SABADO Ť 27 Ť ENERO Ť 2001
Ť Falta dar seguimiento a testimonios y hechos
Pendientes, varias líneas de investigación del caso Stanley
Ť Un agresor se abría puesto chamarra con las siglas PGR
ANGEL BOLAÑOS SANCHEZ
Además de una grabación del sistema de vigilancia del World Trade Center, en la que aparece una persona siguiendo a Francisco Stanley momentos antes de que fuera asesinado, existen otra líneas de investigación que no han sido agotadas e incluso continuadas por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal.
Entre éstas, el que las balas utilizadas por los homicidas, calibre 40, fueran de un nivel de blindaje número cuatro, poco común en el mercado y de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas.
Asimismo, una de las mujeres que atestiguaron el crimen frente al restaurante El Charco de las Ranas, Guadalupe Vargas Escamilla, en su declaración asienta que "al momento preciso en que sucedían los hechos la de la voz pretendió ver el estado en que se encontraba el señor Stanley, momentos también en que observó que uno de los agresores se retira y aborda un vehículo de color verde botella metálico de modelo reciente y al encontrarse en el vehículo se desprende de su saco y su corbata y se coloca una chamarra de color negro con las siglas en la espalda de la PGR de color amarillas".
Está también el retrato hablado elaborado a partir de las declaraciones de los testigos del homicidio y que sirvió para identificar y corroborar los señalamientos de Luis Gabriel Valencia López, en contra de Erasmo Pérez Garnica, El Cholo, como uno de los autores materiales.
Asimismo, la detención de Juan Márquez Uriel, El Diablo, identificado como la persona que robó el vehículo usado en el homicidio del comediante, quien fue procesado en el juzgado 64 penal, línea de investigación que no ha sido agotada. Aun cuando sólo fue consignado por el delito de posesión de objeto robado, según las investigaciones de la dependencia El Diablo fue distribuidor de cocaína en el mundo del espectáculo, círculo que conoció cuando fue chofer de Mauricio Robles, quien sostuvo una relación con la cantante Alejandra Guzmán.
Otra investigación que inició la PGJDF se refiere a una llamada telefónica anónima en la que se ofreció entregar un paquete de información a cambio de una suma de dinero y que al parecer coincidió con las llamadas realizadas a un conductor de televisión desde una cárcel mexiquense.
De dichas conversaciones surgió la identidad de una mujer que estaría vinculada en el homicidio, identificada como Alicia Roxana, La Güera, descrita como una mujer rubia, de ojos azules y boca chica, de aproximadamente 1.70 de estatura, 27 años de edad, quien no sólo habría trabajado con Stanley, sino que estaría relacionada íntimamente con él.