Ť Hallazgo tan relevante como el del Señor de Sipán
Descubren, en Perú, tres tumbas de indígenas moches
Ť Contienen tesoros pertenecientes a esa civilización
DPA Y REUTERS
Lima, 15 de febrero. Tres tumbas repletas de tesoros de la ancestral cultura indígena Moche fueron descubiertas por un grupo de arqueólogos estadunidenses en el norte de Perú, hallazgo considerado tan importante como el del Señor de Sipán en la década de los ochenta.
El equipo de expertos encabezado por Christopher Donnan, de la Universidad de California, Los Angeles, localizó las tumbas, luego de tres años de excavaciones, en una pirámide de 32 metros de altura en la zona de Dos Cabezas, departamento de La Libertad, donde se asentaron los moches entre los años 800 al 100 aC.
''Lo que hace de estas nuevas tumbas algo tan especial es que jamás habíamos visto la cantidad y la calidad de los trabajos de cerámica, textiles y metales", dijo Donnan, quien no descartó encontrar más entierros, aunque probablemente sin el lujo de los recién descubiertos.
''Me parece que se trata de tumbas muy importantes y que figuran entre las más ricas que jamás se hayan encontrado, superadas sólo por las tumbas reales en Sipán, Perú, a finales de los años ochenta."
Divulgación por National Geographic
Además de ornamentados objetos de cerámica
y otros tesoros, el arqueólogo informó que cada tumba contiene
los restos de las tres personas de mayor altura que él cree hayan
sido jamás extraídos de un sepulcro en América del
Sur.
''Medían hasta 1.82 m. La altura promedio del hombre moche fluctuaba entre 1.49 y 1.70 m, de manera que estaban por encima de eso", subrayó.
''Estamos sorprendidos por la altura de estos individuos."
Donnan, cuyo hallazgo será divulgado en la edición de marzo de la revista National Geographic, expresó su creencia de que los tres hombres pueden haber adolecido de una enfermedad similar al llamado síndrome de Marfan, un desorden genético causante de huesos delgados y alargados.
Los moches fue una civilización agrícola que floreció en las desérticas planicies entre los Andes y el oceáno Pacífico. Acostumbraban sepultar a los miembros de su nobleza en enormes monumentos construidos con adobes.
Objetos de oro, plata y cobre decorados con escenas de cacería, pesca, combates, castigos, encuentros sexuales y detalladas ceremonias eran sepultados con los cadáveres. Aunque menos de 15 de las 350 tumbas moches hasta ahora encontradas tenían en su interior objetos de oro y plata.