MIERCOLES Ť 14 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť Grado de inversión para México sólo si hay reforma fiscal, insisten analistas
Representaría 48% del PIB la deuda pública
Ť Zedillo había dicho que era 23 por ciento; Fox la ubicaría en $2 billones 880 mil millones
ANTONIO CASTELLANOS
La deuda pública respecto al producto interno bruto (PIB) puede ser de 48 por ciento, y no de 23 por ciento, como lo consideraba la administración pasada. El gobierno de Fox le dará su exacta dimensión en el próximo informe trimestral, adelantaron las consultoras Standard and Poor's y Bursamétrica, y ello desatará una polémica, porque llegaría a 2 billones 880 mil millones de pesos.
Asimismo, señalaron que México se encuentra cerca del grado de inversión que le permitiría recibir mayores flujos de capital, pero la condición de Standard and Poor's se mantiene: primero la reforma fiscal integral. Si este proceso no avanza en el próximo periodo ordinario de sesiones del Congreso de la Unión, la calificación podría retrasarse y ofrecer malas señales a los inversionistas.
Standard and Poor's definió su posición sobre el posible otorgamiento de grado de inversión a México, y en un documento titulado "México en la trayectoria del grado de inversión", señala que el país ha mejorado desde hace un año, luego de la aprobación de la Ley de Concursos Mercantiles y de la Miscelánea de Garantías, así como de las elecciones del 2 de julio, que marcaron un importante paso hacia el proceso de democratización y del respeto de las leyes en México.
Pero aclara que un alza de calificación a México "dependerá de una mejor combinación de las políticas fiscal y monetaria, una ampliación de la base de contribuyentes y de crecientes ingresos tributarios. Estas reformas, más la desregulación de los sectores de electricidad y energía, sobre las cuales la administración Fox ha indicado que serán buscadas en los próximos meses, disminuirán la vulnerabilidad del presupuesto a los vaivenes del precio del petróleo y facilitarán el crecimiento sostenible de largo plazo".
Según los expertos de las consultoras, de manera adicional se conocerá el déficit público del año anterior, cifra que puede impactar negativamente a los mercados financieros nacionales, porque a pesar del favorable comportamiento de la economía durante el año pasado, aquel fue de 1 por ciento. Otros expertos y la propia Secretaría de Hacienda aceptan que rebasará el uno por ciento. Los analistas de Bursamétrica señalaron que a pesar de que la inflación en enero del presente año fue de 0.55 por ciento, por debajo de las expectativas que había en el mercado -cifra que considera buena-, pero estima que para todo el año la inflación llegará a 8.56 por ciento, muy por encima del 6.5 por ciento de la meta oficial establecida en los Criterios Generales de Política Económica.
Los factores que influyeron en su comportamiento fueron: la estacionalidad, que provocó en los productos agrícolas fuertes bajas en sus precios, menores presiones inflacionarias por los efectos rezagados de la política monetaria restrictiva, y una contracción en la demanda; también, la existencia de fuertes distorsiones regionales. En Monterrey, por ejemplo, la inflación en enero fue de 1.80 y en la ciudad de México de 0.29 por ciento.
No obstante que existe una importante afluencia de divisas, agregaron, el Banco de México mantiene la base monetaria observada, e incluso por debajo de la trayectoria, reduciendo drásticamente el crédito interno. Este hecho da señales de menor crecimiento económico y menor inflación al inicio del año.