MARTES Ť 6 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť Se rompe el diálogo entre la Conaie y el gobierno de Noboa; "se acabó", sostuvo Vargas
Represión a indígenas en Ecuador provoca 4 muertos y 26 heridos
Ť El ejército asegura que los manifestantes atacaron primero, pero testigos rechazan la versión
Ť Obreros, maestros y estudiantes anuncian una huelga nacional, en apoyo, para mañana
AFP, DPA Y REUTERS
Quito, 5 de febrero. La crisis en este país andino se agravó hoy cuando un enfrentameinto entre militares e indígenas provocó cuatro muertos y 26 heridos y, en consecuencia, la suspensión del diálogo entre el gobierno y la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), que intentaba encontrar una salida al levantamiento contra alzas de tarifas decretadas por el presidente Gustavo Noboa.
La tensión aumentó hacia el final de la tarde, cuando un grupo de policías intentó desalojar, con el uso de bombas lacrimógenas, a los cerca de 5 mil indígenas que mantienen ocupada la sede de la Universidad Salesiana en Quito, lo que dejó seis heridos, entre ellos una menor, según organismos de derechos humanos.
Unos 200 estudiantes se manifestaban esta noche en apoyo a los indígenas en las afueras de esa universidad. "Asesinos". "Basta de represión", gritaban al fuerte contingente de militares y policías que rodea el lugar.
"Ahora sí que se acabó todo el diálogo", sentenció Antonio Vargas, presidente de la Conaie, al acusar al gobierno de haber ejercido una "brutal represión contra el pueblo que se muere de hambre".
A su vez, sindicatos, maestros estatales y estudiantes ratificaron que el próximo miércoles realizarán una huelga nacional en apoyo al levantamiento indígena, iniciado hace ocho días, y para exigir la suspensión del estado de emergencia nacional decretado por el gobierno el viernes pasado.
Los indígenas protestan contra las alzas del combustibles de hasta ciento por ciento, y de las tarifas de transporte urbano hasta 75 por ciento, decretadas a finales de diciembre pasado.
El diálogo entablado la víspera entre la Conaie y el gobierno se rompió al llegar a Quito las noticias de los enfrentamientos ocurridos esta mañana en la ciudad amazónica de Tena, capital de la provincia de Napo.
La jefatura de las fuezas arm adas aseguró en un comunicado que los manifestantes atacaron a los militares, y luego intentaton apoderarse del aeropuerto local, incidente en el cual murió un manifestante y 14 resultaron heridos, al igual que nueve militares, todos por impacto de bala.
Sin embargo, periodistas de Tena señalaron que el ataque al aeropuerto fue una reacción de la población por la primera muerte, registrándose en el nuevo incidente la muerte de los otros tres manifestantes, entre ellos un menor de edad.
Al ser desalojados de una vía que bloqueaban en Puerto Napo, un manifestante murió; entonces los indígenas intentaron marchar hacia la sede de la gobernación de Tena, lo que fue impedido por los militares, por lo que se dirigieron entonces al aeropuerto, según esta versión.
La Cruz Roja local, por su parte, informó de cuatro muertes, una de ellas en Puerto Napo.
"šEl gobierno está armando una guerra civil con este pueblo y es reponsable de cualquier cosa que pudiera pasar!, dijo Vargas, quien hace poco más de un año encabezó la insurrección indígena-militar que derrocó al presidente Jamil Mahuad, a quien sustituyó Noboa, entonces su vicepresidente.
Ahora, las posiciones se radicalizaron nuevamente, pues los indígenas anunciaron que volverán a sus planteamientos iniciales: derogar las alzas económicas en lugar de revisarlas. La Conaie exige además que sea levantado el estado de emergencia y el retiro del contingente militar en Napo.
Un clima de tensión también se vivía en Quito debido al estallido de una bomba esta madrugada en un edificio que alberga las oficinas de compañías extranjeras, de un banco local y una dependencia gubernamental. La explosión, que no dejó víctimas, aunque sí daños, no fue reivindicada por ninguna organización.
En este contexto, la premio Nobel de la Paz 1992, Rigoberta Menchú, exigió al gobierno de Ecuador detener "la represión y la persecución" contra los indígenas y "emprender el camino del diálogo y la concertación".
"El hambre y la miseria no se combaten con la represión ni con la persecución policial; la libertad y la democracia no se construyen a golpe de fusil contra los que levantan las más justas y legítimas demandas", manifestó la líder indígena, en un comunicado divulgado en Quito por la Asamblea Permanente de Derechos Humanos.
Desde Chile, el líder del Consejo de Todas las Tierras, organización de la nación Mapuche en ese país, Aucán Huilcamán, señaló a su vez que apoyan de manera "firme y decidida" el levantamiento en Ecuador.
Desciende la popularidad presidencial
El presidente Noboa, quien comenzó su mandato con un 51 por ciento de popularidad el 22 de enero de 2000, bajó ahora a 28 por ciento, según una encuesta divulgada este lunes por el privado Centro de Estudios y Datos, que señaló igualmente que 54 por ciento de los ecuatorianos apoya la protesta indígena.
"Estamos peor que antes, pero ahora no queremos tumbar gobiernos, sólo queremos que haya sensibilidad", aseguró a Afp Alberto Ninasunta, uno de los indígenas que se mantiene en la Universidad Salesiana, mientras que el taxista Carlos Gutiérrez sostuvo que "los indígenas están sacando la cara por los ecuatorianos, pero todos estamos mal. Los precios son en dólares y ganamos como si siguiera el sucre", la desaparecida moneda nacional.
Más de 70 por ciento de los 12.5 millones de ecuatorianos vive en la pobreza, y 20 por ciento de ese porcentaje está en la miseria total, según cifras oficiales. La dolarización de la economía, decidida por Mahuad, fue puesta en vigor por Noboa para "sanear" la economía. Pero el año pasado, la inflación cerró en 91 por ciento, la más alta de América Latina, mientras que el desempleo abierto fue de 9 por ciento y el subempleo de 52 por ciento.
El coronel retirado Lucio Gutiérrez, uno de los líderes de la insurrección indígena-militar que derrocó a Mahuad, señaló este lunes que el levantamiento indígena es legítimo "ante la ceguera y la sordera del presidente Noboa".
Al descartar que se repitan los acontecimientos del 21 de enero de 2000, anunció que aspira a llegar a la presidencia mediante la vía electoral, pero afirmó que está en manos del gobierno evitar un "estallido social".