DOMINGO 11 DE FEBRERO DE
2001
La historia negra: delitos fabricados, torturas, jueces de consigna
Zapatistas presos: justicia a cuentagotas
ƑVioladores y asesinos? Las historias de los zapatistas que permanecen encarcelados y los recientemente liberados van por otro camino: detenciones a manos de grupos paramilitares, torturas para obtener confesiones, fabricación de delitos y una cascada de irregularidades en los procesos. En Chiapas, como en otros lugares del país, se ha utilizado al aparato de justicia para castigar a los disidentes. Hasta el momento, el gobierno chiapaneco ha liberado a 38 zapatistas. Aún falta excarcelar 59 más en Chiapas y cinco en Tabasco y Querétaro
Jesús RAMIREZ CUEVAS
Los simpatizantes y militantes del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) que se encuentran tras las rejas en Chiapas son ejemplo de la ausencia del estado de derecho. El aparato de justicia y las leyes han sido utilizados por los gobiernos en turno con fines políticos para combatir la inconformidad social. Es un hecho que esta realidad de injusticia fue uno de los detonadores de la rebelión zapatista.
El EZLN ha demandado el cumplimiento de tres señales para iniciar el diálogo de paz con el gobierno de Vicente Fox. Una de ellas es la liberación de los presos zapatistas en Chiapas, Tabasco y Querétaro. Al tomar posesión Vicente Fox había 103 expedientes de simpatizantes zapatistas presos o procesados en Chiapas (seis estaban en libertad bajo fianza), tres indígenas del norte recluidos en Tabasco y dos líderes sociales más encarcelados en Querétaro. Fox y el gobernador Pablo Salazar declararon su disposición a liberarlos. Pero hace un mes detuvieron a Juan Jiménez Ramírez, del municipio de Chilón.
Sin embargo, Luis H. Alvarez, comisionado para la paz, señaló recientemente que "las autoridades de diversos estados y el gobierno federal continúan analizando sistemáticamente la situación específica de cada preso para evitar que sean liberados delincuentes en lugar de zapatistas". Esta postura ha sido compartida por Fox.
El subcomandante Marcos mencionó a los que aún se encuentran presos en su comunicado del 27 de enero pasado: "ƑReconoce el gobierno que los zapatistas son luchadores sociales y no delincuentes?", se preguntó el vocero del EZLN. "Se les sigue usando como rehenes y el mantenerlos presos significa que el gobierno todavía piensa en usar la opción policiaco-militar", advirtió.
Con base en las acusaciones fincadas por autoridades judiciales contra los militantes zapatistas, algunos medios y representantes del sector empresarial como Alberto González Garza han reclamado al gobierno que se libera a "violadores, asesinos y delincuentes". Quizá estas presiones explican el proceder tortuoso de las autoridades, pues la liberación ha sido a cuentagotas.
*Faltan 64 por liberar
A la fecha han sido liberados 38 zapatistas -los más recientes fueron excarcelados entre el 6 y el 9 de febrero-, pero aún permanecen 59 tras las rejas en penales de Chiapas, informó Miguel Angel de los Santos, abogado defensor de las bases de apoyo del EZLN. Con los cinco de Tabasco y Querétaro suman 64. Cerca de una decena se volvieron zapatistas en la cárcel pero son casos excepcionales. "Con el secretario de Gobierno de Chiapas, acordamos la posibilidad de discutir los casos especiales de personas en que se dudara del carácter político de la acusación", informó De los Santos.
De los tres zapatistas recluidos en el penal de Tacotalpa, Tabasco, el gobierno no ha dicho nada. En tanto que a los dos militantes del Frente Zapatista presos en Querétaro, Sergio Jerónimo Sánchez y Anselmo Robles Sánchez, el gobierno de Ignacio Loyola se niega a liberarlos.
Rosario Ibarra de Piedra confirmó que hace tiempo se reunió con funcionarios queretanos para demandar su libertad, por no haber pruebas contra ellos (de hecho los acusan de "autoría intelectual de despojo" y no por los hechos del 5 de febrero de 1998). "La secretaria de Gobierno del estado nos insistió que eran unos delincuentes y no presos políticos. Nos dijo que no saldrían libres; que por principio de autoridad no los liberarían, porque si no se resquebrajaría la autoridad del gobierno y todo se volvería un caos", informó doña Rosario.
