Ť Asegura que sentará las bases para transferir servicios educativos al gobierno capitalino
El DF será laboratorio para aplicar programas de enseñanza: Ortega
Ť Anuncia la creación de un ombudsman para atender el hostigamiento sexual en las escuelas
CLAUDIA HERRERA BELTRAN
Ante el declive de 6 por ciento de la matrícula en las escuelas de educación básica del Distrito Federal, esta entidad será aprovechada como "laboratorio" del gobierno federal en la operación de proyectos para mejorar la calidad de la enseñanza y para darle un rostro más "social" .
Como parte de este plan, la subsecretaria de Servicios Educativos para el DF, Sylvia Ortega, indica que habrá un ombudsman para defender los derechos de los niños, y "sacar del clóset" temas como el abuso sexual en la escuela. Se experimentará un nuevo modelo de prescolar que seguirá siendo lúdico, pero con la premisa de dar contenidos educativos al niño y poder detectar desde esa etapa sus necesidades educativas especiales que ahora se conocen hasta la primaria.
Se buscará además que todas las escuelas sean de jornada completa (los estudiantes saldrán de las aulas a las 16:00 o 17:00 horas), se buscará dotar a todas los planteles de computadoras y se promoverá la desburocratización de los 8 mil 700 centros escolares.
Proceso incluyente
Por otra parte, informa que en su primer año de gestión sentará las bases para transferir la prestación de los servicios educativos al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, pero sin sacrificar la mejora de la calidad, y en un proceso que incluya no sólo al SNTE y a los gobiernos local y federal, sino a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, a los padres de familia y a otros actores educativos interesados.
La responsable desde hace tres semanas de la educación de dos millones de alumnos ?de enseñanza inicial a normal?, atendidos por 95 mil docentes y 65 mil trabajadores de apoyo, señala que su estrategia se centrará en la mejora de la calidad, sobre todo cuando las estadísticas recientes señalan que el rendimiento escolar en la capital del país ha bajado.
La socióloga, ex rectora de la Universidad Pedagógica Nacional y experta en la formación de cuadros de alto nivel, es optimista en que se logrará alcanzar una educación de excelencia. Se trata, dice, de "movilizar" a científicos, profesores y organizaciones no gubernamentales a favor de niños y jóvenes.
-¿Con qué indicadores se encontró?
-Veo con preocupación que los indicadores de rendimiento escolar tuvieron un declive con re specto a lo que se consiguió en la última década. No significa necesariamente que vayamos mal en términos absolutos; quizá quiere decir que hay otros estados que ya nos están alcanzando y nosotros nos hemos detenido.
-¿Dónde está el rezago?
-Los exámenes estandarizados indican que tenemos escuelas con resultados muy contrastantes. En secundaria, la mejor, que es la anexa a la Normal, tiene resultados favorables del 80 por ciento; la que le sigue, del 67 por ciento, pero las peores están separadas de la primera por 20 o 25 puntos porcentuales.
-¿Dónde se localizan los planteles más problemáticos?
-Están en las zonas muy alejadas, como Xochimilco y Milpa Alta, donde los servicios educativos son menos densos, donde tenemos dificultades para que los profesores asistan regularmente. Tenemos que profundizar estos estudios, pero la prioridad es lograr la equidad en una entidad llena de contrastes.
Otra cuestión que me preocupa es la atención a grupos vulnerables. Si bien se ha hecho un esfuerzo de crear planteles de educación especial, éstos están lejos de tener la calidad que este grupo requiere. Además hacemos muy poco para atender a los niños migrantes.
-Aunque en primaria hay cobertura casi universal, en otros niveles educativos esto no sucede.
-Un cosa que hacemos mal en el país es ofrecer educación inicial y preescolar, sobre todo en la primera, porque la cobertura es baja, el número de centros de desarrollo infantil es pequeño. En preescolar el problema es que no se ha concebido como un nivel educativo, sino más de socialización y lúdico, lo que está muy bien, pero ya no responde a las necesidades de un niño urbano. Tienes que darles contenidos educativos, porque es un nivel importante. Estudios de otros países demuestran que quien cursó un buen preescolar tiene casi asegurado el éxito en el futuro.
