VIERNES Ť 9 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť González Torres acusa a los funcionarios foxistas de querer apoderarse del partido

Disidentes del PVEM, amanuenses de Aguilar y Castañeda

JOSE GIL OLMOS

Ante una concentración a un costado del Zócalo capitalino, Jorge González Torres acusó al coordinador presidencial en materia de seguridad nacional, Adolfo Aguilar Zinser, y al canciller Jorge Castañeda de apoyar al grupo de disidentes que "intentan adueñarse" del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).

En respuesta inmediata al anuncio de los disidentes, encabezados por Carlos Alberto Macías, de expulsarlo definitivamente del partido, González Torres desconoció la determinación e incluso amenazó con denunciar públicamente el apoyo que reciben de los miembros del gabinete presidencial.

Al encabezar el acto organizado por el grupo parlamentario del PVEM en la Asamblea Legislativa para difundir las tradiciones indígenas, que devino apoyo a la marcha del EZLN -"les damos la bienvenida", rezaba una pancarta-, González Torres acusó a Aguilar Zinser y Castañeda de interferir en la vida interna del partido, como lo han hecho en las negociaciones con los zapatistas en Chiapas.

"Atrás de este movimiento de agitadores están estas dos personas. Sí, tenemos a dos funcionarios de la Alianza por el Cambio que están intrigando por ambiciones de poder y ya quieren ser presidentes desde ahorita, porque se consideran más capaces que el Presidente de la República; se consideran más inteligentes, y están en un error, porque llegaron adonde están porque los nombró el presidente Fox (que ganó) con los votos de la Alianza por el Cambio, de los cuales le toca 6 por ciento al partido ecologista, y lo menos que podían tener es cierta gratitud y no meterse en estas intrigas'', aseguró.

González Torres habló después de pedir que intervinieran varios de sus simpatizantes, los cuales le externaron su apoyo incondicional. Luego de escuchar con beneplácito las loas, dijo que no tenía que esconderse y aseguró sentirse tranquilo ante las presiones de los llamados disidentes del PVEM, a quienes llamó "amanuenses" enviados sobre todo por Aguilar Zinser.

Antes de responder a los reporteros, anunció que no dejará el PVEM a pesar de la campaña de desacreditación y de las amenazas que ha recibido desde la administración zedillista. "A mí personalmente me mandaron gente armada a la casa y los tuve que denunciar después. No le tuvimos miedo al ex presidente (Zedillo) como no les tenemos miedo a ellos (Aguilar Zinser y Castañeda). Me podrán amenazar, me podrán matar, me podrán hacer daño, pero el Partido Verde Ecologista seguirá más fuerte que nunca, con más presencia que nunca", exclamó.

Argumentó que Zinser y Castañeda intentan desacreditarlo para desestabilizar al partido y luego apoderarse de él.