Miguel Angel de los Santos afirma que todos los procesos contra zapatistas "parten del mismo esquema de investigación judicial: autoconfesiones mediante tortura, testimonios inverosímiles y prefabricados, ausencia de pruebas contundentes y demostrativas de su responsabilidad en los hechos que se les imputan. A muchos no se les permitió un traductor en las diligencias. La mayoría fueron acusados por hechos violentos que sucedieron en la zona norte y en el desmantelamiento de los municipios autónomos que impulsó Roberto Albores".
"Ha habido complicidad y contubernio -denuncia- que en los últimos seis años se dio en Chiapas entre los poderes Ejecutivo y Judicial, para legitimar violaciones a los derechos humanos y reclusiones ilegales de simpatizantes y bases del EZLN".
Esto ha sido reconocido por el gobernador Pablo Salazar, quien declaró el 30 de diciembre que dejará sin efecto "cientos de órdenes de aprehensión contra luchadores sociales, que carecen de sustento, porque parten de delitos prefabricados" por el gobierno anterior.
*Una larga historia de ilegalidades
La historia de los zapatistas presos está ligada a la represión contra la lucha política que impulsó el levantamiento de 1994. Antes, las cárceles chiapanecas estaban llenas de indígenas y campesinos pobres para quienes nunca ha existido la justicia. Muchos de ellos pertenecían al PRD y eran acusados por los caciques locales. A partir de 1995, cuando Zedillo rompió la tregua con el EZLN, comenzaron a ser detenidos los integrantes de las bases de apoyo del EZLN, sobre todo del norte del estado. Ahí se comenzó a conocer la complicidad entre los grupos paramilitares y los gobiernos estatal y federal. La mayoría de los presos de la zona norte habían sido señalados y detenidos por estos grupos.
Conforme la guerra sucia se extendía a toda la zona de influencia zapatista también aumentaron los zapatistas presos de los Altos y la Selva. Al mismo tiempo, aumentaron los desplazados por la violencia paramilitar. Entre 1996 y 1997 la detención de simpatizantes zapatistas ocurrió en operativos de la policía y el Ejército en combinación con paramilitares. A partir de enero de 1998, tras la matanza de Acteal, se desata una ofensiva contra los pueblos zapatistas y municipios autónomos.
"Ningún estado de derecho respetuoso de los derechos humanos se permitiría detener en un solo operativo policiaco a 160 personas, como sucedió en Nicolás Ruiz en junio de 1998; o 65, en Amparo Aguatinta en mayo; o 105, como fue en la comunidad San Felipe Ecatepec, en julio de 2000", señala De los Santos.
"Las investigaciones judiciales tendían a involucrar a zapatistas en diversos delitos y las investigaciones ministeriales se desarrollaban en función del interés político", agrega. Las policías, el Ejército, los agentes del Ministerio Público y los jueces siguieron la consigna de acabar con la resistencia indígena.
Según el abogado De los Santos, "los jueces en todos los casos omiten el análisis objetivo e imparcial de las averiguaciones previas. Las investigaciones son deficientes, las declaraciones son inverosímiles, las detenciones son ilegales y las violaciones a las garantías individuales son el sustento de largos procesos que culminan en altas penas de prisión como condena".
*"Sí son presos políticos"
En agosto de 1996 surgió La Voz de Cerro Hueco, organización de presos zapatistas de los penales de Tuxtla Gutiérrez, Yajalón, Ocosingo, Pichucalco, Salto de Agua y San Cristóbal de las Casas.
Las historias de los zapatistas presos han sido documentadas por Miguel Angel de los Santos y por La Voz de Cerro Hueco. Estas son algunas de ellas.
El 7 de febrero fueron liberados tres zapatistas de Chenalhó: Cristóbal Gutiérrez Gómez, Manuel Gutiérrez Méndez y Antonio Arias Hernández.
Tras la matanza de Acteal, la PGR atrajo todas las averiguaciones previas iniciadas por delitos cometidos antes. Investigó varios homicidios cometidos contra militantes del PRI. En algunos casos, pese a que los testimonios describían la actuación de grupos de personas que vestían de negro o azul, se cubrían el rostro con pasamontañas y portaban armas de alto poder, la PGR dirigió sus investigaciones hacia bases de apoyo zapatistas de Polhó.
