MIERCOLES Ť 21 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť Asamblea Legislativa
Admite contralora deficiencias en la labor de contadores
GABRIELA ROMERO SANCHEZ
Yolanda Andrade Contreras, contralora interna de la Contaduría Mayor de Hacienda, admitió que los contadores Carlos Nava, Luis Humberto Sanguino y María de la Luz Mijangos incurrieron en una serie de deficiencias e irregularidades en el manejo administrativo del presupuesto del órgano superior de fiscalización, que van desde boletos de avión que no corresponden con las fechas reportadas, el pago de notas de consumo de restaurantes y/o desfasamiento en algunos programas, hasta la aplicación errónea del tabulador.
Al comparecer ante los integrantes de la Comisión de Vigilancia de la CMH de la ALDF, la contralora en un primer momento trató de justificar estas irregularidades con la falta de actualización de la Guía Contabilizadora o de lineamientos internos en la materia. Sin embargo, al responder a los cuestionamientos de los legisladores locales en más de una ocasión entró en contradicciones al hablar de los avances que se habían tenido gracias a la normatividad existente.
Hecho que ocasionó que los diputados Clara Brugada Molina, del PRD; Federico Doring Casar, del PAN, e Irina del Castillo, del PRI, le advirtieran le advirtieron que no sólo estaba en tela de juicio la actuación de los tres contadores, sino también la suya por la complacencia que ha mostrado. Incluso, el panista remarcó que es necesario destituir a los titulares de la CMH.
El priísta Héctor Gutiérrez de Alba, presidente de la Comisión de Vigilancia, en entrevista posterior, enfatizó que ha habido mucha complacencia de parte de la contralora hacía los contadores, cuando lo que se requiere es mayor energía en las revisiones y fincamiento de responsabilidades. "Obviamente que tendrán que fincarse, mínimo responsabilidad administrativa por muchas de las anomalías que se han mencionado".
En su oportunidad Cuauhtémoc Velasco, de Convergencia por la Democracia, exigió a la contralora Andrade responder con veracidad, ya que minutos antes había negado que la contadora Mijangos levantará una denuncia ante la Contraloría Interna. "Aquí está el documento", espetó, al tiempo de mostrar las copias.
Entonces, resumió Velasco Oliva: "junto a un manejo discrecional, se encuentra el hecho de que no se lleva a cabo una adecuada fiscalización".
Molesto por la vaguedad de las respuestas de la contralora, el panista Doring Casar le recriminó que no había mucha diferencia entre lo que ella les decía y lo que dicen los contadores. "Para otra vez le enviaremos el formato de la comparecencia", acotó.
En el informe por escrito que la contralora entregó a los legisladores se indica que de mayo a diciembre de 1999, se radicaron 7 denuncias por actos atribuidos a diversos sectores públicos de la Contaduría, una de ellas se presentó por un particular, y otra por actos de prepotencia y abuso de autoridad. El resultado de estas fue la inhabilitación por un año de su cargo de dos funcionarios: Porfirio Hernández Arenas y Lilia Cuevas, quien retiró documentación oficial sin autorización de su superior jerárquico.