No se sabe si Roy Sullivan existió. Dicen que fue guardabosques, en algún lugar de los Estados Unidos, y dicen que sobrevivió a siete rayos. Las versiones que corren sólo son precisas en las fechas: en l959, un rayo le arrancó la uña de un dedo del pie; en l969, otro rayo le voló las cejas y las pestañas; en l970, otro rayo le achicharró el hombro izquierdo; en l972, otro rayo lo dejó sin pelo; en l973, otro rayo le quemó las piernas; en l976, otro rayo le abrió un tobillo; en l977, otro rayo le calcinó el pecho y el vientre.
Pero no vino del cielo el rayo que le partió la cabeza. En l983, dicen, Roy Sullivan se pegó un balazo, después de escuchar la frase, o la palabra, o el silencio, de una mujer. Dicen.