En el expediente penal número 230/98 del juzgado primero del ramo penal en Tuxtla Gutiérrez se consigna la muerte de César Santiz Pérez, ocurrida el 10 de octubre de 1997 durante una emboscada en la comunidad de Chimix, Chenalhó, donde también hubo personas heridas. Los testigos describen: "Salieron de entre el monte aproximadamente unas 15 personas (que) vestían de color negro y algunos usaban pasamontañas, todos portando armas largas de fuego". Uno de estos testigos, David Arias Pérez, se encuentra en prisión y ha sido condenado por su participación en la matanza de Acteal.
Por la muerte de César Santiz Pérez fue detenido Cristóbal Gutiérrez Gómez porque uno de los testigos dice haberlo reconocido entre el grupo "por la forma de su cuerpo".
"Estos hechos y otros en que se empleó el mismo modo de operación reflejan que desde 1997 la PGR tuvo conocimiento de la existencia de grupos armados que actuaban con uniformes y armas similares a las de la policía estatal; sin embargo, encauzó sus investigaciones hacia los zapatistas, para demostrar su hipótesis sobre la masacre de Acteal, es decir que todo se debió a los 'conflictos intercomunitarios'", señala el abogado.
Manuel Gutiérrez Méndez y Antonio Arias Hernández fueron acusados por la PGR por el homicidio de Lucio Gómez Guillén (expediente 237/998). La PGR consignó que Manuel y Antonio participaron en el crimen ocurrido el 5 de julio de 1997. Los supuestos testigos nunca los mencionaron. Fue hasta seis meses después que aparecieron dos hermanos de la víctima quienes también fueron atacados pero lograron salvarse. Ellos dijeron reconocer a los homicidas, entre ellos a Manuel y Antonio.
"Las declaraciones de los testigos rayan en lo absurdo: como cuando dicen que 'lo reconocí porque al momento de disparar se le cayó el pasamontañas', o 'lo reconocí entre un grupo de 50 personas por la forma de su cuerpo', o 'lo reconocí -aunque llevaba el rostro cubierto- porque es de la misma comunidad'. En las declaraciones de los testigos se desprende que Manuel y Antonio no tuvieron participación en el homicidio, pero fueron procesados por considerarlos zapatistas", dice De los Santos.
*Otros liberados
La madrugada del 8 de febrero fueron liberados otros seis zapatistas. Margarito Gómez Rodríguez, Manuel López Díaz, Narciso Ramos Gutiérrez, Raymundo Gutiérrez Díaz, Benedicto Ramos Gutiérrez y Francisco Díaz Díaz, todos originarios de Simojovel (expediente 32/96, por homicidio y lesiones).
Misael Pérez Gálvez, liberado el 30 de diciembre pasado, denunció ante Luis H. Alvarez: "Nosotros somos del municipio Tierra y Libertad, de los pueblos autónomos y luchamos porque somos pobres. No tenemos dónde vivir, no somos rebeldes por otra causa". Miguel Angel de los Santos explicó que se condenó a 25 años de prisión a estos zapatistas con base en delitos prefabricados y procesos de "una legalidad vergonzosa".
Pérez Galván fue encarcelado acusado de despojo por los dueños de la finca Corosal, tan sólo porque realizó un paro de actividades fuera de esa empresa. Los dueños lo señalaron por impedir la realización de labores y llevaba un año y medio preso.
Otro caso es el de Armando Jiménez Pérez, liberado hace unas semanas. El estaba acusado del asesinato del candidato por el PRI a la presidencia municipal de Nicolás Ruiz. En su contra declararon varios testigos; sin embargo, todos coincidían en que Armando podría ser el responsable "porque siempre sale a cazar". Dos meses después de ocurrido el homicidio ya habían declarado 10 testigos, pero apareció el "testigo clave" (Máximo López Díaz), quien dijo que "vio todo". Según éste, los homicidas fueron tres, y él los encontró en el camino con armas largas. A pesar de que dice que tuvo mucho miedo porque sabía que son matones, los siguió como a 100 metros de distancia. El testigo afirma que vio cómo esperaron y dispararon a la víctima, a quien le dieron dos tiros de gracia. No obstante que sabía quién asesinó a su "compañero de partido y amigo" fue hasta dos meses después que declaró. El testimonio de este testigo no es verosímil y refleja el interés de la PGJE por encontrar chivos expiatorios.
