VIERNES Ť 16 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Decisión del Ejecutivo, el voto a favor o en contra de Cuba en la ONU, advierte

Ratifica De la Rúa en su puesto al cuestionado titular del Banco Central de Argentina

Ť La medida presidencial divide a la frágil alianza de socialdemócratas y centroizquierdistas

STELLA CALLONI CORRESPONSAL

Buenos Aires, 14 de febrero. El presidente Fernando de la Rúa ratificó hoy en su cargo al cuestionado titular del Banco Central de la República Argentina, Pedro Pou, cuya re-nuncia era pedida desde varios sectores, in-cluso de la Alianza gobernante, gesto que provocó decepción ya que se interpretó co-mo una profundización de la "continuidad" de la política del anterior gobierno del ex presidente Carlos Menem, que amparó la corrupción y las mafias en el poder.

Ahora, las divisiones al interior de la coalición oficial, formada por la Unión Cívica Radical y el Frente País Solidario (Frepaso), se hacen más profundas.

El mandatario argentino sostuvo además que hasta tener "información confirmada" deben cesar los cuestionamientos en el te-ma del lavado de dinero, porque esto "perjudica la imagen del país".

"La crítica constante crea incertidumbre en los mercados. Todos saben que este gobierno tiene discrepancias con el presidente del Banco Central, pero respeta la autonomía de la autoridad monetaria", dijo en alusión a pedidos de renuncia de Pou.

"No se deben tomar decisiones en base a especulaciones", añadió, y de este modo dio mayor importancia a la presión de los sectores financieros que respaldan a Pou, a quien la justicia le reabrió una causa.

El escándalo estalló al divulgarse un in-forme del Senado estadunidense, que se basó en investigaciones de la diputada disidente del oficialismo Elisa Carrió, que se-ñala a bancos argentinos implicados en el lavado de dinero.

Tensas relaciones diplomáticas

Por otro lado, De la Rúa dejó en claro que él tomará una decisión sobre el voto argentino referente a Cuba en la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas, que se reunirá en abril, y lamentó que los argentinos no hayan salido a "defender contundentemente a la querida patria" frente a las palabras de Fidel Castro.

"El mandatario olvida que Castro se refirió al gobierno (argentino) cuando hablaba de lamer las botas de Estados Unidos, y no al pueblo", comentó un analista esta noche, al referirse a las tensas relaciones entre Buenos Aires y La Habana, que ya venían mal encaminadas cuando en abril pasado Argentina condenó a Cuba en Ginebra.

Junto con la lucha contra la corrupción, caballo de batalla de la Alianza para obtener su triunfo electoral en octubre de 1999, también se mencionaba que, a diferencia del Ejecutivo menemista, el nuevo gobierno tendría una política "respetuosa pero independiente" hacia Estados Unidos.

Sin embargo, aun contra sectores de la propia Alianza como el líder radical y co-rreligionario de De la Rúa, el ex presidente Raúl Alfonsín, o el ex vicepresidente Carlos Alvarez --quien renunció en octubre pasado tras infructuosos intentos de que se investigará un escándalo de corrupción en el Senado--, Argentina votó contra el go-bierno de La Habana.

En el caso del lavado de dinero, De la Rúa parece haber seguido el consejo de los banqueros y de la cancillería, preocupada más por la opinión que los entes estadunidenses calificadoras de riesgo financiero.

Pero "no podemos ocultar la verdad porque algunas calificadoras estadunidenses traten de detener la investigación, que compromete también a bancos y funcionarios de ese país (Estados Unidos), chantajeando a un gobierno débil como éste", dijo una fuente de los legisladores socialistas democráticos, que ya han abandonado hace tiempo el bloque de la Alianza, en desacuerdo con la política gubernamental.

Algunos gobernadores justicialistas (pe-ronistas, en la oposición) mencionaron también esta noche "la debilidad del go-bierno", al tiempo que en el centroizquierdista Frepaso --el socio menor de la Alianza-- existía fuerte indignación por la ratificación de Pou, un funcionario nombrado durante el menemismo.

El mandatario también criticó hoy a la diputada rebelde Carrió, quien junto con el legislador Gustavo Gutiérrez investiga el lavado de dinero, pero ésta insistió hoy en que no pide la salida de Pou sino que sostiene que "es un delincuente", y lo probará.

Las relaciones ahora son difíciles no sólo entre el radicalismo y el Frepaso, sino también entre sectores del radicalismo con el propio presidente.

En tanto, cada día surgen nuevos elementos y documentación que comienzan a ex-tender el marco de las culpabilidades en el tema del lavado de dinero procedente de sobornos, narcotráfico, contrabando de oro y armas, entre otros delitos.

Además de ex funcionarios menemistas, están en la picota algunos de los hombres que fueron señalados hace tiempo por otros escándalos, como el polémico ex jefe de los Servicios de Inteligencia del Estado de este gobierno, el empresario Fernando de Santibáñez, amigo de De la Rúa y cuyo accionar provocó la primera gran crisis en la Alianza en octubre pasado.

Fue el tema de la corrupción en el Senado, que el gobierno no enfrentó, lo que provocó la renuncia del vicepresidente Alvarez, quien estaba en desacuerdo con el virtual amparo gubernamental para los senadores denunciados por haber recibido so-bornos para votar una polémica ley de re-forma laboral, que hoy es la base del extendido conflicto social en todo el país.

Precisamente, varias rutas continúan to-madas por desocupados en todo el país, mientras sigue la fuerte protesta de los vecinos del barrio Confluencia en la provincia de Neuquén, al enterarse de que había muerto el hombre --padre de cuatro hijos y cuya esposa está embarazada-- que se inmoló la víspera tratando de evitar un desalojo policial con extrema violencia.

Hasta la madrugada, enfurecidos manifestantes apedrearon la comisaría de la zo-na y arrojaron bombas incendiarias.

Hay cuatro heridos de bala internados y este día continuaron las movilizaciones exigiendo la renuncia del gobernador, Jorge Sobich, y del juez que actuó, así como de los policías que maltrataron a las familias desalojadas, lo que originó el drama.

"Antes de dar una respuesta a la dramática situación de los desocupados se responde con represión y muerte", denunciaron estos vecinos de Neuquén.

En tanto, la Confederación General del Trabajo prepara un paro nacional para los próximos días primero y 2 de marzo, mientras la Central de Trabajadores Argentinos también anuncia movilizaciones, en mo-mentos en que se informa de una nueva ola de despidos en varias empresas, como la privatizada Aerolíneas Argentinas.