Parlamentario Mundial, que seguirá al FSM, se "lance un llamado común que siente las bases de una cooperación duradera, llamada a crecer, entre parlamentarios del mundo, en una óptica alternativa al liberalismo".

Por su parte, el diputado socialista Harlem Désir espera en Porto Alegre "establecer lazos con los distintos movimientos sociales", y también "entre parlamentarios que en cada país intentan promover iniciativas democráticas nuevas".

Désir destacó que Porto Alegre "no es sólo una anticumbre, sino que fija su propia agenda", sin dejar que las fuerzas económicas la dicten. (AFP)