*Lucha agraria criminalizada
Edmundo Fonseca Argüello (hermano de Angel Fonseca, destacado militante del FZLN en San Cristóbal) y Ricardo Gómez estuvieron presos en el penal de Yajalón (expediente 04/96), acusados de abigeato, robo, despojo y daños. Fueron excarcelados el 9 de febrero.
Los propietarios de la finca K'an-quil, del municipio de Chilón, Oscar y Elizabeth Arévalo Gallegos y Elva Gallegos, denunciaron que en junio de 1995 se presentó en ese lugar un grupo de indígenas de la ranchería Pechtón, y de inmediato tomaron posesión. Sacaron a los rancheros y se apropiaron del ganado. Y que lo mismo hicieron en otro rancho de su propiedad llamado Concepción. Una lucha agraria se convierte en un asunto judicial. Los acusados han demostrado que no participaron en los hechos señalados.
Un caso similar es el de Sebastián Much Hernández y Jerónimo Gómez Much (cuadernillo de orden 169/98). Amílcar Pinto Estudillo denunció que el 20 de abril de 1995 un grupo de aproximadamente 100 indígenas tomó posesión de su predio denominado San José Sierra Nevada, del municipio de Chilón. Los indígenas entraron y tumbaron 600 matas de café y 20 árboles de ocote. Dos trabajadores de la propiedad atestiguaron que Sebastián y Jerónimo participaron. Los acusados afirman que ellos no formaron parte de ese grupo invasor. El propietario argumentó que no le importa quién haya sido pero ellos tienen que pagar. Fueron puestos en libertad el 9 de febrero.
Jesús Gómez Gómez, ex preso zapatista de la zona norte, recuerda: "Cuando fuimos detenidos, fuimos señalados por los priístas. Como están juntos con los de Seguridad Pública y los del Ejército, pueden portar armas. Ellos van a las comunidades donde hay organizaciones como la nuestra, llegan con el Ejército y la Seguridad Pública y nos señalan: 'son zapatistas'. Llegando a la Procuraduría nos prefabrican delitos. Ahora ya no sólo nos dicen 'zapatistas', ahora también nos dicen 'asesinos'. Nos inventan cargos por asesinato, secuestro, violación, privación ilegal de la libertad, delincuencia armada. Nos acusan de eso porque por esos cargos no tenemos el derecho a fianza. El gobierno sabe que somos presos políticos. En el momento de nuestra detención, nos golpearon mucho".
*Otros ejemplos de injusticia
Miguel Angel de los Santos expone otros ejemplos: "En el expediente 228/96 radicado en el juzgado de Yajalón constan 16 órdenes de aprehensión por los delitos de homicidio, lesiones y privación de la libertad. La averiguación previa está integrada con declaraciones de ofendidos y testigos, además de actas de la comunidad en que se señala 'que se busque la forma de hacer justicia contra los agresores de la organización guerrillera Arriera Nocturna, ya que ese día provocaron el principio del conflicto Patastal y Corosal Viejo, comunidades zapatistas, en contra de Corosal Nuevo, del partido oficial PRI'. En su declaración ministerial, uno de los supuestos agraviados menciona que 'el de la voz pertenece a la organización denominada Paz y Justicia' y asimismo pertenece al PRI".
En el expediente penal 269/95 también radicado en Yajalón, por los delitos de rebelión, lesiones, violación y privación de la libertad, las supuestas ofendidas declaran que "los que nos cuidaban siempre mencionaban que su jefe era Samuel Ruiz García y Amado Avendaño, y que ellos son el nuevo gobierno... que también llegaban otros sacerdotes que les decían Pablo, Rodolfo, Carlos Lorens, Heriberto, Roberto, Efraín...". Siete indígenas choles fueron sentenciados a 15 años de prisión por estos delitos y con estas acusaciones hechas en el mes de junio de 1995. Por esas fechas fueron expulsados del país tres de los sacerdotes de la diócesis de San Cristóbal mencionados.
Está el caso de Armando López Vázquez, indígena chol, que fue procesado por el delito de homicidio, pero nunca contó con un traductor desde su primera declaración. La juez que desarrolló el proceso dijo que "Armando no necesita traductor porque habla perfectamente español y además mi criada también es chol y habla muy bien el español".
