JUEVES Ť 22 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť Organizaciones no gubernamentales acusan a Jorge Castañeda de oponerse a la paz
Cuestionan negativa del gobierno para que el CICR acompañe a los zapatistas a la capital
Ť Luis de la Barreda dice que aunque no se lo pidan, la CDHDF vigilará la marcha
VICTOR BALLINAS, JOSE GIL OLMOS, ANGELES CRUZ, GEORGINA SALDIERNA Y JUAN BALBOA
El presidente de la Academia Mexicana de Derechos Humanos (AMDH), Oscar González, confirmó ayer a este diario que "cuando el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) consultó con el gobierno si aceptaba la participación de ese organismo internacional en la movilización del EZLN de Chiapas a la ciudad de México, la respuesta fue negativa. No se aceptó".
Entrevistado sobre la negativa del CICR de participar en la marcha del EZLN, y sobre el comunicado del subcomandante Marcos emitido ayer, en el cual asegura que fue el gobierno el que no aceptó la participación del organismo en la movilización, González dijo que conversó con el delegado del CICR en México, Thierry Meyrat, para aclarar algunas dudas y, en efecto, la información de que disponía era en el sentido de que "el gobierno no aceptó la labor del CICR".
La AMDH "realmente no ve la razón de peso para que el gobierno se negase, cuando en otras ocasiones el CICR ha participado en la seguridad del traslado del EZLN. Vemos ahí una inconsistencia", indicó.
González, quien es diplomático de carrera, aunque actualmente no está en funciones, confió en que prevalezca la sensatez; "ojalá el gobierno recapacite su decisión, pues la marcha en nada va a afectarle y sí podría contribuir a dar mayor celeridad" .
Con esta decisión del gobierno, se le inquirió a González, Ƒestaríamos ante un doble lenguaje del Ejecutivo?
"Esperamos que no, que no sea el principio de un cambio de actitud. Esperamos que haya sido una decisión equivocada y que el gobierno la corrija. Aún estamos a tiempo de que el gobierno manifieste al CICR su aceptación, y que éste pueda retomar el camino".
Acuerdo de ambas partes
Oscar González explicó: "el punto central era si el gobierno aceptaba o no esa participación, porque para que el CICR actúe se requiere el acuerdo de las dos partes cuando hay un conflicto bélico en movimiento, de acuerdo con el artículo 3 del Protocolo de Ginebra, eso es en el caso de conflictos como el de Colombia.
"En el caso de Chiapas, aunque hubo un conflicto bélico, con la iniciativa de ley de la Cocopa no está activo, y por tanto tendría que haber acuerdo entre las partes para el derecho humanitario y que el CICR actuara. Como no está activo el conflicto, el CICR no puede ejercer su derecho de iniciativa si las dos partes no lo acuerdan, y en esa etapa, al consultar al gobierno, el CICR tuvo respuesta negativa".
Por otra parte, las directivas de PRD y PT anunciaron que están dispuestas a que sus legisladores acompañen al EZLN en su marcha desde Chiapas a la ciudad de México. Sin embargo, señalaron al gobierno del presidente Vicente Fox como el principal responsable de garantizar la seguridad de los rebeldes en su paso por 11 estados.
El vocero del CEN perredista, Carlos Navarrete, consideró como un "incidente menor" la negativa del Comité Internacional de la Cruz Roja para hacerse cargo de la seguridad de la comitiva zapatista, porque no será un obstáculo para realizar la marcha.
Aunque será hasta este jueves cuando definan una posición política sobre la marcha zapatista, Navarrete adelantó que el PRD pedirá al titular de la Secretaría de Gobernación, Santiago Creel, hable con el gobernador panista de Querétaro, Ignacio Loyola, y lo exhorte a la prudencia, porque sus declaraciones en contra del EZLN sólo obstaculizan las posibilidades de reiniciar el diálogo.
Por su parte, el diputado del PT y miembro de la Cocopa, Félix Castellanos, propuso que el Comité Internacional de la Cruz Roja sea sustituido por la ACNUR o la OEA en el encargo de la seguridad de los zapatistas.
