Ť Expertos prevén pocas anotaciones
El Super Bowl, sin claro favorito
Ť El mariscal de Gigantes podría ser clave
Ť Por los Cuervos destaca Ray Lewis
DPA Y AP
Tampa Bay. 26 de enero. La edición 35 del Super Tazón se perfila como un encuentro parejo, tan es así, que los expertos no se ponen de acuerdo en señalar a un claro favorito entre los Gigantes de Nueva York y los Cuervos de Baltimore, aunque si prevén un partido con pocas anotaciones.
El marcador más bajo en la historia del Super Tazón fue 14-7 de Miami sobre Washington en 1973.
Existen coincidencias en que será un partido predominantemente defensivo y aquel equipo que logre una temprana ventaja tendrá las mayores posibilidades de llevarse el cetro, aunque a la mitad de la temporada el panorama era gris para ambos.
Los Cuervos pasaron 5 partidos sin anotar un touchdown, pero con la dirección del quarterbach Trent Dilfer, quien sustituyó a Tony Banks, lograron 10 victorias consecutivas.
Por su parte, los Gigantes contaban con siete juegos ganados y cuatro perdidos. Los dos últimos cayeron frente a San Luis y Detroit, lo que amilanó al conjunto de Nueva York.
Promesa cumplida
Tras las derrotas y asediado por las críticas, el técnico Jim Fassel prometió: "nuestro equipo estará en los playoffs" y lo cumplió con creces.
Su quarterback, Kerry Collins, podría ser, en opinión de los expertos, la clave en el resultado del partido, pues en la comparación hombre a hombre se le reconoce una marcada ventaja sobre su rival en la misma posición (Dilfer), ya que a éste lo señalan como un jugador de poca movilidad, presa fácil para la defensa de los Gigantes.
También se espera que la capacidad defensiva de ambos equipos provoque un partido en el que predominen las ofensivas de acarreo por tierra sobre los intentos de pases largos y arriesgados, y no se descarta que el campeón se decida por los goles de campo.
Jamal Lewis y Shannon Sharpe son, junto con Dilfer, las principales armas ofensivas de Baltimore en la carrera, por lo que la defensa de los neoyorquinos se concentrará en ellos, mientras que Ray Lewis, el mejor jugador defensivo del año, es la principal pieza de los Cuervos.
En la ofensiva de Gigantes, Tiki Barber, Amani Toomer e Ike Hilliard son las mejores opciones de Collins para romper la fuerte defensa de Baltimore.
La ventaja de Collins sobre Dilfer lleva a muchos analistas a preferir a los Gigantes.
El partido final está programado para este domingo en el estadio Raymond James. Los pronósticos señalan que será una tarde soleada y fresca, por lo que se espera un gran espectáculo deportivo en el cierre de la temporada 2000-2001 de la NFL.
Por otra parte, tras su reciente designación como uno de los equipos invitados para el Tazón América México 2001, Vaqueros de Dallas buscará ahora sí hacer al menos un touchdown, pues en sus tres visitas anteriores a ese país ha defraudado a sus miles de seguidores.
NEGOCIO MILLONARIO
WASHINGTON, 26 DE ENERO. El costo publicitario de cada anuncio televisivo que se trasmita en el Super Tazón volverá a batir un récord el domingo, al cotizarse 30 segundos a 2.3 millones de dólares. En 1970, lo que se pagaba por un spot durante el juego ascendía a 100 mil dólares.
Se calcula que unos 800 millones de espectadores estarán frente a sus pantallas de televisión en 191 naciones.
La cadena de televisión CBS, que adquirió los derechos de trasmisión de la final, estima que los ingresos publicitarios durante la emisión del partido serán de 200 millones de dólares, sin contar los derechos que pagarán las cadenas extranjeras que retrasmitirán el encuentro.
Para varias empresas, el partido es la oportunidad de oro para introducir un producto nuevo en el mercado o recuperarse frente a la competencia.
Sthepee Tranck Entertaiment, de Nueva York, consideró que el Super Bowl se ha convertido en una ceremonia de la cultura del consumo.