MIERCOLES Ť 21 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť Otras 500 están relacionadas con el uso de documentos oficiales falsos: Fromow

Hay 300 denuncias por fraude a Tesorería en la PGJDF

ANGEL BOLAÑOS Y LAURA GOMEZ

De las casi 800 denuncias penales que lleva la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal por delitos relacionados con actividades de trabajadores de la Tesorería capitalina, aproximadamente 300 se investigan por defraudación en contra de dicha dependencia, de los contribuyentes o incluso de bancos que recibieron cheques certificados pero que fueron desviados a cuentas de particulares.

El fiscal de Delitos Financieros, Guillermo Fromow Rangel, quien tiene a su cargo la integración de las averiguaciones previas por las denuncias que se presentaron hasta antes del 6 de diciembre, cuando se creó la Fiscalía para Delitos Fiscales, explicó que en los otros casos se investigan otros ilícitos como el uso de documentos falsos.

Hay situaciones también en las que no se configuró el delito, pues se trató de irregularidades de tipo administrativo y en estas corresponde a la Contraloría Interna de la Secretaría de Finanzas y la Contraloría General del GDF intervenir y en su caso fincar las responsabilidades.

El año pasado, indicó, la PGJDF obtuvo tres sentencias condenatorias por fraudes cometidos en contra de la Tesorería con sanciones que van de entre 3 y 5 años y medio de cárcel en los juzgados 10,14 y 26 de lo Penal. Actualmente la fiscalía trabaja en alrededor de 200 de estas denuncias penales previas y en los próximos días están por consignarse cinco más. En otras se agotaron los medios al alcance del Ministerio Público para investigar la identidad de los defraudadores y se van provisionalmente al archivo.

"Son delitos bien maquinados en los que se utilizan nombres o direcciones falsas y llega un momento en que se cierran los canales de investigación", advirtió Fromow Rangel, por lo que contra este delito lo mejor es la prevención mediante controles de documentación y de los procedimientos administrativos.

Para evitar la ocurrencia de estos ilícitos se cambió al personal de estructura de las 21 oficinas recaudadoras principales y algunos de las 19 auxiliares; se establecieron "candados" en el sistema informático, se emitieron boletas de pago de impuestos y derechos llenas, se determinó el encriptamiento del pago de tenencia vehicular y se mantiene una verificación constante por parte del personal de la contraloría de la Secretaría de Finanzas.

Además, explicó el subtesorero de administración tributaria, Jesús Martín del Campo, se realiza un recorrido cotidiano por las administraciones, con apoyo de una unidad móvil de la procuraduría, para que los interesados denuncien las anomalías observadas en la prestación del servicio y se actúe en consecuencia. Sin embargo, reconoció que la falta de una cultura de denuncia evita concluir con muchos de los expedientes abiertos.

Mencionó que, a diferencia de 1996 y 1997 cuando había un "paraíso de defraudación por tenencia", hoy se ha logrado detectar y combatir muchas de esas formas que, entre las más comunes, se encuentran el uso de papelería oficial denunciada como robada; falsificación de papelería, uso de los recursos para cubrir los adeudos de otras personas y el uso de un serial de automóvil bajo para el pago de un vehículo de alto valor.