-¿Cuál es el proyecto?
-Necesitamos reconceptualizar la educación preescolar. Ya platiqué con mis vecinos de la subsecretaría de Educación Básica y Normal para que nos asociemos en este esfuerzo, y el DF es un campo de experimentación. Hay varios programas que podríamos adaptar, como uno que funciona en California y Nueva York, que consiste en desarrollar en los niños habilidades precursoras. El niño de preescolar además de leer, puede escribir, familiarizarse con los números mediante métodos de aprendizaje, investigar y navegar en Internet, porque ya tiene capacidades para usar la tecnología. Así se pueden identificar precozmente eventuales problemas de aprenedizaje, de concentración, de hiperactividad, incluso de discapacidad, lo que ocurre ahora hasta la primaria.
-¿Qué sucederá con la primaria luego de que su matrícula ha comenzado a decrecer?
-El asunto es que necesitamos desburocratizarla y cumplir con la premisa de que las escuelas sean autogestionarias y se conviertan en el centro de la comunidad.
-¿Cómo hacer que los niños se interesen en la lectura?
-Hay varios programas, como los rincones de la lectura, pero si los niños no tienen el hábito de leer fuera del aula, no hay muchas alternativas. Vamos a mejorar las 122 bibliotecas para darle a los niños espacios en los que hagan su tarea. También podríamos tener jóvenes que realicen su servicio social estimulando a los niños a leer. Estos espacios, con un poco de inversión en computadoras y música ambiental pueden ser lugares muy atractivos. En paralelo impulsaremos la biblioteca digital.
-¿Se creará un ombudsman para atender los casos de abuso sexual?
-Veo con mucha preocupación este tema del hostigamiento sexual. Pienso que hay que sacarlo del clóset y hacer un debate con apertura y altura. Eso no quiere decir que en las escuelas públicas haya incidencias de esta naturaleza todo los días, pero lo justo es que nos existan. Hay una red llamada Estoy Contigo, integrada por especialistas, psicólogas y maestras que atienden estos casos, pero necesitamos ampliarla. La condición es que el debate sea de altura y no amarrillista.
-¿Cuáles son los problemas concretos?
-El grupo me ha brindado información respecto de incidentes aislados, extraordinarios, pero que reflejan la vida en la ciudad, la violencia intrafamiliar, las conductas al interior de la familia. Lo que queremos es que esto no ocurra y por eso vamos a crear un ombudsman que atienda estas quejas.
-Muchas veces la administración escolar es la primera en proteger a un profesor o a un trabajador que hostiga o abusa sexualmente de los niños
-Es cierto. A veces la escuela es un espacio muy cerrado, pero los consejos de participación social nos van a ayudar a abrirlo y que rinda cuentas a la sociedad.
-¿Quién sería el ombudsman-
-Es un grupo de personas. El servicio sería equivalente a lo que hacen los visitadores y el ombudsman, pero es un asunto que tengo que platicar con el titular de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, Luis de la Barreda.
El ombudsman a crear también vería otros temas, como el maltrato en la escuela y todos los derechos de los niños.
-Por otra parte, ¿en cuánto tiempo se hará la transferencia de los servicios educativos al gobierno local?
-La instrucción del secretario de Educación Pública, Reyes Tamez Guerra, es que se haga bien y en el menor plazo posible. ¿Cuándo será eso?, no lo sé. Apenas tengo aquí tres semanas, ya hice muchas cosas, pero no puedo responder a eso.
-Hay pláticas con el gobierno del DF.
-Con los delegados, y espero poder ver cercanamente a los funcionarios del gobierno local. La próxima semana voy a tener una conversación con la Asamblea Legislativa.