DOMINGO Ť 11 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Variables externas e incertidumbre sobre la reforma fiscal desalientan a inversionistas

Alerta BdeM sobre posibles perturbaciones fuera de control

HUMBERTO ORTIZ MORENO

Los agentes económicos perciben que las condiciones de negocios serán menos favorables en este año a partir de la incertidumbre sobre la aprobación o no de la reforma fiscal, de la desconfianza en las metas económicas planteadas por el gobierno foxista y en torno a una eventual solución o estancamiento del conflicto en Chiapas, reconoció Federico Rubli Kaiser, director de Relaciones Externas del Banco de México.

Previno que si llegaran a materializarse los choques externos y eventualidades internas, con impactos en los precios clave, la política monetaria no sería capaz de contrarrestar las fuerzas inflacionarias y habría perturbaciones fuera de control.

Pronosticó que si está previsto que la inflación podrá bajar más durante este año, es porque los cortos seguirán siendo una medicina amarga que deberán "tragarse" los mexicanos para combatir ese fenómeno. Ante ello, el BdeM deberá contar con mayor discrecionalidad para manejar la liquidez y mover más instrumentos de ataque a las fuentes inflacionarias.

Sin embargo, "su autonomía no quiere decir que hace lo que le dé la gana", aclaró, y los cortos son una herramienta temporal, porque continuarlos demasiado tendría efectos nocivos en la planta productiva.

Enfatizó que el esquema de encuestas que realiza el instituto central deberá averiguar por qué ha disminuido la percepción de la gente acerca de los objetivos de la política monetaria, pues en la medida en que haya una explicación "podremos tomar medidas correctivas".

Consideró necesario "limpiar" los indicadores de precios, hoy alterados a la alza, de elementos distorsionantes; reducir la incertidumbre y facilitar la convergencia de los agentes económicos en las expectativas inflacionarias, como mecanismo imprescindible para afianzar la estabilidad económica y social en el país.

"Nuestro mejor juez es la sociedad, que es la que importa, para calificar nuestra capacidad y darnos la confianza para bajar la inflación", puntualizó.

Rubli Kaiser insistió sobre las perspectivas inflacionarias y advirtió que en el corto plazo la evolución de los precios puede verse influída por el tipo de cambio.

Por ello, juzgó que en un horizonte multianual las metas inflacionarias deben ser ancladas y "no empezar a jugar con ajustes de precios. Tenemos que hacer un examen muy cuidadoso para que cuando se presenten estos factores de inestabilidad política y perturbaciones económicas, tomemos las medidas adecuadas para contrarrestarlos", puntualizó.