JUEVES Ť 8 Ť MARZO Ť 2001
Ť La mayoría se involucra poco en su trabajo
40 por ciento de ediles sólo tiene educación básica: Sedeso-INEGI
Ť Según encuesta, 1% no cuenta con instrucción
ALMA E. MUÑOZ
De 2 mil 427 presidentes municipales, 40 por ciento tiene apenas instrucción básica, es decir, primaria y secundaria. Uno por ciento carece de instrucción y 49 por ciento realizó estudios profesionales, según la encuesta nacional Sedeso-INEGI sobre desarrollo institucional municipal 2000.
Y aunque se evidencia una carencia de instrucción, sobresale que la mayoría de los alcaldes (96 por ciento) son hombres, y del total, 87 por ciento proviene del sector privado. Principalmente son originarios del estado a donde pertenece el municipio a su cargo.
Según el perfil profesional de los munícipes, 582 tienen educación primaria; 388, secundaria; cerca de 25 preparatoria, y aproximadamente mil 189 universidad o más. Curiosamente, el que sólo uno por ciento del total carezca de instrucción es equiparable al número de directores de seguridad pública de las diversas alcaldías del país en situación similar.
Estos últimos, de todos los funcionarios municipales, son los menos preparados. De 2 mil 52, 66.5 por ciento (mil 354 aproximadamente) sólo recibieron enseñanza básica; universidad, 17.8 por ciento, y también se formaron, en su mayoría, dentro del sector privado, aunque en comparación con los alcaldes tienen más experiencia en administración pública.
De acuerdo con los datos proporcionados, los presidentes municipales consideran que los factores más importantes a cubrir por los funcionarios son, en orden de importancia: conocimiento del municipio, ética y responsabilidad, vocación de servicio, experiencia administrativa, capacidad de liderazgo, habilidad técnico-administrativa, participación política y en último sitio, cultura general.
En el apartado participación social, de dicho estudio, se destaca que 49 por ciento de los alcaldes se involucra poco; 41 ampliamente; 3 por ciento "frecuentemente boicotea actividades"; cuatro, "a veces" lo hacen, y sólo tres no colabora.
Para su gestión, consideran más importante vincularse con organizaciones comunitarias (faena, tequio -labores comunes- o fajina) y después con agrupaciones vecinales o de obra, consejos ciudadanos y organizaciones religiosas, entre otras.
Sobresale que las metas de desarrollo municipal se ubican de la siguiente manera: bando de policía y buen gobierno, reglamento interior del ayuntamiento, de administración y, finalmente, de obras.