En junio de 1996, el juez de Yajalón condenó a 15 y 23 años de prisión a cinco indígenas choles por delitos de privación de la libertad y violación. Para absolverlos del delito de rebelión (considerado por el Código Penal de Chiapas como delito político) el juez argumentó que "ellos por tratarse de etnias choles son manejados fácilmente por los líderes y se sujetan a la obediencia de los mismos, mas no que ellos traten de imponer esa obediencia a la población..." (Sentencia definitiva. Expediente penal 269/95).
En el mismo expediente, un año después, el mismo juez condenó a 15 años de prisión a Miguel Montejo Peñate. En su resolución el juez dice: "... la responsabilidad plena quedó probada con los mismos datos que acreditan los elementos del tipo penal del delito... sobresaliendo por su importancia la sindicación directa y categórica que vierten las ofendidas". Sin embargo, no advierte que a Miguel no lo señalan quienes se dicen ofendidas. Ambas sentencias fueron confirmadas en segunda instancia, pese a demostrar la ausencia de pruebas.
Miguel Angel de los Santos concluye: "A simple vista todos los presos zapatistas parece que fueron detenidos por ser verdaderos delincuentes. Las acusaciones de homicidio, secuestro, despojo, delitos contra la salud, no reflejan a un prisionero por razones políticas. Pero justamente ese era el objetivo de la guerra contrainsurgente: meter a la cárcel a las bases de apoyo bajo figuras jurídicas que ocultaran el carácter político de la acusación".
Por eso se entiende a Jesús Gómez Gómez, ex preso zapatista de la zona norte, cuando dice: "Aunque el gobierno nos encierre aquí jamás vamos a pedir perdón si no hemos hecho nada malo".
QUIENES SON Y DE QUE LOS ACUSAN
De 108 presos simpatizantes o bases de apoyo del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) en tres estados, hasta la fecha han sido liberados 38 en Chiapas y seis más estaban bajo fianza. Todavía 64 siguen en prisión. Esta es la lista de los zapatistas que permanecen cautivos (faltan los nombres de cuatro que no se pudo corroborar).
* Penal de Cerro Hueco
1. Cristóbal Gómez López, acusado de homicidio (Exp. 179/996), fue sentenciado a ocho años de prisión. 2. Jorge Luis Méndez Mena, acusado de robo, daños, abigeato y despojo (Exp. 75/94), fue sentenciado a siete años de prisión y una multa de 150 días de salario mínimo. Fue puesto a disposición de la justicia federal. 3. Manuel López Méndez, acusado de homicidio (Exp. 40/98), sentencia en apelación. 4. Manuel Gutiérrez Pérez, acusado de lesiones y homicidio (Exp. 250/994), fue sentenciado el 27 de octubre de 1995 a ocho años de prisión. En marzo de 1996 se modificó la sentencia a 14 años de cárcel. El 2 de julio de 1998 fue puesto a disposición de la justicia federal. 5. Juan Carlos Gutiérrez Sánchez, acusado de lesiones y homicidio (Exp. 250/994), sentenciado el 27 de octubre de 1995 a ocho años de prisión. El 7 de marzo la sala regional modificó la sentencia a 10 años. Fue puesto a disposición de la justicia federal el 2 de julio de 1998. 6. Lorenzo Hernández Gómez (Exp. 293/96), sentenciado a seis años de prisión. 7. Sebastián Gómez Hernández, acusado de homicidio (Exp. 38/99), fue sentenciado a 32 años de prisión.
