LUNES Ť 12 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Se rindió homenaje en recuerdo al recién fallecido Pablo Hernán

Pachuca cayó 2-3 ante Cruz Azul; perdió lo invicto y el superliderato del torneo

CARLOS CAMACHO CORRESPONSAL

Pachuca, Hgo., 11 de febrero. En un juego ríspido y con arbitraje deficiente de Germán Arredondo, el Pachuca perdió su condición de invicto y el superliderato del torneo, al caer 2-3 frente a Cruz Azul.

Ante más de 25 mil aficionados que registraron sobrecupo en el estadio Hidalgo, los Tuzos hicieron un reconocimiento al fallecido Pablo Hernán Gómez y retiraron el número 20 con el que jugaba.

El homenaje del recuerdo al acaecido argentino se efectuó antes del partido y se entregó a los padres de Pablo Hernán las dos últimas playeras que utilizó el ex futbolista. Acto seguido, un gigantesco globo con el dibujo de una playera con el número 20 se elevó rodeado de otros globos blancos y azules.

Los aficionados, visiblemente tristes, desplegaron en tribunas una camiseta de 30 metros. El gobernador Miguel Angel Núñez Soto develó una placa con el nombre de Gómez, el número y su efigie para denominar así el nuevo palco principal del inmueble.

El club indicó que ya realizó los trámites necesarios para garantizar la educación y el bienestar de los hijos de Gómez, Leandro y Paola Micaela, quienes también estuvieron presentes.

Después del homenaje, los Tuzos salieron motivados y tuvieron una llegada por conducto de Pedro Pineda, quien fue fauleado por Juan Reynoso, pero el silbante le perdonó la tarjeta roja al peruano. Dos minutos después, al 5, el central Francisco Gabriel de Anda conectó con la cabeza un tiro de esquina y abrió el marcador.

En pleno festejo empataron los Cementeros, a los 6 de acción, con una gran anotación del novato José Alberto Hernández, quien a la entrada del área recibió un pase y con gran técnica mandó un tiro al ángulo superior derecho del colombiano Miguel Calero.

Los constantes errores

Arredondo siguió con sus errores en jugada posterior, cuando Hernández fue derribado en los límites del área y en lugar de marcar falta sólo amonestó al jugador celeste.

A los 24, de plano se le fue el partido de las manos al silbante, al no señalar un faul de Francisco Palencia sobre Manuel Vidrio, con lo que el Gatillero enfiló sin marca a la portería. Aprovechó que defensa y portero se quedaron estáticos esperando la marcación del silbante y anotó con un tiro rasante el 1-2 a favor de los visitantes.

A los 30, Pineda desperdició una clara oportunidad, con un tiro desviado cuando estaba solo. Pero los Tuzos presionaron y marcaron el 2-2 al minuto 32, en un tiro libre cobrado por Octavio Valdez que fue desviado por Tomás Campos, ante el acoso del ariete argentino Gabriel Caballero.

Ya sobre el final de la primera parte, Vidrio cobró venganza por propia mano y dio un artero codazo en el rostro a Palencia, y todavía lo remató cuando estaba tirado.

Arredondo no marcó nada hasta que vio la sangre en el rostro de Palencia; fue entonces cuando decidió expulsar al central tuzo, pero marcó falta del delantero cruzazulino, quien salió en camilla y fue remplazado por Everaldo Bejines.

El segundo tiempo fue de menor intensidad. Al 76, el brasileño Julio César Pinheiro marcó el tanto de la victoria, al controlar con el pecho un largo centro y ante la floja marca de Francisco Gabriel, quien pedía inexistente fuera de juego, batió a Calero con fuerte disparo por arriba para el 3-2 definitivo.

Pachuca estuvo cerca del empate sobre el final, pero un tiro bombeado del paraguayo Francisco Ferreira fue rechazado por la defensiva.

Al 90, el Conejo Pérez fue expulsado por retrasar el juego y, con los tres cambios realizados, su sitio en la portería fue ocupado por Hernández, quien ya ni siquiera tocó el balón.