VIERNES Ť 26 Ť ENERO Ť 2001
Ť Al azar se obliga a pasajeros sospechosos a abandonar el tren rumbo a Davos
La policía suiza usaría hasta estiércol contra activistas
REUTERS
Davos, Suiza, 25 de enero. Cientos de policías suizos, efectivos de tropas especiales y rollos de alambre de púas recibieron a la elite corporativa y política del mundo a su llegada para la cumbre anual empresarial de Davos. El nerviosismo en torno al estado de la economía global se mezcló con las preocupaciones de que manifestantes violentos puedan perturbar la reunión anual del Foro Económico Mundial, que concluirá el martes 30.
La televisión suiza estimó que entre mil y 2 mil policías estaban prestos a contener las protestas antiglobalización que en el 2000 sacudieron la cumbre de la Unión Europea en Niza, las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial en Praga, y la misma reunión de Davos.
La policía suiza, que ha montado el más severo dispositivo de seguridad visto en ese país en varias décadas, dijo que estaba sopesando lanzar estiércol diluido contra los activistas si desafían las órdenes de no realizar el sábado una protesta en contra del foro. ''No se ha tomado ninguna decisión. La policía está evaluando una diversidad de métodos que podrían utilizarse, por ejemplo, el uso de perdigones de goma o de gases lacrimógenos o de agua a alta presión o de estiércol'', dijo a Reuters el portavoz de la policía cantonal, Alois Hafner.
Los cruzados contra la globalización exhortaron por Internet a sus simpatizantes para que no se desalienten por los obstáculos que han interpuesto las fuerzas de seguridad para evitar que lleguen hasta el escenario de las sesiones. Quince personas fueron arrestadas después de bloquear una autopista suiza a 90 kilómetros de Davos, en una muestra de protesta. Aunque las autoridades han prohibido toda demostración, incluso pacífica, los activistas se proponen marchar el sábado por el centro alpino.
Decenas de jefes de Estado y cientos de ejecutivos de alto rango de corporaciones figuran entre los 3 mil 200 participantes en la cumbre de este año en el sofisticado centro turístico, que se ha convertido en un imán para los responsables de la toma de decisiones en los negocios y la política.
Pero ambientalistas y adversarios del libre comercio dicen que el foro toma decisiones de enormes alcances a puertas cerradas e incrementa el poderío de las multinacionales.
En el foro del año pasado, unos 2 mil activistas opuestos al libre comercio, que denunciaron el encuentro como una ''reunión de asesinos'', rompió cristales de ventanas y parabrisas de autos estacionados en un restaurante McDonald's.
Denuncian medidas arbitrarias
Críticos del foro se quejaron el jueves de tácticas utilizadas por la policía, cuyos agentes inspeccionaban trenes con rumbo a Davos para impedir los viajes de algunos pasajeros.
''Son totalmente al azar. Lo vi anoche en uno de los trenes. Recorrieron los vagones e hicieron bajarse a cuatro personas, sin ninguna prueba clara. No les gustó su apariencia. No hay derecho legal alguno para esas medidas'', afirmó Peter Bosshard, miembro de la Declaración de Berna, un grupo suizo que aboga en pro de relaciones más justas Norte-Sur.
El portavoz policial, Hafner rechazó las denuncias de medidas arbitrarias.
''Si había gente que viajaba hacia Davos teniendo en su posesión material de propaganda o llevando credenciales de prensa falsificadas, tenemos que asumir que no eran periodistas y se les obligó a regresar'', dijo.