* Del fuero federal
8. Fernando Alvarez, acusado de violación a la Ley General de Población (Exp. 176/999), fue sentenciado a seis años de prisión, apeló. 9. Armando Morelos Cabrera, acusado de violación a la Ley General de Población (Exp. 78/999), fue sentenciado a seis años de prisión, apeló. 10. Arturo Pérez Velázquez, acusado de portación ilegal de armas de uso exclusivo del Ejército (Exp. 18/997), fue sentenciado a cuatro años. Compurga la pena el 5 de febrero de 2001. 11. José Hernández Díaz, acusado de delitos contra la salud (Exp. 102/994), fue sentenciado a 10 años. 12. Gustavo Estrada Gómez, acusado de delitos contra la salud (Exp. 93/996), fue sentenciado a 10 años de prisión. 13. Norberto López Rincón, acusado de delitos contra la salud (Exp. 149/997), fue sentenciado a 10 años. 14. Alejandro Méndez Díaz, acusado de delitos contra la salud (Exp. 54/997), fue sentenciado a 11 años de prisión. 15. Cristóbal Sánchez López, acusado de delitos contra la salud (Exp. 92/997), fue sentenciado. 16. Rafael López Santiz, acusado de delitos contra la salud (Exp. 103/993), fue sentenciado. 17. Marcelino Sánchez Alvaro, acusado de despojo, daños y robo (Exp. 144/995); robo, abigeato, despojo y daños (Exp. 69/95); y de homicidio y secuestro (Exp. 55/996). Por los primeros delitos fue sentenciado el 3 de julio de 2000 a dos años de prisión y multa de 30 días, se conmutó la pena por multa de 150 días de salario mínimo. Por el segundo expediente fue condenado a cuatro años de prisión y multa de 10 días de salario mínimo, el 13 de enero de 2000 (condena condicionada al pago de 4 mil pesos). Los otros cargos siguen en proceso. 18. Miguel López Pérez, acusado de homicidio (Exp. 36/996), fue sentenciado a 10 años de prisión el 18 de noviembre de 1997. Confirmada la sentencia fue puesto a disposición de la justicia federal (8 de octubre de 1998). 19. Plácido Martínez Torres, acusado de homicidio (Exp. 31/996), fue sentenciado a ocho años de prisión. 20. Juan Guillermo López Pérez, acusado de homicidio (Exp. 54/994), fue sentenciado a 14 años de prisión el 14 de enero de 1996. Fue puesto a disposición de la justicia federal el 2 de marzo de 1996. 21. Jorge Luis Méndez Mena, acusado de homicidio (Exp. 57/997), su caso se encuentra en proceso de conclusiones.
* Cereso 2 de Cerro Hueco
22. Jorge Guzmán Cruz, acusado de homicidio (Exp. 2000/998 y 81/998), su caso en encuentra en proceso de instrucción. 23. Rogelio Cruz Vázquez, acusado de homicidio (Exp. 81/998), su caso en proceso de instrucción. 24. Ramón Guardas Cruz, acusado de homicidio (Exp. 81/998), su caso se encuentra en proceso de instrucción. 25. Pascual Guzmán Díaz, acusado de homicidio (Exp. 81/998), su caso se encuentra en proceso de instrucción. 26. Diego Cruz Díaz, acusado de homicidio (Exp. 81/998), su caso se encuentra en proceso de instrucción. 27. Armando López Vázquez, acusado de homicidio (Exp. 81/998), su caso se encuentra en proceso de instrucción.
* Penal de San Cristóbal de las Casas
28. Mariano Núñez Girón, acusado de homicidio (Exp. 250/998), fue sentenciado a ocho años de prisión. 29. Manuel Santiz Pérez, acusado de homicidio (Exp. 64/2000), fue sentenciado. 30. Rosendo Gómez Ruiz, acusado de homicidio (Exp. 189/998), fue sentenciado. 31. José Luis Ruiz Ruiz, acusado de homicidio (Exp. 352/996), su caso está en proceso de instrucción. 32. Ernesto Camera Ruiz, acusado de daños y homicidio (Exp. 170/989), fue sentenciado primero a 40 años de prisión y una multa de 213 días de salario mínimo (23 de octubre de1989). En 1990 se modificó la sentencia a 24 años y seis meses y una multa de 130 días de salario mínimo. Fue puesto a disposición de la justicia federal el 7 de julio de 2000. 33. Diego Pérez López, acusado de homicidio (Exp. 109/998), fue sentenciado a ocho años de prisión. 34. Manuel Peñate López, acusado de robo con violencia (Exp. 315/998), fue sentenciado a ocho años de prisión. 35. Manuel Ruiz Ruiz, acusado de homicidio (Exp. 334/998), su caso está en proceso de instrucción. 36. José Luis Ruiz Ruiz, acusado de homicidio (Exp.284/996), su caso está en proceso de instrucción. 37. Vicente Ruiz Ruiz, acusado de homicidio (Exp. 334/998), su caso está en proceso de instrucción. 38. Margarito González Espinosa (Exp. 136/2000), se encuentra procesado. 39. Manuel Jiménez Vázquez, acusado de homicidio (Exp. 284/996), se encuentra procesado. 40. Gerardo Landa Sánchez, acusado de abigeato con violencia (Exp. 32/2000), se encuentra procesado. 41. Bonifacio López Gómez, acusado de robo y asociación delictuosa (Exp. 424/998), su caso se encuentra en instrucción. 42. Isidro Entzin Pérez, acusado de portación ilegal de arma de fuego (Exp. 290/2000), su caso se encuentra en proceso de instrucción. 43. Carlos Nájera González, acusado de homicidio (Exp. 07/2000), su caso se encuentra en proceso de instrucción. 44. Martín López Santiz, acusado de homicidio (Exp. 334/998 y 331/998), su caso se encuentra en proceso de instrucción. 45. Ambrosio Pérez Ramírez, acusado de despojo (Exp. 143/2000 y 96/998), su caso se encuentra en proceso de instrucción. 46. Salvador López González, acusado de homicidio y delitos contra la salud (Exp. 166/2000 y federal 123/2000), se encuentra en proceso de instrucción. 47. Ernesto Jiménez Pérez, acusado de homicidio (Exp. 103/2000 y 091/2000), se encuentra en proceso de instrucción.
