JUEVES Ť 22 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť Debe dejar de ser resumidero del desempleo
La pesca está desordenada y marginada, advierten industriales
MATILDE PEREZ
Las costas de Sonora, Sinaloa, golfo de Tehuantepec, Tabasco, Yucatán y Campeche son los focos rojos para la industria pesquera, pero no es con la creación de otros cuerpos policiacos o con la vigilancia del Ejército como se terminará con la pesca furtiva, destacó el presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Pesquera y Acuícola (Canainpesca), Carlos Hussong.
Ordenar las pesquerías en los 4 millones de kilómetros cuadrados de litorales del país es un asunto de los gobiernos estatales y federal. ''La pesca debe dejar de ser un resumidero del desempleo, usada para la negociación política, y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) tiene que aplicar la ley para terminar con el desorden, sobre todo en la captura del camarón'', agregó.
Hussong -electo presidente de la Canainpesca el pasado fin de semana- resumió la situación: ''La actividad pesquera en México está desordenada, marginada, con hambre y necesidad de un plan sectorial correcto y a largo plazo''. Por ello, dijo, la Canainpesca pugnará por el ordenamiento pesquero, porque la toma de decisiones sobre regulación y administración se base en la investigación científica y no en cuestiones políticas.
El nuevo enfoque que habrá de darle el secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación, Javier Usabiaga Arroyo, también deberá considerar un marco legal específico en materia financiera y fiscal. ''La pesca no es sólo salir a altamar y capturar cientos de toneladas, tiene mucha importancia económica; un sector pesquero saludable, con la infraestructura correcta, tendría un efecto multiplicador en la creación de empleos''.
Urge programa de modernización
Acompañado por el secretario, Alfredo Coppels, y el tesorero, Rafael Ruíz Moreno, el presidente de la Canainpesca dijo que otro de los problemas a resolver en el corto plazo es la modernización de la flota pesquera. ''Queremos barcos competitivos, cuyos costos de producción reflejen los márgenes necesarios para acceder a los mercados internacionales. Con un programa de modernización bien manejado podrían renovarse de 300 a 400 barcos anualmente; la flota actual tiene entre 15 a 30 años de antigüedad''.
Datos del programa de modernización de la flota pesquera nacional durante el periodo 1996-2000 indican que se rehabilitaron y sustituyeron 868 embarcaciones de las mil 300 programadas inicialmente, a través de fondos de FIRA y Fopesca.