SABADO Ť 24 Ť FEBRERO Ť 2001

Ť No obstante, está contento con la presea

Pepe Aguilar sigue afirmando que falta organización en los Grammy

Ť ''Están mal distribuidas las categorías", sostiene el charro

ARTURO CRUZ BARCENAS

Pepe Aguilar tomó con tranquilidad haber ganado el Grammy en la categoría de Mejor Album México-Americano, con el disco Por una mujer bonita. No se puso eufórico como Chucho Valdés ni echó las campanas al vuelo como el carioca Joao Gilberto, quien, según algunos despachos periodísticos difundidos el pasado jueves, puso en alto el nombre de su país.
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Es más, él estaba laborando cuando su esposa (que sí se puso contentísima) fue corriendo a avisarle que había ganado tal premio. "Estaba trabajando, mezclando mi más reciente disco, que saldrá en mayo y que se llamará Lo mejor de nosotros, y nosotros somos Fato y yo. Las diez canciones son de él. Llegó mi mujer corriendo, gritando; es más, pensé que había pasado algo malo".

Pepe no fue a recibir el galardón, pero dijo que "el Grammy significa un interés desmedido de los medios de comunicación, lo cual no se había dado con ningún otro premio; me han hablado de Argentina, Chile, Venezuela, Nueva York, Los Angeles, de Colombia, y de Monterrey, Guadalajara, de todas las radios de México, de todos los periódicos, por eso es que este premio significa una gran responsabilidad, es entrar en un terreno que no había pisado.

"Fui el único mexicano (que ganó el Grammy); hacía muchos años que no pasaba una cosa así", añadió dejando apenas notar cierto tono de orgullo.

El cantante y charro criticó el año pasado la organización de los Grammy Latino, así como la discriminación de géneros incluidos dentro de lo denominado grupero, y el relegamiento de los músicos no sajones o de habla inglesa en pantalla de televisión. Sostuvo: "sigo afirmando lo que dije, lo que creo: que hace falta más organización, más coherencia en cuanto a las categorías que se disputan. Yo siempre he defendido la música que toco y canto. Simplemente veo las cosas objetivamente, no me apasiono, y veo que la balanza no está, valga la redundancia, balanceada.

"Sí, definitivamente hace falta que depuren la manera como hacen los Grammy Latino". Pero... "eso no le resta, para nada, la importancia a la estatuilla en sí, porque un Grammy es un símbolo reconocido a nivel mundial. Critiqué lo que critiqué en su momento, y dije que el día que me lo ganara sería un día muy especial en mi carrera.

"Así fue, pero, definitivamente, ahora que gané un Grammy americano, puedo decir que también está un poquito mal distr  ibuida la cuestión de las categorías. No estoy de acuerdo con que haya tres Grammy para la música tropical, concretamente salsa, merengue e interpretación, y sólo haya un Grammy para norteño, mariachi, grupero y banda, aunque se llame México-Americano. Es cierto, es mucha más la competencia porque son muchos los géneros que están para un solo Grammy. Si van a dar tres Grammy, que no es para nada lo que es en conjunto la música popular mexicana en cuanto a ventas y popularidad, pues no voy a estar de acuerdo, aunque me gane un premio que me haga tan feliz".

Pepe ni siquiera estuvo al pendiente de la premiación por televisión. Eran las cinco de la tarde "y mi mujer estaba metida en Internet, pendientísima. No creía que me lo iba a ganar; no tenía eso en la mente. La vez pasada sufrí una desilusión medio fuerte porque erróneamente mi jefe de prensa me dijo que me había ganado un Grammy Latino, me dio gusto, y a la mera hora no fue cierto. No quise hacerme ilusiones". Lo que sí, para los Aguilar, este fue un premio más.