A su vez, el dirigente nacional del PAN, Luis Felipe Bravo, dijo ayer que la decisión de la Cruz Roja Internacional de no participar en la marcha zapatista se ajusta a la normatividad, a la conducta y a la tradición de este organismo, que por otro lado siempre ha tenido muy buena voluntad con respecto a México y al EZLN, de manera que no debe extrañar una respuesta tan puntual y tan certera.
Destacó que el gobierno está abierto a generar todas las condiciones de seguridad que requiere la movilización zapatista y, por lo tanto, "no es necesario que haya la intervención de un organismo internacional".
Así "lo califica el propio comité de la Cruz Roja, el cual ve que el gobierno tiene toda la condición y toda la voluntad para que la marcha se dé con seguridad", puntualizó.
Bravo Mena rechazó que haya divisiones en el PAN con respecto al conflicto chiapaneco, y recordó que el pasado sábado Acción Nacional fijó claramente su posición en torno a la marcha, e incluso nombró una comisión de cuatro legisladores que tendrán la encomienda de participar en los encuentros que se puedan generar entre los zapatistas y los congresistas.
Mientras, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Luis de la Barreda Solórzano, dijo que aunque no se lo pidan, este organismo vigilará todos los actos de las autoridades que estén relacionados con la marcha zapatista a la capital.
Desde su llegada a esta ciudad, dijo, habrá visitadores que permanentemente estarán reportando cualquier posible denuncia, aunque admitió que están dadas las condiciones para que la manifestación se realice en paz. En particular, se refirió al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, del que opinó que puede garantizar la tranquilidad de la ciudadanía durante los días en que los zapatistas se encuentren aquí.
El Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, a través del sacerdote Miguel Concha, manifestó por su parte que " es claro y transparente el comunicado del subcomandante Marcos. Efectivamente esclarece por qué el CICR ha decidido, con fundamento en su criterio, no participar".
El religioso recordó que se necesita el acuerdo de las partes para que el CICR intervenga en las medidas de seguridad en el traslado del EZLN, "y está claro que el gobierno federal no dio su consentimiento a pesar de las expresiones que había emitido de permitir la marcha, y que para muchos eran de esperanza".
Sin actitud clara
"Esto es lamentable. No hay motivos para suponer que se iba a oponer. Desgraciadamente el gobierno todavía no acaba de tomar una actitud clara y firme para una solución pacífica en el conflicto, y sigue dando muestras de ceder a los sectores que siempre se han opuesto a la integración de los indígenas al desarrollo, al respeto a su derecho", aseveró el padre Concha.
Dijo que de igual forma que de 1996 al 2000, cada vez que se percibían avances aparecían nuevos obstáculos, hoy parece que esa situación se repite.
En tanto, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro no descartó que se puedan realizar nuevos contactos para que el CICR garantice la seguridad de la marcha, porque "ya hay experiencias claras de que la neutralidad de la Cruz Roja Internacional es la mejor garantía", pues en todas las movilizaciones que ha participado con el EZLN desde 1994 nunca han ocurrido incidentes.
Edgar Cortez, presidente de ese centro, dijo que la Cocopa puede hacer un esfuerzo, y para ello no debe desentenderse de su papel de coadyuvancia. Se pronunció porque el gobierno aclare qué fue lo que realmente pasó, y quién dentro del gobierno se opone.
En San Cristóbal de las Casas, Chiapas, cinco organizaciones no gubernamentales expresaron su preocupación por el rechazo del CICR para acompañar a la marcha zapatista a la ciudad de México, y acusaron al presidente Vicente Fox de presionar a esa organización internacional para que declinara hacerse cargo de la seguridad de la caravana.
Las organizaciones Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas, el Centro de Investigaciones Económicas y Políticas de Acción Comunitaria, la Comisión de Apoyo a la Unidad y Reconciliación Comunitaria, y la organización internacional Global Exchange coincidieron en manifestar que la actitud del Presidente deja abiertas las posibilidades para una nueva embestida militar en esa zona.
Estas organizaciones que tienen presencia en Chiapas señalaron que es el canciller Jorge Castañeda uno de los principales opositores para que el CICR acompañara al EZLN, y se ha convertido en uno de los mayores obstáculos al proceso de paz en Chiapas.