VIERNES Ť 23 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť En su momento sabré qué hacer: Macedo de la Concha

Funcionarios de la PGR, involucrados en escapatorias

Ť Abiertas, varias líneas de investigación en cada caso, dice

JESUS ARANDA Y GUSTAVO CASTILLO

Ante las versiones sobre problemas en su equipo de trabajo entre el subprocurador Alfonso Navarrete y el jefe de la UEDO José Trinidad Larrieta, el procurador general de la República, Rafael Macedo de la Concha, dijo que no permitirá que ningún funcionario en su dependencia "vaya más allá" de las responsabilidades que tiene.

"No lo voy a tolerar y en su momento sabré qué decisión tomar", sostuvo en entrevista durante la reunión de cambio de directiva de la Barra Mexicana Colegio de Abogados.

Macedo de la Concha aseguró, por otra parte, que no tiene información sobre el presunto encuentro entre Larrieta y el ex subdelegado de la PGR en Chihuahua José Manuel Díaz Pérez dos días antes de que éste se fugara del lugar donde estaba arraigado. Sin embargo, dijo que de presentarse una denuncia formal al respecto, será investigado a fondo.

En este sentido, reconoció que si bien Larrieta continúa al frente de la Unidad Especializada contra la Delincuencia Organizada (UEDO), lo cierto es que las investigaciones sobre la huída del ex subdelegado las lleva a cabo la visitaduría general de la PGR.

Macedo insistió en que se agotarán todas las líneas de investigación, e incluso la versión que involucra al secretario particular del titular de la Defensa Nacional, general brigadier Augusto Moisés García Ochoa, con algunos funcionarios que podrían estar involucrados en el caso del ex subdelegado.

El procurador aseguró que Larrieta no ha sido suspendido en su cargo al frente de la UEDO, pero que lo relacionado con las indagaciones sobre la presunta venta de plazas también encabeza la propia visitaduría general.

Más adelante, el funcionario indicó que si bien se mantienen abiertas varias líneas de investigación en torno a la huída de Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, y del ex subdelegado, sería irresponsable adelantar cualquier comentario al respecto.

A este respecto, a últimas fechas han aparecido en distintos medios de comunicación versiones en las que supuestamente José Luis Thirión, quien ha sido servidor público en distintas instancias de inteligencia del gobierno mexicano, entabló comunicación directa con el general García Ochoa para decirle que había un patriota que quería denunciar la venta de plazas en Chihuahua y que a cambio le solicitaba, para el denunciante, se le adscribiera como delegado en Tamaulipas.

Asimismo, según estas versiones, el general García Ochoa habría accedido sin tener facultades para ello, y de esto informó al secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Clemente Vega García, y éste a su vez habría dado parte a la Procuraduría General de Justicia Militar para que iniciara las averiguaciones correspondientes, y pusiera los hechos en conocimiento de la PGR.

Supuestamente Thirión habría presentado al ex subdelegado de la Policía Judicial Federal en Chihuahua, Díaz Pérez, para que denunciara la venta de plazas. A finales de diciembre del año pasado, la PGR, en coordinación con la Procuraduría Militar montaron un operativo para detener tanto a Díaz Pérez como al ex delegado en Chihuahua Humberto Suárez García en el momento en que supuestamente el ex subdelegado le entregaría 500 mil dólares al encargado en Chihuahua para que lo cambiara de plaza y fuese nombrado delegado en Tamaulipas.

En esta investigación, en la que también se ordenó la detención y arraigo de José Luis Thirión, se involucró al subprocurador Navarrete Prida, aunque durante las investigaciones se le exoneró.

A principios de enero de este año, el general Macedo ordenó una auditoría general a la dependencia y en especial a la UEDO y a la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos contra la Salud (FEADS), para conocer la posible existencia de irregularidades.