VIERNES Ť 9 Ť MARZO Ť 2001
Ť ''El debate ahorita es por la paz'', afirma el Presidente durante una gira por Guerrero
Somos un gobierno de derechos, no de derecha, responde Fox al EZLN
Ť Bueno Torio y Juárez Cisneros definieron los Marcos que, según ellos, necesita el país
JUAN MANUEL VENEGAS ENVIADO
Acapulco, Gro., 8 de marzo. No somos un gobierno de derecha, sino ''un gobierno de derechos'', afirmó el presidente Vicente Fox, y tras aplicar su ''frase célebre del día'' -como él mismo la definió-, apuntó que el debate con el EZLN nada tiene que ver con la guerra, pues ''el debate ahorita es por la paz, los acuerdos por la paz en Chiapas. šEso es lo único que nos interesa!''.
Indicó que su posición respecto al movimiento zapatista no variará, toda vez que ''para mí, la democracia es libertad... y creo que el propio Marcos jamás se imaginó que iba a tener tal libertad: libertad de hablar, de señalar, de demandar, de transitar, šlibertad de todo ha tenido! Y creo que eso lo ha apreciado mucho México entero... šel mundo entero!''.
A bordo del avión presidencial, de regreso a la ciudad de México luego de una gira por Guerrero (donde dio inicio a la Marcha Hacia el Sur), el Ejecutivo federal conversó cerca de diez minutos con los reporteros. Chiapas, Yucatán y el horario de verano fueron los temas.
Asentó que, para él, ''la ley es la ley'', y bajo ese concepto señaló que si la Suprema Corte de Justicia determina que la Federación no tiene derecho a modificar el huso horario en la capital del país, ''vamos a acatar la decisión, aunque no nos guste''.
Nueva clase de empresarios con compromiso social
Una nueva clase empresarial ha nacido en México; se trata, a decir del presidente Fox, del empresariado ''con compromiso social, que tiene cariño y amor a nuestro país'' y que está decidido a jugársela en proyectos para el rescate de los pobres y marginados. Por eso, subrayó, ''vamos a trabajar juntos y los vamos a apoyar, hombro con hombro, para que sigan adelante con sus inversiones y generación de empleos''.
Fue en la presentación del programa Marcha Hacia el Sur, en el municipio de Chilapa, donde el mandatario reconoció hoy el respaldo que le ha dado la ''nueva clase empresarial'' mexicana. Y con esos apoyos y el convencimiento absoluto de que el plan Puebla-Panamá -por ejemplo- será la panacea contra el rezago del sur-sureste nacional, lanzó la proclama: ''šNunca más un México con regiones abandonadas; nunca más un México sin las mismas oportunidades de desarrollo humano y de desarrollo económico en cada una de las familias, en cada una de las comunidades a lo largo y ancho del país!''.
Programa que sirvió también para que el subsecretario de Ec onomía, Juan Bueno Torio, y el gobernador René Juárez Cisneros, definieran -en provocativo juego de palabras- ''qué tipo de Marcos'' es el que requiere el país... y los dos coincidieron, los Marcos que hacen falta son como el empresario Ricardo Marcos Touché, uno de los invitados a formar parte del Consejo Consultivo de Inversión para el Sureste Mexicano.
''šOjalá tuviéramos tantos Marcos como don Ricardo Marcos, haciendo inversiones en el sureste del país y promoviendo y desarrollando la economía del país!'', exclamó Bueno Torio ante unos 500 habitantes de la región reunidos en una sala adjunta de la empresa maquiladora de mezclilla, propiedad precisamente de Touché.
Y por la puerta que le dejó abierta Bueno, el gobernador de Guerrero se fue con todo: ''De esos son los Marcos que queremos, de los que invierten en México, construyen empleos y generan riqueza en las comunidades más apartadas; de los que con trabajo y compromisos con la nación construyen la paz... la paz, señor presidente Fox, que sin duda es una aspiración de todos y que usted impulsa''.
