Ť Liquidará una docena de instituciones que la CNBV mantiene bajo su control
Empleará el gobierno más recursos para sanear el sistema financiero
Ť Utilizará un crédito de Nafin por 35 mil millones de pesos para desincorporar los bancos
Ť El rescate bancario ha tenido hasta ahora un costo de 724 mil millones de pesos
ROBERTO GONZALEZ AMADOR
En la misma línea marcada por su predecesor, el nuevo gobierno se apresta a comprometer recursos públicos para completar el proceso de saneamiento del sistema financiero, a través de la liquidación de una docena de instituciones de crédito que mantiene bajo su control la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y que en la práctica ya no prestan servicio.
Fuentes financieras confirmaron que un crédito
de Nacional Financiera (Nafin) por hasta 35 mil millones de pesos será
empleado para liquidar a esos bancos, mediante su traspaso formal al Instituto
para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB).
La información, recogida entre directivos de la
Comisión Nacional Bancaria y de Valores, establece que Nafin aprobó
a finales de febrero el préstamo con el que se liquidarán
definitivamente los activos que la Comisión mantiene de bancos como
Inverlat, Bancrecer, Unión, Cremi, Oriente, Obrero, Interestatal,
Sureste, Capital, Industrial, Promotor del Norte y Anáhuac.
Este grupo de bancos no operan desde que fueron intervenidos por la CNBV en el contexto de la crisis financiera que estalló en 1995.
Desde esas fechas, la institución transfirió al entonces Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa, hoy IPAB) la cartera de crédito y activos recuperables, mientras mantuvo la administración de los activos calificados como irrecuperables.
Hasta ahora, los bancos que mantenía en su poder la CNBV no habían sido transferidos al IPAB.
Hace un mes, el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, Johnathan Davis, comentó que se trabajaba en el proceso de transferencia de los bancos al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario .
El mecanismo encontrado por el nuevo gobierno para liquidar definitivamente los bancos en poder de la CNBV, que en la práctica ya eran unos meros membretes puesto que no operaban y los bienes recuperables habían sido ya transferidos al IPAB ?como los casos de Inverlat, Unión, Cremi y Bancrecer? es similar al seguido por la administración del ex presidente Ernesto Zedillo.
Mediante el mecanismo dispuesto, recursos públicos por 35 mil millones de pesos serán aportados por Nafin para financiar la operación, con la que se pretende dar un paso definitivo en la conclusión del proceso de saneamiento financiero iniciado en 1995.
Nacional Financiera no tiene entre sus objetivos apoyar operaciones de rescate bancario, sino apoyar financieramente a pequeñas y medianas empresas.
Este diario solicitó a voceros de Nacional Financiera y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores detalles sobre esta operación, pero ambas instituciones no respondieron a la petición.
El rescate bancario emprendido por el gobierno zedillista generó para los contribuyentes un costo de 724 mil millones de pesos.