MARTES Ť 27 Ť FEBRERO Ť 2001
Ť Denuncian ONG argentinas torturas policiacas "en tiempos de democracia"
Diputados socialistas exigen a De la Rúa dejar la política de "alineamiento automático con EU"
STELLA CALLONI CORRESPONSAL
Buenos Aires, 26 de febrero. Reconocidos intelectuales, grupos de derechos humanos, sindicalistas y asociaciones estudiantiles de Argentina enfrentan al gobierno de Fernando de la Rúa por su decisión de establecer que el voto sobre Cuba en la próxima reunión de la Comisión de Derechos Humanos de la Organización Naciones Unidas es potestad presidencial.
La actitud del mandatario y su ministro de Relaciones Exteriores, Adalberto Rodríguez Giavarini, que el año pasado se expresó en un sorpresivo voto de condena a Cuba en Ginebra, ha provocado incluso escozor al interior de la gobernante Alianza, formada por la centrista Unión Cívica Radical (UCR), de De la Rúa, y el centroizquierdista Frente País Solidario.
Los organismos humanitarios locales recuerdan que aquí los responsables de aberrantes crímenes y de miles de desapareciones, durante la última dictadura militar (1976-83), se encuentran libres gracias a leyes que permitieron la impunidad, mientras que la actual administración trata de evadir su responsabilidad ante las solicitudes de jueces extranjeros para juzgar a los genocidas.
Pero además se acumulan, en tiempos de democracia, denuncias por graves abusos, como torturas en comisarías de todo el país, el llamado "gatillo fácil" de la policía, la desaparición de personas e incluso la llamada "muerte social", en alusión al deceso de 55 niños al día por desnutrición y enfermedades provocadas por la miseria.
Ahora existe el temor de que Uruguay se pliegue a un voto de Argentina contra Cuba, después de un encuentro de funcionarios de ambas cancillerías, donde se habló de una posición conjunta. "Si esto fuera así, quedaría evidenciado que -como lo había anunciado públicamente Fidel Castro con palabras que causaron una tormenta diplomática- la cancillería argentina habría sido encargada por Washington de colaborar a un mayor alineamiento en su posición de condena a Cuba", señala un analista local.
De la Rúa salió al paso el anterior fin de semana reafirmando que "la decisión sobre el voto es potestad exclusiva del presidente y la voy a ejercer plenamente como corresponde". La semana pasada, el mandatario reinvindicó además el voto de condena a Cuba.
En respuesta, el bloque de los diputados socialistas democráticos que se apartaron de la Alianza, como Alfredo Bravo, Héctor Polino y Jorge Rivas, exigió al gobierno que abandone la política de "alineamiento automático con Estados Unidos".
Curiosamente, la Alianza llegó al gobierno enarbolando la independencia de la política exterior argentina y el abandono de la política de "relaciones carnales" con Estados Unidos del anterior gobierno del neoperonista Carlos Menem.
Precisamente, asociaciones peronistas alejadas del menemismo divulgaron un documento en el cual recuerdan que "Menem gobernó obedeciendo a Estados Unidos, la Alianza criticó el voto condenatorio contra Cuba, porque era vergonzoso, y cuando todos esperábamos que eso cambiara, ahora apareció con esta posición, que incluso viola las normas de compatibilidades del Mercado Común del Sur".
Para muchos analistas, la obsecación de De la Rúa podría disparar investigaciones sobre la actuación de su cuñado, el marino Basilio Pertiné, durante la pasada dictadura, y otras acciones que se le imputaron recientemente al propio mandatario. El escritor León Rozitchner criticó hoy, en un artículo publicado por Página 12, que De la Rúa haya considerado que el uso del término "lamebotas" por parte Fidel Castro para referirse a este gobierno haya sido interpretado por el presidente como una agresión a la patria. "ƑEl presidente De la Rúa es la Patria o es la fantasía absolutista y solitaria de un presidente transitorio que traicionó impávido las promesas de desarrollar los derechos humanos prometidos en su propia patria?", se pregunta. "Además, seamos honestos, Ƒacaso el acrecentamiento del hambre, la pobreza generalizada, el infanticidio cotidiano, la falta de trabajo, de salud, de educación, no son también derechos humanos arrasados por su propia política (del presidente argentino)?", concluye el también filósofo, al tiempo que la consultora Equis revelaba que 7.5 millones de los 36 millones de argentinos viven con menos de dos dólares diarios, cuando la canasta básica mensual supera los mil dólares.