Quien fuera secretario de Programación y Presupuesto en el gobierno de Rubén Figueroa Alcocer, marcado por los hechos de Aguas Blancas, hoy se dijo pacifista, porque ''en Guerrero sí sabemos lo que vale la paz, porque conocemos la violencia. Aquí sabemos que la violencia histórica nos ha llevado al atraso y a la anarquía. Sabemos que la violencia sólo ha permitido enlutar hogares y atrasar la solución de los problemas''.
Por eso, según Juárez Cisneros, ''le apostamos a la paz, le apostamos a la concordia construida no en panfletos ni en discriminaciones innecesarias, sino a la paz sólida, profunda y duradera que se da y se construye a partir del respeto... esa es la paz en la que creemos los guerrerenses, la paz que entendemos que Vicente Fox está impulsando; la paz que conlleva así, en su voluntad y disposición, una actitud tolerante de un gobernante que ha demostrado que esa expresión de la democracia es precisamente la tolerancia, el diálogo, la disposición para construir acuerdos en bien de la República''.
Las palabras de Bueno y de Juárez Cisneros llevaban dedicatoria clara al EZLN y sus dirigentes. Fox, en tanto -evidentemente complacido-, evitó ya tocar el tema de la marcha de los zapatistas y la advertencia del subcomandante Marcos: latente, la vía armada...
En Chilpancingo, Fox y Juárez Cisneros volvieron a hacer mancuerna, esta vez ante empresarios y políticos locales reunidos para comer en el exclusivo Conjunto Jacarandas. El Presidente siguió dejando que el gobernador contestara al EZLN y, claro está, a los otros grupos guerrilleros identificados en el estado: ERPI y EPR.
''En este pueblo suriano estamos por la construcción de la paz y exigimos que todos pongamos nuestra parte; la paz en México y en Guerrero no se construye, no se edifica con descalificaciones, con tratar de arrinconar al que está enfrente, ni con discursos que buscan las primeras planas de los periódicos y espacios crecientes en los medios'', insistió Juárez Cisneros y terminó por declarar su ''incondicionalidad'' a Fox Quesada, cuando se trate de trabajar por la ''reconciliación y el reencuentro''.
''A ver si me le dan al gobernador la de ocho''
El Presidente estaba más que satisfecho por los comentarios de su anfitrión, a tal grado que, más adelante, ya casi para emprender el viaje de regreso a la capital del país (en la inauguración de un laboratorio de estudios criminalísticos), se dirigió a los reporteros y sonriente les dijo: ''šA ver si me publican íntegro lo que dijo el gobernador! šA ver si me le dan la de ocho!''.
En la misma comida con los empresarios, en su oportunidad, Fox definió su administración y metió ahí una respuesta breve al zapatismo:
''No somos, de ninguna manera, un gobierno de derecha; somos un gobierno de derechos, que es muy diferente. Un gobierno de derechos que respeta los derechos políticos de los ciudadanos, que respeta el derecho a la libertad de expresión, a la libertad de religión, a la libertad de creación, a la libertad de información... que respeta el derecho a transitar libremente por el país, que respeta el derecho a las marchas, como la que estamos viviendo, la de Chiapas a la ciudad de México, hacia la gran Tenochtitlan. Hay el espacio abierto, totalmente abierto, para la expresión de todo mundo, para el debate de las ideas''.
Ya en el avión, Fox Quesada amplió sus comentarios sobre la marcha de los zapatistas que, por la noche, llegaron al Distrito Federal.
-Marcos dice que...
-No hombre, hoy estuvo muy tranquilo Marcos -atajó el Presidente el intento de pregunta.
-Es que dice que mientras...
-šEs que no entusiasma nada cuando tienes 200, 300 gentes en los mítines -volvió a detener al reportero.
-Dice que si el sistema neoliberal persiste, está latente la vía armada -se insistió.
-No, no hay debate sobre eso. El debate ahorita es por la paz. Todo lo demás, el debate ideológico, el día de mañana se dará -concluyó el mandatario.