DOMINGO Ť 4 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Parodia radiofónica que terminó en ofrecimiento de chamba

Ponchito fue presidente por dos minutos

JUAN MANUEL VENEGAS

Vicente Fox Quesada la hizo de Ponchito y... Ponchito de presidente Fox.

Del mandatario -desde ahora conductor de su programa radiofónico semanal Fox en vivo, Fox contigo- surgió la propuesta: ''Oye Ponchito, tú hablas ora como Fox y yo voy a tratar de hablar como tú, ša ver si nos sale!''.

Y empezó el intercambio de voces, que duró poco más de dos minutos: Fox disfrutando su intento por imitar al personaje salido de la imaginación del comediante Andrés Bustamante, y provocando que le llamaran la atención por no haber ido a comer tamales con los niños de la calle, el día de la Candelaria.

El director de Ponchivisión, de su parte, haciendo notar su gusto por la ocurrencia del Ejecutivo y su intento -no fallido- por seguir el contenido en la parodia... al final salió con dos invitaciones: diseñar un programa para la promoción del Sistema Nacional de Becas y viajar con el Presidente en su próxima gira por Europa.

Fue el estreno del mandatario como ''conductor'' de radio -''y por este trabajo no me pagan'', bromeó-, teniendo como invitado, en la primera parte del programa (de una hora de duración), al secretario de Relaciones Exteriores, Jorge G. Castañeda; en el último segmento aparecieron Bustamente y Ponchito.

Terminados los temas con Castañeda, el Presidente anunció: ''Bueno, amigas y amigos, llegó el momento, llegó el momento, vamos ahora a platicar con šAndreeees Buuustamante! Bienvenido Andrés Bustamante, Ƒcómo estás?''.

Desde el rancho de San Cristóbal, donde Fox transmitía su programa, se dio el enlace telefónico con el comediante, ubicado en Los Pinos:

Andrés Bustamante: ''Gracias señor Presidente; pues muy bien, contento de estar aquí en su primer programa (como conductor). Pues ahora sí le tocó a usted estar del otro lado. A lo mejor a usted eventualmente lo ha puesto en alguna incomodidad algún entrevistador y ahora le va a tocar desquitarse''.

Vicente Fox: ''Pues claro, sí, eh, Ƒcómo has estado?''

AB: Afortunadamente muy bien... pues aquí trabajando mucho, así como lo hemos visto también trabajar mucho a usted, señor Presidente.

VF: ƑY traes a'i a Ponchito?

AB: Claro, šaquí está Ponchito! ƑQuiere que se lo pase?

VF: Eh... sí, porque...

AB: A ver, permítame; a ver, Ponchito, el señor Presidente quiere hablar contigo...

Ponchito: A ver este... quítate Bustamante. Gracias, gracias, pues aquí realmente el invitado realmente importante es pues, será yo, jajajaja. Y pues me da mucho gusto estar aquí en su programa, señor Presidente. Me da mucho gusto, de verdad, de verdad.

VF: No, pues te agradezco muchísimo. Yo no te veía más que en televisión. La verdad es que no había tenido oportunidad de conocerte... durante las olimpiadas, estuve ahí muy atento, y la verdad es que šte la llevaste, mano... te llevaste la medalla de oro!

P: šAh! Pues yo también estuve muy atento en las elecciones y usté también se las llevó šeh! Pues sí ya ve usté... este, yo durante su campaña, yo me quise acercar para ver si usté necesitaba algún tipo de asesoría o algún tipo de cosa, porque ya ve que pues... este... yo le llego básicamente a todo, pero creo que... creo que no fue necesario Ƒverdad? Y de todas maneras la hizo usté bastante gacha...

Luego, el presidente preguntó a Ponchito por quién había votado en las elecciones del 2 de julio. El comediante no respondió a pesar de las insistencias: ''šNo le saques, no le saques!", arengó el mandatario. Pero Ponchito esta vez sí le sacó. Le dio vueltas al asunto con el argumento de que el voto es secreto.

Vendría la invitación a Europa, a una próxima gira presidencial, para que Ponchito la haga de promotor de ''lo que representa México ahora''. La aceptación fue inmediata y hasta ofreció sus agencias de viajes y de publicidad (Ponchito Travels Engeinchense y Ponh Ponchis and Ponchis rac IPTES y asociados) para ponerlas al servicio del Presidente, y trabajar para ''poner el nombre de México muy en alto, ša todo mecate!".

Inevitablemente llegó el tema de los changarros. Ponchito pidió al mandatario eliminar ''tanto tramitadero'' para que éstos puedan instalarse. Fox coincidió con él, y además advirtió que ay de aquel que pesque tratando de extorsionar a ''un héroe que vaya a poner un changarro''. Ponchito reforzó la advertencia: ''Estaría grueso si pesca a alguien; no le va a ir bien, šla neta!''.

Y entonces la propuesta de Fox de intercambiar papeles, voces por un momento: ''šArráncate!'', llamó al invitado.

P: Me late, me late el intercambio. Entonces, aquí de cuates, no hay bronca Ƒverdad? La onda no...

VF: Ahora tú eres presidente y tú entrevistas...

P: Correcto, muy bien, entonces cinco, cuatro, tres, dos... šse invierten los papeles!

Ponchito empezó a imitar al presidente Fox: ''Ciertamente, conciudadanos, me da mucho gusto estar aquí šhoy, hoy! Aquí, en mi rancho de San Cristóbal, y recibir ni más ni menos que a Ponchito... Ponchito, Ƒcómo estás?

VF (imitando a Ponchito): Pues, mira, manito, yo estoy a toda máquina aquí, en rancho San Cristóbal, aquí preparando mi agencia de publicidad travel Ponchito, Ponchito y no sé qué más...

Ponchito como VF: Ciertamente, Ponchito, parece ser que todavía te estás comiendo el tamal que te dimos en la mañana para desayunar, porque te escucho la voz ciertamente diferente de como te la habían escuchado los mexicanos, las mexicanas, los ciudadanos y las ciudadanas. Te agradezco, Ponchito, Alfonso el menor, que estés aquí, en este, mi primer programa.

VF como P: Déjame decirte que hay que recordarle al presidente Fox que el día de la Candelaria le quedó mal a los niños de la calle, que había comprometido después de la rosca de Reyes y que no fue ahí. Hay que darle un jalón de orejas al presidente...

P como VF: šEso ya sonó como albur, Ponchito! Pero de todas maneras, ciertamente quiero decir que no, que no es que se me haya olvidado. Ciertamente lo que pasa es que en la rosca me salieron unos niños y yo digo que no deben ser niños, šdeben ser chiquillos, deben ser chiquillos! Por eso no acudí, pero no olvidé ese compromiso que tenía yo de entregar los tamales, Ponchito...

El Presidente cortó entonces. Cambió el rumbo de la conversación, hasta llegar a la segunda propuesta que quería hacer a Ponchito: sobre una campaña para incentivar a los ''jóvenes y chiquillos'' del país a estudiar y a aprovechar el Sistema Nacional de Becas; que Ponchito los jale ''para que se animen y sigan adelante''.

Quedaron en ponerse de acuerdo sobre esta campaña a partir de abril, en principio con esta frase que se le ocurrió al comediante: ''šEl que no estudia, le cae!''.