Del fuero federal
48. Sergio Olivas López, acusado de privación ilegal de la libertad y daños a la nación (Exp. 134/2000).
* Penal de Yajalón
49. Manuel Ramírez Torres, su caso se encuentra en instrucción. 50. Jacobo Landa Sánchez, acusado de homicidio (Exp. 05/2000), su caso se encuentra en instrucción.
* Penal de Comitán
51. Juan Jiménez Ramírez, acusado de despojo (Exp. 292/997), fue detenido hace un mes. Procesado.
* Penal de Playas de Catazajá
52. José Zenteno, ya sentenciado. 53. Roque López Montejo (Exp. 43/2000), se encuentra procesado.
* Penal de Ocosingo
54. Francisco de Meza Aguilar (Exp. 113/2000), se encuentra procesado.
* Consejo Tutelar de Menores Villa Crisol
55. Natalio Entzin Pérez, acusado de portación ilegal de arma de fuego (Exp. 90/2000), se encuentra procesado.
* Penal de Tacotalpa, Tabasco
56. Francisco Pérez Vázquez, acusado de homicidio y despojo (Exp. 04/996), fue sentenciado a 25 años de prisión. 57. Angel Concepción Pérez Gutiérrez, acusado de homicidio y despojo (Exp. 04/996), fue sentenciado a 25 años de prisión. 58. Carrillo Vázquez López, acusado de homicidio y lesiones (Exp. 06/996), fue absuelto. En prisión le notificaron otro juicio por violación ocurrida cuando ya tenía un año detenido en Yajalón. Hace dos meses fue trasladado a Tabasco (Exp. 28/97).
*Cereso de San José el Alto, Querétaro
59. Sergio Jerónimo Sánchez. 60. Anselmo Robles Sánchez (Exp. 120/997, 255/997 y 646/996).
Ambos son dirigentes del Frente Independiente de Organizaciones Zapatistas (FIOZ). Fueron detenidos a raíz de los hechos ocurridos en la ciudad de Querétaro el 5 de febrero de 1998, cuando un autobús en el que viajaba el gabinete presidencial fue interceptado por un grupo de manifestantes a la salida del acto conmemorativo del aniversario de la Constitución, lo que provocó hechos de violencia.
El gobierno federal retiró los cargos contra ellos pero el gobierno del panista Ignacio Loyola "revivió" unas órdenes de aprehensión del año 96 acusándolos de ser los "autores intelectuales" de despojo en varios predios: ejido de San Miguelito, Santa Rosa Jáuregui; Ejido Buenavista; la comunidad de San Miguelito.
Jerónimo Sánchez y Anselmo Robles, sentenciados a 16 y 15 años respectivamente, se consideran a sí mismos "perseguidos políticos" por el gobierno del estado, que "ha inventado los cargos como venganza" por las luchas sociales en las que han harticipado.
El 7 de febrero cumplieron tres años en prisión. En una carta escrita desde el Cereso de San José El Alto, Jerónimo y Anselmo señalan: "Hemos sido acusados de 'autoría intectual' de los delitos de despojo en agravio a particulares dado que no fue posible demostrar nuestra participación directa en los supuestos delitos".
Cabe aclarar que algunas testimoniales de los hechos ocurridos en 1996 fueron presentadas después de que fueron detenidos el 7 de febrero de 1998 para que el juez dictara la formal prisión ya que no tenían elementos.