MIERCOLES Ť 14 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Pretende dar el servicio por suscripción pagada

La sentencia contra Napster abre expectativa comercial para Bertelsmann

DPA

Washington/Hamburgo, 13 de febrero. Luego de que un tribunal de San Francisco determinara ayer que la empresa Napster no será obligada a cerrar sus puertas, pero sí a dejar de usar material musical con copyright, se abren nuevas vías en Internet al gigante mediático alemán Bertelsmann.

Como socio de Napster, el consorcio considera que la sentencia confirma sus planes de transformar esa joven empresa en un servicio de distribución de música digital por suscripción pagada con respeto de los derechos de autor, declaró el presidente del grupo de e-commerce de Bertelsmann, Andreas Schmidt.

La sentencia contra este sitio de intercambio y transferencia gratuita de miles de títulos musicales, recibida con júbilo por la parte acusadora, la industria discográfica de Estados Unidos, no acabará, sin embargo, con el pleito, pues Napster anunció que presentará apelación.

"Para nosotros es simplemente una victoria", dijo Schmidt, y agregó que para Bertelsmann, "aunque la oferta sea pagada, con sus 260 millones de títulos musicales sigue siendo única y fácil de operar".

Bertelsmann concluyó en octubre pasado una alianza con esta empresa creada por Shawn Fanning, en 1999, cuando era un estudiante de 18 años.

El consorcio alemán se respalda en sondeos recientes según los cuales el 70 por ciento de los usuarios de Internet estaría dispuesto a pagar hasta 15 dólares al mes por un servicio como el de Napster. Un estudio en Estados Unidos demostró incluso que dos tercios de los clientes del sitio acaban comprando en una tienda el disco compacto con las canciones intercambiadas en la controvertida bolsa digital.

Bertelsmann espera, asimismo, que otras empresas den marcha atrás en su línea dura contra Napster luego que, de las cinco que presentaran la querella original, dos cambiaron de frente viendo el futuro en ese modelo de intercambio de grabaciones. También la industria estadunidense sabe muy bien que actualmente no hay una alternativa viable a ese sitio