SABADO Ť 24 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť En huelga de hambre, 50 zapatistas presos

Con música y baile despiden a delegados que marcharán al DF

Ť Hace 7 años se levantaron en armas para hacerse oír, hoy viajarán hasta la ciudad de México para hacerse visibles

JESUS RAMIREZ CUEVAS ENVIADO

San Cristobal de las Casas, Chis., 23 de febrero. La caravana zapatista iniciará este sábado cuando los 19 comandantes, las cuatro comandantas y el subcomandante Marcos salgan en vehículos desde cuatro comunidades indígenas hacia San Cristóbal de las Casas.

Si hace siete años los indígenas zapatistas se levantaron en armas para hacerse oír, a partir de mañana caminarán hacia la capital del país para hacer visible la realidad de los pueblos indios de México y convencer a la nación de que se tienen que reconocer sus derechos en la Constitución. Este sábado por la mañana saldrán de cuatro pueblos ubicados en los Altos y en la selva chiapaneca los 24 delegados del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) para iniciar su marcha hacia la ciudad de México, donde dialogarán con el Congreso de la Unión para que legisle a favor de los indios de todo el país y apruebe la iniciativa de ley de la Cocopa sobre derechos y cultura indígenas.

La marcha comienza en medio de un ambiente de expectación, fiesta, movilizaciones y una huelga de hambre que iniciaron más de 50 zapatistas presos en Chiapas y Tabasco para exigir su liberación como lo demanda el EZLN para reanudar el diálogo con el gobierno.

Fandango en los lugares de partida

La noche del viernes fue el tiempo para los abrazos, las despedidas, el baile, la música, los discursos. Varios miles de indígenas zapatistas han bajado de sus comunidades para despedir a los 24 comandantes del EZLN que viajarán a la ciudad de México desarmados y protegidos por ciudadanos voluntarios.

Caminando varias horas desde sus comunidades, algunos varios días, cientos de tzotziles, tzeltales, tojolabales y choles fueron llegando a lo largo del día a La Realidad, La Garrucha, Moisés Gandhi y Oventic para participar en la fiesta, desearles suerte y un buen viaje a sus representantes, quienes llevan su mandato.

Esta noche se reunieron en La Realidad decenas de tojolabales para despedir con música y baile a los delegados. Mañana saldrán muy temprano rumbo a San Cristóbal de las Casas. Los comandantes tojolabales Tacho, Daniel, Míster, los comandantes tzeltales Abraham y Alejandro y el subcomandante Marcos recorrerán más de 200 kilómetros para llegar a su primer oventic-radio-07 destino: San Cristóbal. Pasarán frente a los cuarteles militares de Guadalupe Tepeyac, Vicente Guerrero, Nuevo Momón y Rancho Nuevo

Los comandantes tzeltales Eduardo, Esther, Fidelia, Filemón, Gustavo, Ismael y Maxo, así como los comandantes choles Abel y Bulmaro, saldrán de La Garrucha (120 kilómetros) y de Moisés Gandhi (60 kilómetros). A las afueras de La Garrucha hay un campamento militar; frente a él pasará la caravana. También mirarán por fuera los cuarteles de Toniná, Ocosingo y Rancho Nuevo.

De Oventic partirán los comandantes tzotziles David, Isaías, Javier, Susana y Yolanda, quienes atravesarán 60 kilómetros pasando junto al campamento militar ubicado en San Andrés.

El gobernador de Chiapas, Pablo Salazar, informó que se estableció un operativo para garantizar la seguridad de la caravana a lo largo de su ruta atendiendo cruceros, desactivando cualquier provocación y se creó un comité de respuesta para atender los imprevistos y emergencias.

La sociedad civil garantizará la seguridad de los rebeldes

Gente solidaria, miembros del Congreso Nacional Indígena, activistas en favor de los derechos humanos, entre otros, acompañarán a la caravana para cuidar la seguridad, informó Concepción Villafuerte, directora del periódico local Tiempo y una de las personas que acompañarán la salida de los zapatistas. San Cristóbal es un hervidero de reuniones, se organizan caravanas de apoyo, se hacen preparativos para la recepción programada para mañana al mediodía y para la concentración, que será más tarde.

Diputados italianos acompañarán marcha

Un grupo de diputados de Italia participará en la seguridad de la caravana, informaron Marco Bonato y Ugo Bogueta, del Partido Refundación Comunista (PRC), en conferencia de prensa.

Marco Bonato hizo un exhorto al gobierno de Vicente Fox para solicitar la participación de la Cruz Roja Internacional y declare que va a garantizar la seguridad de la marcha. "Sería un mensaje del gobierno a los indígenas zapatistas y al mundo de que quiere garantizar la paz en Chiapas", dijo.

En el proceso de globalización, señaló el parlamentario, está la preocupación internacional por el respeto a los derechos humanos, "por eso estamos aquí". Bonato recordó que en 1998, el Parlamento italiano votó una resolución en la que sostienen que los acuerdos de San Andrés son muy importantes para el proceso de paz en Chiapas y demandan su cumplimiento.

Por otro lado, del Distrito Federal salieron 8 camiones con más de 300 extranjeros que acompañarán la marcha.

En un comunicado de prensa, la Red de Defensores Comunitarios de Derechos Humanos, integrada por choles del norte de Chiapas, saludó la caravana y se sumó a la defensa de los derechos indígenas. También demandó al Congreso de la Unión asumir su responsabilidad de legislar a favor de los pueblos indios.

"Por falta de una legislación nacional indígena -afirma la red- no se ha hecho efectiva la justicia para nuestros pueblos, nos niegan la personalidad jurídica y la posibilidad de ejercer la jurisdicción dentro de nuestro territorio, impidiendo que controlemos nuestras instituciones jurídicas, políticas, económicas y sociales".

Anunciada, atacada, menospreciada, vilipendiada, anhelada y, finalmente esperada por muchos, la caravana rebelde dará inicio por fin. La polémica que ha desatado, la causa que defiende, el tiempo que le dedican los medios de comunicación, funcionarios del gobierno, políticos, diputados, empresarios, jerarcas católicos y la expectación entre amplios sectores de la población han convertido a la marcha en uno de los acontecimientos más importante de los últimos años.